Norrin Radd renunció a su libertad para salvar a su planeta, convirtiéndose en Heraldo del Devorador de Mundos, Galactus. Enfundado en metal galáctico, con un tablero que obedece todas sus órdenes mentales, y dotado del poder cósmico, ahora surca el Universo como brillante centinela de las rutas espaciales
#127 – ¡Derrotado!
Por Anjuin Elekhan
Fecha de publicación: Mes 9 – 1/99
PORTADA: En primer plano, a la izquierda, aparece Galactus, que proyecta un rayo de energía hacia la gran construcción, ahora derruida. Los superhéroes Estela Plateada (Fennan Radd), Mar-vell y Nova, contemplan la escena. Abajo, en fila, los rostros de Adam Warlock, Las Dos Entidades, y Mefisto, con un rótulo: ESTRELLAS INVITADAS.
CAPÍTULO VI:
Aún de lejos, Estela Plateada observa la grandeza de su antiguo amo, Galactus. En otro tiempo, le debió obediencia. Pero las cosas cambian.
– ¿Que buscas aquí, Galactus? ¿Acaso vienes a ser juzgado tú también?
– Sabes que no puedo ser juzgado, pues Galactus sólo toma lo que necesita. Así ha sido desde el principio de los tiempos, y así será hasta el final de ellos.
– ¡No! ¡No importa tu nombre! ¡No importa tu posición en la escala! ¡Un crimen sigue siendo un crimen, y debe ser castigado!
– Y eso lo dice el mayor asesino de todo el Universo…- Mar-vell no está dispuesto a callarse…
– En otra realidad, Estela, tú eras mi heraldo, y me condujiste a numerosos planetas… ¿No te convierte eso en acusado?
– Eso se acabó, Gran Galactus. TÚ manipulaste mi memoria y mi mente, bloqueándome para que te condujese a mundos habitados. Eso te convierte en culpable. Ya ha pasado el tiempo de los remordimientos. Ahora, asiste al primer juicio…
Estela Plateada se levanta del asiento de juez, y su fiel tablero acude a él, llevándole hasta la celda de energía, que contiene a cuatro de los seres más poderosos de este Universo. Y tan sólo una parte de ella se abre, y deja salir de ella a la entidad que permanece en penumbras…
– Tu único crimen ha sido atacarme… Ninguna vida ha sido tomada. Así pues, puedes marcharte.
La entidad se alza, con una mirada de odio profundo en sus ojos, y cuando Norrin Radd se da la vuelta, se lanza a golpearle…
– ¡¡Alto!! – Al grito del ser que permanece junto a Galactus, la entidad se detiene, y se gira. Observa el gesto del otro ser, y se retira enojado.
– Mi venganza deberá esperar.- Muy lentamente, se dirigió hacia el lugar donde se encontraba Galactus…
– No te preocupes, hermano, nuestra hora aún no ha llegado.
Estela Plateada prosigue mientras tanto con su locura. De nuevo se desplaza sobre su tablero hasta el asiento de juez. Desde allí, lanza una fúnebre mirada hacia la celda, y por un momento, parece que va a reconsiderar su postura. Pero menea la cabeza, y retoma el juicio por donde lo dejó.
– Nova, Fennan Radd, Mar-vell. Yo, Estela Plateada, os acuso. Fennan, la muerte de Alicia Masters pesa sobre ti. Mar-vell, numerosas han sido las muertes que han acompañado a tus hazañas… Nova, tu condujiste a Galactus a mundos habitados, entre ellos el Mundo-Trono Skrull, sin la excusa de haber sido manipulada tu memoria, y por ello, todos merecéis la MUERTE…
– ¡BASTA! – Galactus interviene de nuevo, y esta vez, se interpone entre Estela Plateada y los acusados…
– Veo que Odiel hizo bien en avisarme. Has perdido la razón, Norrin Radd. ¡Lo que Galactus provocó, que Galactus lo remedie!
Un impresionante rayo parte de los ojos de Galactus, abarcando toda la figura de Estela Plateada. Durante unos instantes, todo parece solucionado. El plan de Odiel ha resultado un éxito…
Pero, si bien en otra realidad Galactus podría haber finalizado con Estela Plateada en un abrir y cerrar de ojos, en esta no parece resultar tan sencillo…
El rayo de Galactus aún cubre a Estela Plateada, mas súbitamente, se escucha un grito desaforado, de angustia, fuerza, y victoria…
El rayo del Gran G desaparece de pronto, sobrepasado por otro proveniente de Estela Plateada, que sobre su tabla irradia una luz apenas soportable, rebosante de energía cósmica… En su rostro, una horrible mueca de triunfo, que hace retroceder instintivamente a Galactus…
– ¡Nada pueden los seres impuros contra Estela Plateada! – Su voz es grave, parecida a una sentencia…- TÚ me hiciste lo que soy, Galactus, pero en otra realidad. Aquí ningún poder tienes sobre mí… Ahora, ¡márchate! Galactus, por un momento, duda. Jamás nadie en los millones de años de su existencia, había osado desafiarle. Jamás nadie había resistido tan bien su ataque. Pero Galactus no se rinde…
De sus dedos comienzan a emerger rayos de Bioenergía concentrados hasta alcanzar un poder insospechado. Cada uno de ellos podría destruir un mundo, pero para eso tendría que acertarle, y Estela Plateada, acostumbrado a las enormes velocidades, desafía a su antiguo amo, navegando entre sus rayos y esquivándolos como si fuesen enormes y estáticos. Su sonrisa es desafiante…
– Agotarás tus reservas de energía antes de alcanzarme con alguno de tus rayos, Galactus. Sabes que puedo pasarme una eternidad esquivándolos.
– ¡¡Pero no si yo te impido moverte!!– La entidad que estuviese encerrada junto a Nova, Fennan Radd y Mar-vell se abalanza sobre él, desequilibrándole y arrojándole hacia el asiento de juez… El impacto destruye la construcción, y enormes pilares se desprenden y caen sobre su cuerpo, en el mismo momento que Galactus arroja sobre él la energía acumulada, con la indiferencia de quién aplasta una hormiga. Lentamente, la celda de energía que impedía que Nova, Estela y Mar-vell interviniesen se disipa… La construcción desaparece. Pero el cuerpo de Estela Plateada no está.
– Todo ha acabado, maestro.- Fennan Radd se acerca a un encogido y debilitado Galactus.- Dejadme que os conduzca a algún mundo para que recuperéis las energías…
Así, el Gran Galactus y su primer y único heraldo parten del lugar de la batalla, seguidos de Nova y Mar-vell, que aún no se creen lo que ha ocurrido.
Galactus y los demás han desaparecido, pero aquellas entidades permanecían aún en el lugar de la confrontación.
– Hermano– su tono resuena triunfante en la penumbra que le rodea.- Odiel, todo marcha según lo planeamos. Pero eso era algo ya previsto…
– Sí, sin duda lo es. ¿Lo tienes?
– En efecto. Estela Plateada es nuestro prisionero.
Las risas de los dos hermanos atraviesan galaxias…
– No debería estar aquí. Lo sé, porque un día lo supe todo. Algo no marcha como debiera. Pero, ¿el qué? Ahora las gemas están desaparecidas. Yo, Adam Warlock, lo sé. Pero entonces ¿Qué hace Norrin Radd aquí, en Mundo Alma conmigo?
«En el vasto microuniverso del entorno de la gema alma, Adam sostiene la cabeza de un abatido Estela Plateada, que yace inerte en suelo, al que parecen haber abandonado sus enormes fuerzas… Aprovechándose del lazo existente entre sus dos almas, Warlock ordena al tablero del surfista cósmico que lo recoja. Se sube en él, y se lo lleva.»
*El negro Universo que lo rodea le satisface. Últimamente le ha sido otorgada la comprensión, y el triunfo se acerca. Los Hermanos tenían razón. Poco a poco los acontecimientos iban tomando forma, la forma que ellos habían proyectado. Pronto toda la miríada de realidades se rendirían a sus pies… Nada, nadie, podría impedirlo. Sonríe. Pronto él volverá a reinar. Por fin podrá abandonar esta odiosa dimensión entre la vida y la muerte. Pronto él, MEFISTO, volverá a ser el de antes… ¿Acaso no fueron ellos los que requirieron de su sapiencia? No puede evitar estallar en carcajadas: ¡Por fin, Estela Plateada derrotado para siempre!*
Fennan conduce a Galactus hasta su Nave-Mundo, donde queda su amo.
– Apresúrate, Fennan, pues me temo que me queda poco tiempo de vida.
– Pero, Galactus, eres una de las fuerzas del Universo. Fuiste el primero, y serás el último…
Y eso era precisamente lo que Fennan temía. ¿Qué acontecimientos tendrían lugar si Galactus muriera? ¿Sería el fin del Universo? Prefirió no seguir esa línea de pensamiento. Dejando de lado sus escrúpulos, condujo a Galactus hasta un mundo habitado, donde pudiera saciar su hambre y de nuevo volver a ser como antes.
Hola, Anjuin:
En principio no iba a escribir, pero quería saber si te habías fijado en que si Fennan es el primer heraldo de Galactus, entonces no tiene sentido la existencia de Nova como tal, ya que nunca habría llegado a ser la heraldo… Y por lo tanto, no podría surcar el espacio.
Desconocido
Pues bueno. Está visto que no pasais una. Así se ve que estais atentos, y me gusta. Verás, Desconocido (La próxima vez no olvides el remite), es que la existencia de Nova en esa realidad era una sorpresa que me estaba guardando, pero no te preocupes, no es una incongruencia (Espero que Riv me perdone el empleo de esta palabra). Todo tiene explicación… (¿O no?)
Hola Anjuin:
Hasta que por fin me animo a escribir a un guionista Marveltopia. La verdad es que no me interesaban mucho los personajes Marvel. Conoci A Estela Plateada gracias a la serie animada de Fox y vaya que resulto interesante. Si es como me han contado, que la serie es fiel al espiritu con el que Kirby hizo las primeras historias de Estela Plateada, pues vaya que eran buenas!
Permiteme felicitarte. Tus argumentos parecen interesantes aunque el suspenso de episodio en episodio esta matandome. Me gusta mucho el hecho de que presentes la mayor parte de los episodios desde una perspectiva donde podemos suponer lo que piensa Norrin Radd pero sin que estemos seguros de cual es su verdadero interior. Lo hace mas intrigante y mas cosmico. Y te digo esto porque es mas o menos lo que haria con Hal Jordan si alguna vez lo de DCTopía definitivamente anda.
La pregunta: ?Quien es Fennan Radd? ?Acaso en el Universo Marvel se permiten otras realidades? ?Es algo asi como el multiverso DC? !Alguien expliquemelo, por favor!
Y me despido esperando ver a Adam Warlock por estas paginas. Aunque no se de el desde la Cruzada del Infinito asi que si le paso algo agradeceria que me lo cuentes.
Saludos
Ripley Hunter
Amo del Tiempo
Hola, Ripley Hunter. Encantado de recibir noticias tuyas. En primer lugar, gracias por las críticas. En respuesta a las preguntas, Fennan Radd es el hermano de Norrin Radd, al que éste nunca llegó a conocer realmente. La solución a su aparición fue que Estela Plateada, en el número anterior al comienzo de Marveltopia, descubre que Zenn-La nunca ha existido, sino que era una visión, un engaño producido por Galactus para no dañar a Norrin Radd.
Por otro lado, en Marvel, que yo sepa, no se suele recurrir mucho a un multiuniverso, aunque en ocasiones ha habido situaciones que partían de ese mismo Multiuniverso, aunque repito que no es habitual. Y yo he recurrido a una realidad diferente para que conociera a Fennan Radd, su hermano, algo más en profundidad y resolviese todos aquellos conflictos que tenían ellos. (Fennan se terminó casando con Shalla-Ball). Espero que esto satisfaga algo tus dudas. Si quieres saber algo más, pues ya sabes donde escribirme.
SALUDOS DESDE EL CIELO.