En cada rincón de Marveltopia están pasando cosas, desde las profundidades de Atlantis a las ciudades volantes de la gente pájaro, desde el microverso dentro de una probeta hasta la lejana Nebulosa Oscura. Nada se pierde, todo está quedando registrado. Descúbrelo en…
#6 – Aviario
Por Nighthawk
Fecha de publicación: Mes 42 – 10/01
Hora: 02:07 A.M.
Lugar: Prisión de la Isla de Ryker
Está nevando esta noche. La luna y los focos iluminan el patio. Una figura se esconde en las sombras y entra, forzando una puerta. La galería está silenciosa. No hay ningún guardia. El furtivo chico camina despacio, sube la escalera y se dirige a una celda en particular. Dentro de esta celda está J.C.Pennysworth tendido en su catre, de espaldas. El chico abre su cerradura sin un solo ruido, es muy bueno en esto. De un bolsillo saca un largo cuchillo de cocina y lo agarra con fuerza.
Si cumple con lo pactado saldrá de Ryker en 10 días. Está harto de esta grillera. Su jefe, Cabello de Plata, le recompensará bien. Da un paso, decidido, hacía el hombre del catre. De repente le agarran desde atrás. Le tapan la boca, le cogen los brazos. Él mira asustado, dos hombres lo tienen cogido. Forcejea, pero son muy fuertes. Un golpe en las costillas, otro en la cabeza y ya no forcejea más.
Pennysworth se gira y hace una seña a los dos hombres. Ellos se llevan al chico; por la mañana encontrarán su cuerpo sobre el suelo de la planta baja. Será un aviso, pero Pennysworth se revuelve en su camastro. Se están acercando demasiado (piensa preocupado).
Hora: 02:11 A.M.
Lugar: Dentro de un Masseratti Ghibli azul oscuro, camino del muelle.
En el coche, cinco pasajeros. Dos delante y otros dos detrás escoltando a la atada e inconsciente Corneja. Jack Norriss, en el asiento trasero, mira por la ventana.
-Oye Luca, ¿De verdad tu primo está bien? -dice el conductor al copiloto mientras mira hacia atrás por el retrovisor- No tiene muy buen aspecto.
-Tranquilo Paolino, mi primo es un profesional, ya lo iras conociendo.
Norris esboza una sonrisa.
El coche llega a los muelles del Hudson. Un par de guardias saludan a Paolino, que ha bajado su ventanilla tintada. Aparcan en el muelle 26.
-Vamos a cargamos ya a la invitada, que nunca se sabe con estos disfrazados, igual la tiramos al río y sale volando con cemento y todo. Juaa ja ja (ríe el quinto pasajero desde el asiento de atrás)
La carcajada se hace general. Jack aprovecha el momento y con un golpe de karate en el cuello del gracioso lo deja K.O., rápidamente golpea con el puño la sien del conductor mandando también a Paolino al país de los sueños.
-Eres rápido Norriss, no te ha visto nadie (dice el «primo» Luca). Espero que lo que te traes entre manos sea importante porque como te puedes imaginar S.H.I.E.L.D. acaba de perder un topo en la organización de Cabello de Plata.
-Gracias «Luca», sin tu ayuda no hubiera podido salvar a la chica, y la voy a necesitar en cuanto despierte. Así que era el viejo canoso el que quería el traje de Halcón Nocturno ¿no? Mi informador me dijo que alguien lo buscaba pero no me dijo quien.
-Lleva un tiempo planeando algo Norriss, pero no tengo ni idea de para que quiere el traje. Oye ¿y para que lo quieres tú?
-Bueno…la verdad es que mi sueño siempre ha sido…
En ese momento La Corneja abre los ojos y se despierta sobresaltada. Se incorpora como un rayo, rompiendo sus ataduras con sus afiladas alas, con cara amenazante. Levanta los brazos y asoman por sus mangas sendas jabalinas cromadas.
-Tranquila, tranquila, soy yo. ¿Te acuerdas de mi? Te acabo de salvar la vida, y es la segunda vez hoy. Debo ser tu ángel de la guarda así que baja eso. Por favor.
-Ohhhhhh. Mi cabeza… Esa sabandija de Cabello de Plata y su nene. Ohhhh esta sí que me la voy a cobrar, en especie. Dejadme salir del coche, voy a hacerle una visita a ese hampón moroso.
-Alto Corneja, esto está en manos de S.H.I.E.L.D. No puedo permitir que interfieras (dice Luca apuntando con su pistola a la mercenaria).
-¿Y tú me lo vas a impedir? Me gustaría verlo «agente» (la Corneja saca de nuevo la jabalina de un antebrazo, dispuesta a quitarle la pistola a Luca y de paso unos cuantos dedos si puede).
-¡Alto! Vale ya, los dos. Luca, si voy con ella no habría ningún problema ¿no? Yo podría representar a la agencia en todo esto. Y tu…Corneja, esta claro que en tu estado físico no podrías hacer mucho contra una fortaleza del hampa armada y alerta.
-Ni aunque se entrenara los próximos tres años no tendría nada que hacer contra Cabello de Plata (rumia Luca).
-Luucaaa….(sigue Jack) Así que voy con ella, además tú tienes mucho «papeleo» aquí (dice señalando a los dos mafiosos durmientes del coche).
Hora: 02:14 A.M.
Lugar: Mansión-Fortaleza de Silvio Manfredi (alias Cabello de Plata). Little Italy. Manhattan.
Dentro de la oscura sala central Ala Negra, el hijo de Silvio Manfredi, se viste el robado traje de Halcón Nocturno mientras escucha la resonante voz de su padre, que le habla desde el enorme monitor que preside la habitación.
-Vamos a sacar mucho rendimiento a esto, hijo. Ya tengo planeado nuestro primer movimiento.Escucha atentamente.
Ala Negra, con el traje casi puesto, a falta de la capucha, se para para escuchar a su padre.
-Nuestros negocios en la zona de Chinatown se están encontrando con un escollo, el problema se llama Caballero Luna. Este policía enmascarado tiene también una guerra privada con uno de nuestros potenciales rivales: el Imperio Secreto. Bueno, pues los enfrentaremos a los dos, y en ese enfrentamiento tú, como Halcón Nocturno, ayudarás al Caballero Luna.
-Entiendo. Así me ganaré su confianza.
-Cierto hijo. Pasaremos información sobre una base de Imperio Secreto al Caballero Luna a través de los taxistas de New York, sabemos que tiene algún enlace allí. Conoció al antiguo Halcón Nocturno, pero no tanto como para sospechar. Es perfecto. Mientras estés cerca de él será totalmente vulnerable a nuestra organización, sin que nadie sospeche de ti, del Halcón Nocturno. Acabaremos con él cuando queramos. Y eso sería solo el principio, hijo, tengo planes parecidos con Spiderman, Daredevil, el Castigador y estoy pensando uno para el Halcón, pero es más difícil de localizar.
Ala Negra sonríe mientras se ciñe la capucha de su nuevo traje. Extiende el brazo y prueba su arma lanzando un pequeño garfio retráctil desde el antebrazo. Su sonrisa se torna carcajada, que resuena en la sala, mientras el semblante serio de Cabello de Plata le observa desde la pantalla.
Hora: 02:23 A.M.
Lugar: Sobre Manhattan, camino de Little Italy.
Volando sobre los tejados del Soho van La Corneja y Jack Norris. Ella avanza con sus alas extendidas, él encima, agarrado al cuello de ella. «Piensa en la aerodinámica» dijo la chica. «Soy un soldado, un espía, un profesional» se repite a si mismo el chico mientras la curtida mercenaria mueve ligeramente sus piernas para dar una suave curva.
-¿TIENES ALGÚN PLAN? (grita Jack en la oreja de la chica)
-¿QUE? (se sorprende La Corneja)
-Quiero decir… QUE CÓMO VAMOS A ENTRAR EN LA MANSIÓN DE CABELLO DE PLATA.(Jack)
-Ah! NO SÉ, LO QUE TU DIGAS.(Corneja)
-BUENO…PRIMERO YO POR ABAJO Y LUEGO TU ARRIBA. ¿TE PARECE BIEN? (Jack)
-BIEN. SI LO PREFIERES ASI…(Corneja)
Pasan la Av.Lafayette, meditabundos.
-ME BAJO. YO ME BAJO AQUI. (grita Jack)
Ella desciende lentamente en un callejón poco transitado. A Jack se le queda enganchada una manga de la chaqueta (traje italiano, claro) en una de las afiladas plumas de La Corneja. Se separan de un golpe, un pelín ruborizados.
-Ehhhh… Nos separamos aquí ¿no? (Jack)
-Uhhhh…Vale.(Corneja)
-Da un par de vueltas a la manzana y entra tú.(Jack)
-Muy bien. Suerte.(Corneja)
-Suerte. Nos vemos (Jack se despide con la mano, la manga del traje está rajada a la mitad. Ella esboza una sonrisilla burlona)
La chica está a punto de salir volando cuando él se gira y la coge del brazo.
-!Espera¡
-¿Si?
-Necesitamos un nombre clave para poder llamarnos. Quiero decir… para comunicarnos si se da el caso.
-Interesante… ¿Cual sería el tuyo? (ella ya está un poco de coña).
-Pues… Jack. Fácil ¿no?
-Bonito nombre…nombre clave, quiero decir. Tú me puedes codificar a mi como Noko ¿Ok?
-¿Noko?
-De Nokomis. Es navajo, si te parece raro no te creerías como se llamaba mi abuela1…
-Ohh…¡navajo!…
-Bueno, ¿vamos o qué?
-Sí, sí, claro.
Hora: 02:37 A.M.
Lugar: En la puerta de la mansión de la familia Manfredi
Dos matones trajeados guardan la entrada, con el rostro serio y evidentes bultos en el abrigo. Los vecinos, asombrados, pasan mirando a otro lado.
Un hombre se acerca tambaleándose, saliendo de la oscuridad de la noche. Los chicos de la puerta cargan raudos sus armas con toda la discreción posible.
-¡Alerta! ¡Alerta! Avisad al jefe…(dice el herido transeunte). El pájaro ha volado.
-Es el primo de Luca. Avisa a Ala Negra. Yo me quedo (le dice un mafioso a otro).
El que se queda en la puerta se acerca al supuesto herido. Su arma sigue preparada.
-¿Que ha pasado? ¿Donde están Paolino y tu primo? (dice el mafioso)
-El fin esta cerca… Moriremos todos…
-¿Estás bien ragazzo? (el mafioso insiste)
El mafioso está en cuclilas delante de Jack (lo habíais adivinado ¿verdad?) que está tumbado boca abajo. El ex-agente de S.H.I.E.L.D. ataca duro al guardián en su punto vulnerable más cercano: puñetazo demoledor en la entrepierna. El chico de la mafia cae fulminado (sus daños no serán permanentes).
Jack coge su pistola y abre la puerta de un golpe. Las alarmas empiezan a sonar. Un cuerpo trajeado cruza el umbral. Recibe dos tiros (uno en el brazo, que se lo rompe, y otro en el costado que, afortunadamente, paró una costilla). Era el portero. Otro cuerpo trajeado (Jack) entra de un salto mientras dispara hiriendo al mafioso 2 (llamémosle mafioso 2) en el hombro derecho (casualmente era diestro).
Por la gran escalera del fondo bajan dos mafiosos (3 y 4) y otro más sale de la cocina (le llamaremos mafioso 5). Al momento sus armas empiezan a escupir plomo. Jack está al descubierto pero las primeras balas fallan por muy poco (¡Uuuyyyy!). Nuestro héroe, bajo el fuego enemigo y mientras busca un parapeto, dispara dos tiros; de los cuales uno impacta en la pistola del mafioso 3 (destrozándola y abriendo en su mano una profunda herida que sangra profusa), y el otro se pierde (se pierde…) hacia el piso superior.
Jack salta como un puma y se resguarda tras un modesto paragüero mientras el mafioso 5 se acerca peligrosamente sin dejar de tirar (acierta varias veces en el paragüero, que resulta ser a prueba de balas y estar bastante bien sujeto).
Norriss asoma la cabeza (mientras una bala silva a milímetros de su cráneo) y le estampa un certero tiro (desde luego, fue certero) al mafioso 5 en mitad de la rótula derecha (sin afectar, eso sí, a ninguna vena ni arteria vital2) dejándolo por el suelo gritando el nombre de un fuerte analgésico.
El mafioso 4, que iba bajando, ya casi está en la base de la escalera cuando dos más empiezan a bajar desde arriba y otros tres comienzan a disparar con armas automáticas desde el piso superior. Jack se encoge y resguarda como puede ante la orgía de destrucción que cae sobre él, destrozando prácticamente toda la entrada.
El paragüero está en las últimas y lo inevitable finalmente sucede: una bala impacta en la muñeca derecha de Jack, de refilón. Su arma cae. La herida no es profunda pero ha perdido toda la sensibilidad en su mano diestra. Coge la pistola con la mano izquierda.
-Aún me quedan dos balas (piensa)
De repente una enorme explosión hace retumbar la estructura de la casa.
¡¡¡¡BBBBBOOOOOOOOOOOUUUUUUMMMMMMMM!!!!
Los cristales estallan, las lámparas victorianas se vienen abajo y parte del techo cae sobre el hall, creando una enorme nube de polvo. Milagrosamente no hay ningún muerto3.
-Ya era hora.(susurra Jack mientras sube la escalera tapándose la boca y la nariz con un pañuelo4, invisible por la polvareda levantada)
Arriba, en el destrozado tejado, La Corneja ataca a los pocos mafiosos que se atreven a hacerle frente después de haber derruido una parte de la mansión con una potente bomba de mano. Ella revolotea lanzando mil proyectiles iluminada por las llamas, como un ángel vengador, mientras el fuego se extiende por la casa.
-¡¿Donde estás, viejo?! Sal de tu escondite Cabello de Plata, tienes una deuda que pagarme *$&º@##5.
Entonces, de entre el denso humo surge la majestuosa figura del Halcón Nocturno, elevándose con los brazos en cruz, extendidos. La Corneja calla un momento, impresionada por la terrorífica aura que desprende la imagen del hijo de Cabello de Plata alzándose como un fénix entre la destrucción. Las sombras de la noche cubren su cara mientras gruñe con ira:
-Vas a morir zorra6.
El vástago de la Mafia se prepara, amenazador, al llegar a la altura de La Corneja. Sus músculos se tensan. La sobrepasa viendo su cara de sorpresa mientras continua su ascenso, imparable. En pocos segundos la casa es un esbozo diminuto en el lejano suelo.¡Y sigue subiendo!. El falso Halcón Nocturno, contrariado, manipula su mochila propulsora y consigue al cabo de un rato hacerse con el control de su vuelo.
-Tenía que haberla probado antes.¡Mira que lo dije!, pero nada. El jefe es el que manda. Señor…que vergüenza.(Piensa el antiguo Ala Negra a la vez que desciende en picado a velocidad de vértigo)
Llega en un suspiro, alerta, pero ahí ya no hay nadie. Mira en todas direcciones pero la mercenaria no está. Desde el tejado un mafioso le hace señas y le grita algo.
-¿¿Que?? (Grita el heredero del imperio del crimen)
-¡Detrás de ti, Ala Negra! (Se desgañita el empleado)
Demasiado tarde. La Corneja golpea sin piedad al desprevenido malhechor, con las cromadas jabalinas extendidas saliendo de sus antebrazos. Los papeles se invierten y el gran halcón es arrollado por la pequeña corneja.
-¿Querías tomar el aire, hijo de papá?
Suspendidos ambos en el aire, la chica castiga con dureza al pillo con una serie de violentos mamporros. Le da durante varios minutos, hasta quedar exhausta. Ella nota entonces que sus manos le duelen. La dura coraza del Halcón Nocturno (realizada en un tejido revolucionario desarrollado, mientras el Halcón Nocturno original aún vivía, por la Richmond Inc. y una de las principales novedades del nuevo traje) ha hecho su trabajo y el impostor sonríe, casi intacto, mientras agarra con fuerza por el pescuezo a la dolorida y cansada moza.
El falso Halcón Nocturno rodea con sus manos el cuello de La Corneja y aprieta con saña mientras ella patalea impotente, viendo ya próximo su fin. Los dos están sostenidos sobre el frío viento, en un macabro cuadro. Todo se vuelve negro para nuestra mercenaria favorita, que resiste con sus últimas fuerzas mientras el despiadado halcón la estrangula.
De repente suena un disparo.
BLAAMMMM
En el brazo del Halcón Nocturno impacta una bala, disparada desde el maltrecho techo de la mansión Manfredi. La bala no ha penetrado el asombroso tejido del nuevo traje del emperador del crimen, pero el golpe del proyectil ha sido duro. Suelta a La Corneja, que cae al suelo desde unos 10 metros. El brazo del hampón no está roto pero el dolor es intenso y no puede moverlo.
Con rabia se gira en el aire. Despacio. Sigue nevando y los copos parecen caer lentamente a su alrededor. De pie, en el precario tejado le apunta un hombre armado. No distingue bien su forma, está oscuro. Se acerca, cerniéndose sobre su presa. El fragor de las llamas ilumina la figura del tirador, que vestido con las ropas de Ala Negra sostiene la pistola con una sola mano, la zurda. A sus pies se adivinan dos inconscientes sicarios.
-¿¿QUIEN ERES TÚ?? (grita quien no es Halcón Nocturno)
-Soy tu peor pesadilla, Manfredi.(responde quien no es Ala Negra)
El halcón se lanza sobre el cuervo, que le evita por muy poco. El halcón vuelve a caer sobre Jack (también lo habíais adivinado ¿no?). Esta vez el choque es inevitable y los dos se precipitan al interior de la mansión en llamas, a través del frágil techo hasta el suelo del piso superior. El peor parado por la caída es Jack, que queda bastante perjudicado, tendido sobre la sucia moqueta .
El Halcón se levanta, el brazo tiroteado le duele mucho, pero él es un príncipe de la Mafia y un brazo le sobra para matar a este impostor. Su cólera crece al darse cuenta que su uniforme de Ala Negra estaba en la habitación donde dejó a su padre. El humo lo inunda todo. Se dirige hacia el pájaro caído extendiendo su brazo bueno, dispuesto a matarlo sin contemplaciones, cuando de repente Jack Norris se gira raudo, con la pistola en ristre, aún en su mano izquierda.
-Di adios.(dice Jack mientras aprieta el gatillo)
Del antebrazo del Halcón Nocturno sale veloz el garfio retráctil que golpea la pistola de Jack y desvía el tiro. Era la última bala. Jack le arroja la pistola, desesperado, que impacta en la boca del pérfido delincuente (una de las pocas zonas que no protege el traje de Halcón Nocturno) rompiéndole algún diente. El villano se duele, llevándose las manos a la boca. Mientras tanto Jack intenta levantarse en medio del intenso humo y los destellos del fuego. El Ala Negra original, iracundo y sangrando por la boca, alcanza por fin al impostor y le propina una colosal patada en la cara.
Jack gira con el golpe y aprovecha la inercia para incorporarse ligeramente, apoyándose en su rodilla derecha. La paliza que está recibiendo es importante y todo se derrumba a su alrededor mientras el incendio se extiende por la mansión, pero su mente permanece serena, sigue concentrado en la lucha, en su situación, sabiendo que de ello depende su supervivencia. En un instante analiza a su rival, los puntos débiles que puede aprovechar. No es un agente más de SHIELD; Nick Furia le reclutó personalmente y no va a caer. No hoy.
Manfredi se acerca otra vez, ciego de odio. Norriss amparado por el humo agarra un palo del suelo y fingiendo que recoge una pistola, amaga un disparó. La finta resulta y el mafioso reacciona mandando su garfio de nuevo, en un movimiento reflejo. Jack lo esquiva y toma el fino hilo retráctil que lleva atado y que debería devolverlo a su dueño. Jack Norris tira del sedal y lanza el garfio con su mano buena hacia un muro lateral, el instrumento metálico rebota en las paredes y el alambre se enreda en las piernas del falso Halcón Nocturno, que cae al suelo con cara de asombro.
Hora: 02:57 A.M.
Lugar: En la puerta de la mansión de la familia Manfredi, ahora ardiendo y casi devastada.
Los efectivos de SHIELD se mezclan con los bomberos que luchan valerosamente para que las llamas no se extiendan al vecindario. El agente con nombre código:Luca está frente a la puerta, hablando por un comunicador. Observa como en una ambulancia están metiendo a La Corneja, con diversas lesiones, pero aún consciente. La chica grita y forcejea, intentando liberarse.
-Tranquila Corneja, necesitas atención médica. No puedes levantarte.(se acerca Luca)
-Pero Jack sigue ahí, tengo que entrar. No podrá salir él solo.(replica ella frenética)
-No hay nada que podamos hacer ya Corneja, eso es un infierno.
Hay unos segundos de incómodo silencio.
Entonces, de entre las llamas que cubren la puerta de entrada, se dibujan las líneas de una sombra que se acerca. Cruza el umbral y el humo que deja atrás revela, para el pasmo general, a Halcón Nocturno llevando sobre sus hombros la desnuda figura atada del pequeño de los Manfredi.
-¡¡Jack!!
El revuelo pasa en unos minutos, el mafioso es atendido de sus heridas de camino a la comisaría mientras Jack se toma un vaso de café con Luca y la rendida Corneja, ya más tranquila.
-¿Estás bien Jack? (pregunta La Corneja)
-Un poco magullado, Noko, pero estaré mejor con un poco de descanso. Veo que tú sabes caer bien.
-¿Noko? (interrumpe «Luca»)
-De Nokomis. (responde Jack)
-Ahhhh…Oye, tú esta loco ¿verdad? (dice «Luca» muy picado)
-¿Que?
-Entras ahí buscando ese traje, se lo quitas a un jefe de la mafia y lo único que se te ocurre es ponértelo en mitad de un incendio, a punto de morir abrasado mientras rescatas al sospechoso. ¿Pero qué te pasa? ¿No tienes cabeza, o qué?
-Bueno es que… el traje es ignífugo ¿sabes?
Una sonrisa se dibuja en el rostro del Halcón y La Corneja mientras «Luca» refunfuña.
Noche siguiente. Hora: 00:03 P.M.
Lugar: Prisión de la Isla de Ryker
La celda de J.C.Pennysworth está tranquila, como siempre. El preso está acostado en su camastro, de espaldas a las rejas como de costumbre. La puerta de su gayola se abre lentamente con un ligero chirrido. Pennysworth se incorpora, desasosegado, en su gesto se trasluce pánico. Ante él, el Halcón Nocturno, sonriente.
-Me has dado un susto de muerte, Norriss. ¿Como has entrado?
-Por arriba. Tenemos algo que aclarar, Pennysworth. Aclarémoslo ahora.
-¿Que quieres decir? (pregunta Pennysworth en tono despectivo)
-No te debo nada. ¿Queda claro? Me has conducido hasta el traje, pero me lo he ganado. Aquellos que te estaban acosando ya son historia. He cumplido mi parte.
-…historia ¿Ya son historia? Norris, me asombras. ¿Donde está el jefe? ¿Donde está Cabello de Plata? ¿Como has podido dejar escapar al cerebro de toda la organización?
-No estaba allí. (replica Jack sorprendido)
-Venga hombre… Un viejecito, un venerable anciano. Quemaste su casa ¡Por Dios! Sé que estaba dentro y no pudo salir corriendo. Mi seguridad depende de lo que le haya pasado. ¿Me entiendes?
-No había ningún anciano. Solo recuerdo una imagen suya en una enorme pantalla. Estaba todo lleno de humo, cuando le robé el traje a Ala Negra, en aquella gran sala. En una pantalla enorme un vejestorio no paraba de dar voces, gritándome ordenes, amenazándome todo el rato, mientras me ponía el disfraz robado. Pensé que era una especie de sistema de alarma.
-¿Y que pasó? (dice Pennysworth alucinado)
-Pues…lo desenchufé, claro. Era un incordio.
-Lo desenchufaste…(Pennysworth, catatónico, se dejar caer en el catre).
Unos minutos después la figura del Halcón Nocturno surca de nuevo los cielos, sobre la isla de Ryker, iluminada por las estrellas de la noche.
Es un comienzo…
Postdata:
Los técnicos de S.H.I.E.L.D., después de analizar el incendiado cuartel general de Cabello de Plata, llegaron a la conclusión de que su «conciencia» se almacenaba en el sistema informático de la casa, basándose em el uso de tecnología muy avanzada por parte de Cabello de Plata en los últimos tiempos y a la destrucción de su cuerpo original. Pennysworth ya tenía parte de esta información, y de ahí su asombro.
En posteriores estudios de S.H.I.E.L.D. no se llega a determinar si la base de la «conciencia» de Cabello de Plata se emitía desde la devastada casa (con lo que se hubiera borrado) o en algún otro lugar.
1.- Su abuela se llamaba Manabush.
2.- En pocos meses, y con ayuda de una prótesis en la rodilla volvió a caminar con normalidad (en Attica, claro)
3.- Los milagros existen aquí.¿Vale? ¿O es que no es esto MarvelTopia? Tenéis que usar lo que se da en llamar la suspensión de la realidad. Imprescindible en los comics.
4.- Es un pañuelo especial de SHIELD, que protege las vías respiratorias.
5.- Cabrón en el original.
6.- El malo puede decir tacos ¿no?