Portada: Tony Stark sentado en un sillón de psiquiatra, siendo interrogado por una doctora rubia. En la mente de Tony aparecen todas sus ideas revueltas.

- Buenas tardes. Soy la doctora Karla Sofen. ¿En qué puedo ayudarle?

Debido a la experiencia que la doctora Sofen posee en las áreas de sicología y psiquiatría, sabe muy las palabras que decir y el tono a usar. Es más, con este paciente en particular está usando un tono de voz que no emplea muy seguido. Esto es debido a que dicho paciente es alguien muy especia.

- Buenas tardes doctora. Soy Anthony Stark.

- Créame que le reconocí nada más verlo entrar.

- Errr, sí, apostaría.

- Bueno Tony, esto es nuevo para los dos, así que entremos en confianza. ¿A qué has venido?

- Bueno doctora.

- Llámame Karla.

- Sí, errrr, Karla.

- Hubiese jurado que tenías una personalidad más segura.

- Por eso he venido. Últimamente no he sido yo mismo.

- Bueno, ponte cómodo y dime que sucede.

Tony se sienta en el sillón de la consulta, mientras la doctora Sofen se sienta sobre su escritorio cruzando las piernas.

- Bueno Karla, perdonando la expresión, podría decirse que he tenido una semana de locos. No sé por donde empezar.

- Estoy aquí para ayudarte, así que tenemos todo el tiempo del mundo.

- Entonces empezaremos por lo de mi novia, es decir, ex novia.

- ¿Cuál es su nombre?

- Pepper, una rubia hermosa.

Al oír esto, la doctora Sofen se ha soltado la coleta, y deja caer sobre sus hombros su cabellera dorada. Luego habla.

- Bien, te escucho.

- Hey, chicos, hace tiempo que no salíamos los tres.

- Tienes razón, James. Creo que venir aquí al Stardust fue genial. ¿Tú que dices Happy?

- Bueno Tony, tú sabes que prefiero un restaurante a un bar.

- Lo sé, pero no íbamos a tener una cena romántica nosotros tres.

- Es cierto - contesta James Rhodes - pero recuerden que esto ahora es un Club Nocturno. Espero que Pepper no se ponga celosa de que mires a las bailarinas.

- Ahora que James lo menciona, Tony, no he visto a Pepper en la barra.

- Tal vez se quedó en casa. Pero olvídate de ella, esta noche es para pasarlo bien. Si la fusión con Osborn resulta, recuperaré todo el dinero que invertí en el Proyecto Ultimates.

- Sí Happy, o debes tomar en serio a las mujeres. Y Tony, no deberías apresurar la fusión. Creo que sería mejor tomarlo con calma. Pueden llegar propuestas mejores.

- Hasta ahí todo iba bien, Karla. Pero la noche avanzaba, y las copas bebidas también. Happy no bebe, pero James es u tronco. Puede consumir litros de alcohol sin perder la chaveta.

- Déjame adivinar. Tú no cuentas con esa resistencia.

- Exacto. Luego de un rato de haber bebido bastante.

- Eh, chicos, que bueno que pudimos sentarnos en primera fila para ver el show - menciona James.

- Ya cállate, - responde Tony - siempre serás un [hic] negro fastidioso.

- Tony, por favor, trata de controlarte. No vayas a hacer un numerito - reponde un incómodo Happy.

En ese momento, unas bailarinas comienzan a danzar sobre el escenario. Todas guapas, pero no tanto como la que parece ser la principal atracción: una rubia de 1,70 que cubre su cara con un antifaz. Cuando se da cuenta de quienes están en primera fila, se pone nerviosa, pero disimula y sigue bailando esperando no ser reconocida. Pero Happy se ha dado cuenta. James la ha visto un par de veces, y Tony no está en sus cabales. Pero Hapy la reconoció en cuanto la vio. Pepper no pasa desapercibida para él. De hecho, la observa con mucha atención. Tanto es así, que no notó el momento en el que Tony se subió al escenario para acercarse a Pepper y susurrarle algo al oído. Apenas se despega de Pepper, esta lo abofetea y se marcha del escenario. Tony vuelve a su asiento.

- ¿Qué pasó? ¿Qué le dijiste? - pregunta James.

- Le dije que le daba unos dólares si [hic] se acostaba conmigo.

- ¿Cómo? - pregunta Happy - ¿No la has reconocido?

- Por supuesto, Pepper no aceptó mis explicaciones. Dijo que lo esperaba de mí, y que ya no podía soportar nuestros mundos tan distintos. Fue embarazoso.

- Sí, leí ese incidente en el Bugle. "El Escándalo Strak", creo que lo llamaron. Pero no creo que hayas venido solo por eso.

- Es verdad, no. Hay algo que me tiene muy mal. Es la sensación de la muerte que se acerca.

- ¿De qué hablas?

- Es algo que no mucha gente sabe. Tengo un tumor cerebral.

- Pero Tony, la medicina ha avanzado a pasos agigantados, y ese tipo de tumores ya no son tan peligrosos.

- Verás Karla. Este no fue detectado a tiempo. Tiene unos seis meses de evolución, y ya he comenzado a sufrir síntomas.

- Tienes suerte de no tener un trabajo que demande mucho esfuerzo y te someta a presión, pues sería peor.

- Ese es otro problema.

- ¿Perdón? Ser empresario no demanda tanto trabajo como ser obrero o policía.

- Bueno, todos tenemos nuestras cosas ocultas.

- Pero Tony, debes entender que si en verdad quieres que te ayude, no deben haber secretos entre nosotros. Solo soy tu psiquiatra, pero puedes contar conmigo.

- Está bien. Uno de los momentos más críticos de mi comportamiento lo sufrí la semana pasada... como Iron Man.

- Señor Tony, he interceptado una comunicación policial. Habla de una posible emergencia de tipo superpoderosa.

- Muy bien Homer. Dame la ubicación.

Un mapa se proyecta en las lentillas del casco de Iron Man, que sobrevolaba las calles de Nueva York buscando un poco de acción para liberar tensiones.

- ¡Es en la esquina del Stardust! Bien Homer, vamos allá a toda potencia.

Dicho esto, el motor que Iron Man lleva en la espalda produce un estruendoso sonido, el que rompe algunas ventanas de unos edificios cercanos.

- Creo que esos inquilinos no estarán muy contentos, señor.

- Tal vez, Homer, pero nuestro deber es más importante. Hazle saber a Furia que vamos en camino, y que declare esto como una acción Ultimate.

Luego de unos momentos, el Hombre de Hierro llega al lugar de los hechos. Alguien o algo está causando el pánico en la calle. Ha tumbado unos semáforos, y literalmente embiste un edificio y unos autos.

- ¿Qué es eso, Homer?

- Amplificaré el campo visual, señor.

- Nunca en mi vida le he visto. No importa, es tiempo de detenerlo.

A continuación, Iron Man se acerca un poco y dispara unos rayos de impacto en dirección al vándalo. Se trata de un tipo alto, muy fornido y con unos músculos enormes. Lleva puesto un traje, que parece una segunda piel, con algunos implantes metálicos. Un cuerno que luce en su frente llama la atención. Los rayos de Iron Man no lo tocan, pero lo sacan de su orgía de destrucción.

- ¡Vaya, si es el Hombre de Hojalata!

- ¡Señor Hombre de Hojalata para ti, cabeza de cuerno!

- El nombre es Rino. Apréndelo, porque es lo último que oirás.

Rino arremete contra Iron Man embistiéndolo quien, al no esperarse un ataque de este tipo, sale disparado contra un edificio, rompiendo un muro. Luego de un breve mareo se incorpora, pero el sistema visual tarda dos segundos en restablecerse.

- Bueno, este tipo va en serio.

Ahora es Iron Man quien arremete contra Rino, disparando sendos rayos de impacto desde la distancia. Mas, no parece que Rino los haya siquiera sentido, pues sigue de pie luego de que dos o tres le hayan dado de lleno.

- ¿Qué demo...?

- A simple vista, señor, parece estar protegido por una materia especial. Además, al parecer tiene unos implantes cibernéticos, que pueden funcionar para absorber energía.

- Oh, genial. Deberé improvisar.

Iron Man vuela directamente hacia Rino, y a una distancia razonable estira sus brazos para golpearlo. El bruto, con una velocidad sorprendente para su tamaño, consigue eludirlo y el Hombre de Hierro se estrella contra otro muro.

- ¡Ole, Iron Man! Tal parece que así nunca me tocarás.

- Homer, este tipo me está agotando la paciencia.

Rino corre en dirección a Iron Man para embestirlo nuevamente. Ya habiendo prevenido esta situación, Tony sujeta a Rino por los brazos, enciende el motor y emprende el vuelo.

- Verás Rino, estamos a unos 20 metros del suelo. ¿Qué te parece la vista?

- Por...por favor...no me sueltes.

- Ya no eres tan valiente, ¿eh? No te soltaré si me dices que demonios crees que estabas haciendo.

- Yo...solo me divertía. La gente siempre...siempre se rió de mí por ser tan débil. Ahora...cuento con los medios...para reírme yo de ellos.

- Créeme que con ese disfraz das más risa aun.

- ¡No digas eso! Esa gente dijo lo mismo, incluso esa perra rubia que salía del bar.

- ¿¡Qué?!

Instintivamente, Tony mira hacia el suelo, como buscando algo. Lamentablemente, Homer lo ayuda a encontrar lo que busca.

- ¿Pe...Pepper? ¡Maldito hijo de perra!

Iron Man suelta a Rino, quien comienza a caer hacia el suelo a una velocidad asombrosa. Antes de que toque el suelo, Iron Man lo golpea con todas sus fuerzas enviándolo de nuevo hacia el cielo, y comienza a dispararle muchos rayos de impacto. Al fin, Rino cae al suelo rompiendo el pavimento.

- ¡Ese hijo de perra! ¡Homer, prepara el cañón de protones!

- Entendido. Comienza la desviación de energía.

El dispositivo del pecho de la armadura de Iron Man se abre y comienza a brillar. Rino se levanta, maltrecho, pero parece no poder soportar su propio peso y cae de rodillas. Afirmándose en el suelo con sus manos y, en lo que parece un esfuerzo enorme, levanta su cabeza y mira a Iron Man, quien camina hacia él.

- ¡Maldito bastardo! ¿No te gusta jugar a destrozar? ¿Qué tal si jugamos a que yo te destrozo?

- No...por...favor.

- ¡Cállate! ¡No mereces piedad!

La voz de Homer interrumpe.

- Cañón de protones al 90 %.

- Bien Homer. Con eso será suficiente. Apunta.

- Localizando objetivo. ¡Advertencia! ¡A esta distancia, el objetivo quedará reducido a cenizas!

- ¡No importa! ¡Este infeliz se lo merece! ¡Es un hijo de perra!

- Señor, noto un disturbio en su sistema nervioso central.

- ¿De qué hablas? ¡Yo me siento perfecto! ¡Volemos a este miserable!

- Lamento informarle que detendré las funciones de la armadura. Un examen neurológico determina que usted ya no está en condiciones de pilotarla. Sistemas desconectados.

- ¿Qué haces, estúpido holograma? ¡Dispara, te lo ordeno! ¡Dispara, dispara, dispara!

- ¡Cálmese, señor, y observe los ojos de Rino! ¡Dígame si hubiese valido la pena!

Homer hace un acercamiento a los ojos de Rino, los cuales lejos de mostrar temor, evidencian un miedo, un horror, un pánico absoluto.

- Ahora...ahora comprendo Homer. No sé que me pasó. Estaba fuera de control. De no ser por ti, habría achicharrado a Rino, quien ya estaba derrotado.

- Para eso estoy, Señor.

- Homer, llámame Tony. Olvida lo de señor.

- En esa ocasión, Karla, Homer se mostró más humano que yo mismo. Fue ahí cuando me di cuenta de que tal vez es el único amigo real que tengo.

- Pues, sería muy triste pensar que la humanidad no haya hecho nada por ti. Pero bueno, no soy socióloga. Con respecto a tu violencia espontánea, pues sí, uno de los síntomas de los tumores cerebrales son los cambios bruscos en la conducta. Aprovechaste la situación para liberar todo tu odio a través de Rino. No me sorprendería que te volviera a ocurrir.

- Al menos tengo a Homer para controlarme. A propósito, no pareces muy sorprendida por lo que acabo de relatarte.

- Es parte de mi mirada objetiva como profesional. Además, siempre me pareció extraño que Iron Man fuese solo tu cliente. Nunca se supo como adquirió sus sistemas de armas, lo cual no es tu terreno, pero siempre fue de conocimiento público que tú le vendiste su sistema de vuelo. Era una buena coartada, pero asumí que se trataba de alguien cercano a la compañía. Aun así, no me esperaba que fuese el mismo dueño.

- Ya sabes lo que dice la canción: "La vida te trae sorpresas". Espero que puedas guardar mis secretos.

- No te preocupes. Soy una profesional, y todo lo que hablamos hoy queda entre tú y yo. Pero recuerda, aun no tomes las medidas para tu ataúd. Todavía puedes tratar ese tumor. En nuestra próxima sesión te recomendaré un buen oncólogo.

- Gracias Karla. Bueno, es hora de irme. Gracias por todo.

- Estoy para ayudarte Tony. Adiós.

Karla acompaña a Tony hasta la puerta. Una vez que Este se va, Karla se quita su delantal y se sienta tras su escritorio. Saca un espejo de un cajón, se mira en él y comienza a hablar.

- Así que Tony Stark es el Hombre de Hierro. Bien Karla, debes encontrar una forma de aprovechar esto. Calcula todo. Recuerda que el hierro es maleable.y moldeable. Y Karla sofen sabe muy bien como moldear.

CORREO DE HIERRO ULTIMATE

Pues bien, otro número listo. Me di cuenta que esta sección estaba muy débil, así que la voy a usar para responder vuestras críticas positivas o negativas. A por las cartas:

Xum escribió:

Je je je... Las especulaciones sobre si Iron Man es el novio de Stark me parecen terrorificamente coherentes... No se como no se le han podido ocurrir a nadie antes.

Pues, fue algo se me ocurrió un día que estaba pensando en ideas para la serie, y salió eso.

Hum... El rollo de que Happy directamente le llame Tony en publico cuando lleva la armadura de IM es una imprudencia.

Con esa intención lo hice así.

Stark tiene prejuicios contra los muties... ME GUSTA. Encaja con el personaje. ¿Ebersol conoce el secreto de IM? Hum... Esto podría dar pie a una trama interesante. Y las referencias a Justin Hammer y Norman Osborn también le dan interes...

Sí, Stark es antimuti. Ebersol ayudó a Tony a crear esta primera armadura. Hammer y Osborn saldrán pronto.

Y buen final...

Gracias.

El único fallo que le veo es que a veces dedicas tiempo a cosas que quizá no lo merezcan, vease lo del anticuario del final... Pero salvo eso, un buen número. Me ha gustado mas incluso que el anterior.

Pues, no todos pensamos lo mismo sobre qué es importante o no. Esos detalles están por algo, y son parte de una subtrama que estoy ideando.

Ultron escribió:

Lo que mas me gusta de los números que llevas es la forma de meter personajes que el mundo ya tiene encasillados en el mundo real (como el Arreglador o El Duende Verde) en este mundo en el que aun no son nadie, a lo mejor ni llegan a serlo pero no se yo. La forma de narrarlo es correcta pero a la hora de lo importante...es decir, Dios sabe lo que habrán descubierto bajo el agua (¿el Prestige?) de un momento a otro, Happy se impresiona por lo descubierto y Tony también, pero eso que llaman a Furia y parece que le acaban de contar lo que han hecho esta mañana. Por lo demás está bien.

Bueno, algunos personajes que meto como don nadie tal vez den el brinco y tomen mayor importancia.

¿Qué es el Prestige?

Lo siento, la última parte de tu correo no la entendí.

Rafael Heras escribió:

Bien,me ha gustado con su pelea con torbellino q sirve sobre todo para volver a señalar los problemas medicos de Stark. Sobre los escondido en el hielo la pregunta es : ¿sereis originales o es el tipo del escudo mas congelao que un langostino pescanova?

Sí señor, los problemas médicos de Stark seguirán. Sobre lo escondido en el iceberg, espero que te hayas sorprendido por el tratamiendo que Zemo le está dando a este tema en Ultimates. (Y no, no es la Sirenita ni ningún langostino)

José González escribió:

Nada más empezar, esta frase me a llamado la atención:

"- Bueno, tal vez esos dos son pareja"

No se, un grupo de submarinistas, supongo que expertos en trabajos de recuperación a gran profundidad, no soltarian algo así. Yo diría que, como buenos machos homofóbico, sería algo mucho más burro.

"- Bueno, tal vez esos dos sean un par de..."

Lo se. Parece una tonteria. Pero creo que cada personaje debería hablar de una determinada manera(no la que yo crea).

¿Se imagina alguien a Lobezno pidiendo las cosas por favor?.

Pues, le hecho la culpa a que vivimos en países distintos, y la forma en que hablamos acá en Chile es muy distinta a la vuestra (De ahí a que yo os imite es otra cosa). Lo que pasa es que me sonó natural eso de "pareja". Y Tony no va a contratar a cualquier tipo de la calle.

El fallo de la armadura bajo el agua diría que es demasiado facilón.

La armadura tiene esa falla por razones que se harán evidentes en números futuros.

¿Fusión con la empresa Osborn?. Ni de coña.

Paciencia con esta subtrama.

Y eso es todo por ahora. Y os recuerdo, para saludos, quejas, regalos o fotos pornográficas, escribidme a jocampos@alumnos.ubiobio.cl

Nos leemos luego.

Taker.