Mutantes #6
Inferno II
Punto de ebullición
Guión: Cifra2
PORTADA: Daredevil de espaldas en actitud defensiva delante de la puerta de su bufete "Murdock & Nelson". La puerta, sin que él se haya dado cuenta, tiene ojos diabólicos. Abajo, en un recuadro, se enumeran los protagonistas del número: ¡El Castigador! ¡Daredevil! ¡La Patrulla X! ¡Los Vengadores! ¡Excalibur!
- Oh, Dios mío...
D2 no podía decir otra cosa... a duras penas había
conseguido llegar a la Mansión de los Vengadores... y
esa cosa en la que se había convertido el Castigador
lo había seguido allí sin ningún tipo de problemas.
- Dadddddddme aalllllllllllll
nnnnnniiiiiiiiññññññññññooooooooooooo.
- ¿Frank? ¿Eres tú?
Spiderman podía reconocer la voz del Castigador. Le
atormentaba en sus pesadillas, y aunque estuviera
modificada por la transformación en algo parecido a un
demonio, era capaz de reconocerla.
- Arrrraaaañiiiitaaaaa... tttúuuu sssseerrrrrasssss
unnnn delllllicccioossssooo maaannnnjjjaarrr.
Y se lanzó a por Spiderman.
Cocina del Infierno.
Foggy Nelson sale de su prestigioso bufete de
abogados... ha sido una largo y duro día y lo único
que le pide a la vida en ese preciso momento son un
par de horas de descanso para reponer fuerzas...
Para un hombre gor... obeso como él, el calor
sofocante de los últimos días es demasiado... el aire
acondicionado de la oficina y de los tribunales ayuda
bastante, pero son los trayectos entre casa y trabajo
lo que lo mata (bueno, vale, también usa y abusa del
aire acondicionado en el coche).
Así que "ahora, Señor, si no es mucho pedir, déjame
llegar a cas..."
Puto móvil.
- ¿Sí?
- Hola, Foggy... necesito que vengas.
- ¿Natasha?
- Sí, ven... ven pronto...
- ¿Ocurre algo? ¿Le pasa algo a Matt?
- No... pero te necesito, Foggy... ven rápido...
Foggy sacó las llaves del coche de su bolsillo. Por un
momento, su mente barajó diferentes posibilidades...
rápidamente se obligó a rechazar una en la que se
imaginaba una noche de sexo con Tasha.
Por Dios, era la chica de su mejor amigo.
Australia. Unos minutos antes.
El portal de Pórtico se cerró tras el último miembro
del equipo Azul...
- Dios, ¿quién es este tío?
- Bobby, compórtate - cortó rápidamente Magneto -...
según Doug, éste hombre se llama Pórtico... y dudo que
nos dirija la palabra... vamos abajo, a reunirnos con
La Patrulla.
Todos descendieron por la ladera hacia el pequeño
pueblo abandonado que una vez fue la base operativa de
un grupo de ciborgs llamado los Cosechadores... Nadie
se dio cuenta de cómo el portal se volvía a abrir y
una adolescente nerviosa lo cruzaba.
Abajo, en el pueblo... Elizabeth Braddock entrenaba
junto a Lobezno cuando de pronto notó la súbita
irrupción de ocho mentes conocidas...
- Logan... ¡nos han encontrado!
- ¿Los Cosechadores contraatacan?
- No, capto ocho mentes: Magneto, Hank, Bobby, Warren,
Dani Moonstar, Sam Guthrie, Rahne Sinclair y Bobby da
Costa. Espera... hay una más, una chica que no tiene
nada que ver... Pórtico debe haberla traído.
- ¿Los Nuevos Mutantes y parte de la Patrulla
original? ¿Cómo nos habrán encontrado? Guíalos hacia
aquí. A todos menos a la chica... de ella me encargo
yo.
Momentos más tarde, varios abrazos culminaban el
emotivo reencuentro. Pero fue Magneto quien lo
interrumpió todo...
- ¿Y Madelyne?
- Estará en la sala de control...
- No, Alex. No lo creo. De hecho estamos aquí para
intentar evitar su traición.
- ¿Qué?
Para evitar dar otra vez LA MISMA explicación, hacemos
un pequeño salto temporal hasta el momento en el que
Lobezno se desmarca del grupo y discretamente se va de
la reunión.
La nerviosa chica que anteriormente llegó gracias a
Pórtico, había seguido las indicaciones gestuales que
éste le hizo y había bajado siguiendo al grupo
principal... estuvo observando sorprendida cómo
algunos de esos tipos tan raros eran los miembros de
La Patrulla X que se suponía que habían muerto en
Dallas...
Dudaba si hacer notar su presencia, ya que ella
también era mutante... pero estaba demasiado
trastornada por la súbita aparición de aquel portal y
el haberlo cruzado...
Por todo ello, cuando una mano se posó sobre ella, su
reacción fue instantánea... una ráfaga de fuegos de
artificio surgió de sus dedos y chamuscó el rostro de
Lobezno.
Estados Unidos
- ¿Así que en este orfanato te criaste?
- Sí, Jean... Se me hace difícil creer que todo es una
tapadera.
Ambos miraron a Douglock. Era tan extraño todo lo
ocurrido últimamente. La muerte de Warlock, la
transformación de Doug en alienígena... sus recuerdos.
¿Era todo una trampa? Había momentos en que pensaban
que ojalá fuera así.
Pero algo en ellos les decía que no. Que por duro que
fuera todo, era REAL.
Y ahora iban a tener la ocasión de comprobarlo. Si
Doug estaba en lo cierto, en el sótano de ese orfanato
estaba el laboratorio de Mr. Siniestro (un nombre de
lo más ridículo) que era el responsable de muchas de
las cosas que estaban ocurriendo... en especial, de la
Masacre de los Morlocks.
Según Douglock, un mutante llamado Gámbito, del gremio
de los ladrones de Nueva Orleáns, se había visto
forzado a indicar a los Merodeadores la posición
exacta de los Morlocks... pero Doug insistía que ésa
versión era inconsistente, aunque era la conocida en
el futuro sobre cómo empezó la masacre. Doug indicó
sus dudas sobre que un mutante como Dientes de Sable
necesitase de veras de indicaciones para encontrar a
los Morlocks... sus supersentidos deberían haber
bastado.
Gámbito tenía que haber mentido.
Pero ahí estaban los ocho.
Gatasombra y Rondador serían los cabezas de puente,
mientras el resto esperaban fuera, enlazados
mentalmente por Jean, por si habían problemas. En
principio, sólo se trataba de rescatar a Nathan, pero
tenían la duda moral de si no debían rescatar al resto
de niños. Doug no estaba seguro de si, con el Infierno
a punto de desatarse en Nueva York, era una buena idea
encargarse del cuidado de varias decenas de niños
mutantes. Estarían más seguros allí.
Rondador se teleportó con Gatasombra sobre el tejado
de la casa... una mansión de varios pisos de altura.
El único punto que según un escaneo pre-eliminar de
Douglock, ofrecía un punto muerto a las cámaras de
seguridad que vigilaban la zona.
- Tendríamos que ir tú y yo, Jean...
- Ya lo hemos hablado... Ellos son los más indicados.
Scott se mordió la lengua. Su hijo estaba en el
sótano, en manos de un maníaco y no podía hacer nada
por evitarlo, salvo esperar.
Kitty se despidió con una sonrisa de Rondador y
comenzó su inmersión por la casa... Sabiendo que debía
ir hacia el sótano, fue cruzando pisos con extrema
cautela y rápidamente llegó al sótano.
- Esto tiene, extrañamente, muy poca vigilancia.
Apesta a trampa. Deberíamos hacer algo con lo que no
contasen.
Ahí entraba Alejandro. Rápidamente se acercó a una
torre de alta tensión que suministraba energía a la
zona... Una enorme descarga eléctrica por su parte
resultó en una sobrecarga y apagón en todo el área...
suficientemente grande para que no resultase
sospechoso.
En ese preciso instante, Kitty ya había localizado la
"incubadora" y miraba a todos los niños, uno a uno,
buscando a Nathan. A través de su mente, Scott y Jean
también miraban. No tardó mucho en encontrarle... pero
antes tuvo tiempo de darse cuenta de algo...
- ¡Oh, Dios mío!
- ¿Qué pasa, Kitty?
- ¡Tenemos que destruir este lugar!
- ¡Cálmate, Kitty!
- ¡Mirad a través de mis ojos!
Y Kitty miró a uno de los bebés... un adorable bebé
rubio.
- Pero Kitty... es sólo un bebé...
Kitty movió ligeramente su incubadora, y éste se dio
la vuelta...
- ¡Dios bendito!
Un par de pequeñas alas surgían de su espalda.
Mansión de los Vengadores.
Spiderman fue literalmente estampado contra el muro...
una vez más. Sus ganas de broma, literalmente, habían
pasado a la historia.
- Ellllllllll
nnnnnnnnnnniiiiiiiiiññññññññññññoooooooooooooo.
Nadie se burlaba ya del "nuevo" Castigador. Dos metros
quince de altura, ojos demoníacos, hipermusculado,
demencialmente ágil y fuerte. Invulnerable... un ser
de pesadilla. Hulka, a plena potencia, sólo era capaz
de contenerlo. El Capitán América apenas podía hacer
nada. Henry Pym en ese momento sólo contaba con sus
poderes de reducción y ampliación de objetos
inanimados... y las armas que sacaba eran inútiles...
tanto como el aguijón de la Avispa... Sólo Thor
parecía rival de veras contra este ser demoníaco.
Y el niño... el niño tenía algo en los ojos. Energía
pura.
Spiderman, desde su aturdimiento, tuvo una idea
desesperada...
- Hey, chico... ¿Qué es lo que sabes hacer?
- No te entiendo...
- Te pregunto qué poderes tienes.
- No sé... a veces consigo quemar cosas.
Spiderman sonrió un momento. Siempre había querido
hacer esta pregunta.
- Podrías, errr... digamos... ¿quemar al Castigador?
Praga, República Checa.
A través de las callejuelas estrechas, Andrés Cortés
Echeverría tenía la certeza de haberse perdido por
completo.
Maldita sea, demasiado "Schnapps"... pero qué
demonios, era un viaje de fin de curso...
¿Dónde demonios estaba el hotel? Si al menos
encontrase el río... allí podría orientarse. Pero
había algo mal...
Hacía poco que sabía que era mutante. Había evaluado
ya la posibilidad de elevarse sobre el suelo y buscar
volando el hotel... pero lo último que quería hacer
era llamar la atención. Además, no estaba seguro que a
sus dieciséis años tuviese suficiente control sobre
sus poderes como para que no le fallasen y cayese
desde una considerable altura.
Pero aún así... Ya se había elevado dos veces... y su
medio borrachera le hacía imaginar que habían sido
veinte. Y sabía que iba a necesitar alguna mas.
- <:Perdone amigo, ¿necesita ayuda1?>
- Er... perdonad... pero no hablo ni papa de checo. <¿Hablais inglés2?>
Una sonrisa cruzó los labios de la pareja con la que
se había encontrado...
- <Ah, perfecto, un extranjero en apuros>
- <Sí, tal como nosotros lo fuimos hasta hace muy
poco>
Andrés sonrió... sin saber que esa ayuda que acababa
de encontrar lo buscaba a él desde hacía varias horas.
Su vida a cambiar desde aquel preciso momento. Y no
iba a llegar al hotel...
- Repítemelo, Rachel, ¿por qué estamos aquí parados en
Times Square?
- Porque Scott y Jean nos pidieron que viniésemos
aquí, Brian. Y que esperásemos.
- ¿A que miles de demonios atraviesen un portal
dimensional e invadan la Tierra?
- Mmmmm... pues sí.
En lo alto del edificio que dominaba todo Times
Square, Rachel miró a su grupo. Patético, desde luego.
Allí estaban el Capitán Britania (un alcohólico en
ciernes), su novia Meggan (una metamorfa sin
autoestima), Madrox, el hombre múltiple (con el poder
de clonarse... si es que eso era de alguna utilidad),
Banshee (un irlandés ex-villano y ex-miembro de la
patrulla X... ah, sí, y ex - tullido) y Calisto (una
chusmeta ex-líder de los fallecidos morlocks). Si
hubiese querido juntarse con una panda de perdedores,
no podría haberlos escogido mejor.
Y se suponía que ellos iban a ser la primera línea de
defensa cuando comenzase el ataque.
Por un segundo se preguntó si no podía haber algún
error y que el ataque comenzase en otra parte.
O que no hubiese comenzado ya.
Abajo, entre la multitud, ocultos tras un cubo de
basura, un par de ojos no apartaban su visión de la
pelirroja Rachel. Relamiéndose como estaba, el demonio
Crotus tuvo la certeza de haberse enamorado.
- Jubilación Lee.
- Ése es mi nombre, no me lo gastes.
La Patrulla miraba asombrada a esa adolescente
malcriada que había dejado a Logan totalmente cegado.
¿Así que ésa era la chica sobre la que Doug advirtió
que también podría estar allí? ¿Ésa mocosa iba a ser
un miembro clave de la Patrulla?
Muy mal tendrían que ir las cosas... pero bueno... si
estaba allí, tampoco la iban a rechazar.
Por mucho que tuvieran la tentación de hacerlo.
- Bienvenida a la Patrulla X.
- Hey, esperaunmomento... ¿qué os hace pensar que YO
me voy a unir a una panda de perdedores como vosotros?
Buena pregunta.
Fue Logan quien respondió... y de una manera imposible
de ignorar.
- Tú misma... o te vienes con nosotros o te quedas
aquí sola en mitad del frío desierto australiano... a
kilómetros y kilómetros del pueblo más cercano... y en
plena base de un grupo de ciborgs matamutantes que
volverán de un momento a otro con sed de sangre.
No había terminado la frase cuando Júbilo ya
preguntaba...
- Bueno, ¿nos vamos o qué?
Nueva York
El apartamento de Matt Murdock estaba sumido en el
silencio más demoledor. Y Matt sabía que eso era
imposible.
Sus supersentidos no registraban absolutamente ningún
ruido. Ni la nevera, ni el carillón del salón... ni
siquiera la estática de los televisores. Algo muy
extraño ocurría allí.
- ¿Quién anda ahí?
Casi deseó estar vestido de Daredevil... pero sabía
que tendría que dar algún tipo de explicación en caso
de que hubiese alguien...
- Pasa, cariño, te estábamos esperando...
- ¿Tasha? Noto algo extraño en tu voz.
Natasha y Foggy aparecieron de las sombras. Matt notó
cómo ambos eran anatómicamente diferentes. El corazón
de Foggy, por ejemplo, era extremadamente más
vigoroso.
- ¿Qué os ha pasado?
Si Matt Murdock hubiese podido ver, habría visto como
su mejor amigo era ahora mismo un demonio, y cómo su
chica era ahora más que nunca, una Viuda Negra.
1.- Traducido del checo.
2.- Traducido del inglés.
Correo Alternativo
Inferno #2... y señoras y señores, esto comienza a
complicarse de lo lindo. Nuevos jugadores en el juego,
como esa nueva formación de Excalibur, en la que
Rachel no tiene ningún amigo, o esos Daredevil, Viuda
Negra y Foggy que nos encontramos al final. Y por
sorpresa, Júbilo se une a la Patrulla.
No, no es un anacronismo. Si Doug es consciente que la
llegada de Júbilo al escondite australiano fue
inmediatamente después de Inferno... sabe
perfectamente que en este presente ha podido suceder
algo antes (de hecho, ya ha detectado que el Empire
State no va a ser el centro de "Inferno")... y, en
este caso, es Pórtico quien la trae... no os olvideis
que Pórtico puede ver distintas realidades a la vez...
y por lo tanto puede saber que Júbilo puede ser
imprescindible en el futuro inmediato de la Patrulla.
Bueno, vale, esa es mi versión oficial.
La versión extraoficial es que me mola tenerla ya
entre nosotros.
Pero además... ¡1ª referencia a Gámbito! La Patrulla
sabe quién es ahora, y no le pillará de sorpresa su
incorporación... o eso creen ellos. Je, je, je...
Ah, sí... y ¿por qué ese interludio en Praga? ¿Y con
un adolescente mutante español? Tranquilos, las
respuestas a esas dos preguntas todavía tardarán unos
meses.
Se abren las apuestas para ver en qué número
aparecerán Gámbito o Cable por estas páginas. Pronto,
muy pronto.
Eso sí... en el próximo número entran en escena: ¡El
Doctor Extraño! ¡X-Terminadores!