Han pasado muchos días desde la derrota de los Amos del Mal a manos de un simple pueblo de humanos guiados por una versión de la Cosa algo diferente de la que ellos conocen. Desde entonces Kang no ha encontrado ninguna conquista interesante, pueblos, aldeas, nada lo suficientemente avanzado como para establecerse allí y retomar su investigaciones sobre este mundo y sobre como volver a casa. Aunque lo de volver a casa , Kang ya no le da mucha importancia, después de todo, ¿No ha vivido él en infinidad de épocas?¿ Que importa que sea otro mundo? Solo es otro mundo por conquistar...

8:00 de la mañana...

El vehículo que transporta a estos viajeros que se llaman Amos del Mal, a tenido mejores días, eso seguro. Las cosas no marchan bien, Kang ya no demuestra ser el gran líder que ha demostrado siempre frente a Los Vengadores, quizá sea porque aún no ha encontrado nada que lo atraiga, o que en este mundo le esté resultando difícil, aunque entretenido, conquistar cualquier cosa...

-Te digo Kang que debimos haber conseguido una nave mas amplia en el último poblado, o al menos haber mejorado esta, que tiene los propulsores algo dañados de nuestra escapada por patas de la ciudad, que perdiste frente a la Cosa-Dijo en tono arrogante el Pensador Loco-.

-Cállate estúpido, me desconcentras, intento encontrar algún signo de vida cerca. Algo que nos indique donde podemos descansar.

-Me callaré, pero te aseguro que la próxima vez que encontremos algo de tecnología aceptable, me construiré un vehículo particular para viajar.

Mientras un kilómetro por encima de ellos...

OBJETIVO: vehículo deslizante antigravitatorio de baja potencia.

OCUPANTES: Siete formas humanoides, una de ellas anormalmente grande en comparación con el resto.

ENERGÍA EMITIDA: Perturbaciones sónicas muy grandes procedentes de uno de los ocupantes, desestabilización cronal en uno de ellos, posiblemente debido a viajes en el tiempo y desestabilización dimensional en todos los ocupantes.

NAVE REGISTRADA: Negativo.

MODO ATAQUE: Impulsos energéticos,

INTENSIDAD: baja...

¡PROOMF!¡PROOMF!

-Nos atacan- dijo el Conmocionador-.

-Muy inteligente por tu parte,¿ Lo has adivinado tu solito?-Sonrió preocupado Klaw-.

Todos se desplegaron, corriendo, los cazadores cazados. Cada uno por sus medios el Dr. Muerte y Torbellino volando, una forma bastante elegante de huir los demás no tiene mas remedio que correr, correr como cobardes...

8:10, en una montaña cercana...

-Nos libramos por los pelos.-dijo el Juggernaut-Unos segundos mas y seriamos Amos del Mal machacados, si tuviera en frente al que nos atacó...

-Lamentarse por una derrota no sirve de nada- le recriminó Kang-.Yo lo se, pues desde que encontré a Los Vengadores, en vuestro mundo Kang apenas a conocido victorias. Pero aún así de las derrotas he aprendido mucho...dejémoslo, lo mejor será llegar a la cima de la montaña, antes de ser derribados la nave detectó una pequeña señal de vida, no pude confirmar si era humana, parece como si hubiera una tormenta allí arriba, demasiadas interferencias.

-Estoy de acuerdo,- dijo el Pensador Loco- a menos que alguien pueda ver una señal de vida con sus ojos creo que lo mas sensato será probar con esa posibilidad.

No se oyen propuestas, las palabras del pensador son demasiado ciertas, no se ve ni un alma en donde alcanza la vista y siempre que quede una pequeña posibilidad es mejor explotarla al máximo, buscar hasta que se encuentre algo, aunque no sepan lo que buscan.

De nuevo se ponen en camino, cada cual con lo suyo pero todos se mantienen bastante unidos, pues sea quién sea el que les atacó hace un rato, puede volver a atacarlos y en ese caso hasta el Dr. Muerte quiere tener compañía.

9:00, tras varias disputas, descansos y especulaciones sobre cuan alta será la cima los Amos del Mal empiezan a ver algo en lo alto. Y sobre todo a oír algo, motores, mil motores rugen en lo alto de la montaña, como si Thor golpeara a una montaña con su martillo. También pueden ver rayos, grandes descargas que se escapaban de su sitio. Afortunadamente la vista les complace, como ellos creían el ruido procede de centrales de energía, energía que se utiliza para mantener una impresionante ciudad que hay en la cima y por un momento piensan que han hecho bien escalándola. Al menos se han ahorrado el trabajo de rodearla.

-No ataquéis- suspiró Kang - primero conozcamos a lo que nos enfrentamos.

-Bienvenidos seáis forasteros -dijo un anciano- bienvenidos a la ciudad Escarlata, que os acercará un poco mas hasta el cielo, algo que todos deseamos alcanzar, como ya lo hizo nuestro líder...pero dejémonos de tonterías, debéis estar cansados, pues pocos son los que llegan hasta aquí pero el que llega obtiene su recompensa viviendo aquí si lo desea. Además, hoy hay festejos en honor a nuestro líder, el Demonio Escarlata. Seguidme...

A medida que avanzan la ciudad no pierde el encanto, futuristas casas, modernos vehículos, y en la mente de todos solo cabe un pensamiento; "Quién construyera esto y se ganara un respeto como el del anciano debe de ser un genio".Lo que mas deleita sus ojos viene después. Por todos lados se puede ver gente hasta donde alcanza la vista, todos sin problemas, sin preocupaciones, todos están dentro de un gran palacio, la belleza está tanto en su arquitectura como en la tecnología y comodidades aparentes.

Entonces todos los que allí están reunidos levantan la vista. Al principio solo se aprecia un punto rojo, pero a medida que se acerca, los Amos del Mal ven mejor lo que está descendiendo, y en ese momento Klaw solo puede decir una cosa...

-Mierda, pero si es...es...

-El Hombre de Hierro-suspira Kang-

Cualquiera de ellos lo ha reconocido pese a este nuevo diseño, han visto demasiadas veces la armadura para reconocerla, pero ahora se explican lo del Demonio.

Su armadura ha cambiado; de su casco salen cuernos, en su espalda dos alas de acero comparables a las del Arcángel. La punta de los dedos de sus guantes acaban en afiladas garras, sobre sus muñecas tiene dos pequeños cañones y adherida magnéticamente a su cintura hay una espada que solo inspira temor. En definitiva, un auténtico Demonio Escarlata.

Vaya Kang, esto mejora por momentos, primero la Cosa y ahora este Hombre de Hierro satanizado, nunca debí aceptar ser uno de tus Amos del Mal-dice Torbellino algo insolente, pero aún mostrando respeto y temor por Kang-.

-Tus quejas no mejoran la situación así que cállate o tus tripas colgarán de las paredes de este santuario-respondió Kang-.

-Callaos los dos,-dijo el Dr. Muerte-ante todo debemos asegurarnos una vía de escape el otro pueblo no era ni la mitad de avanzado que este y tuvimos que huir de simple humanos, imaginaos aquí, este Demonio Escarlata parece tener mucho mas poder que "nuestro" Hombre de Hierro, tal vez nos supere aunque estemos unidos, lo mejor será encontrar una nave, pero esta vez que sea mas cómoda y espaciosa. Conmocionador, Klaw, Torbellino, preguntad donde podemos encontrar una nave que atienda a nuestras necesidades y escondedla en lugar seguro. Nosotros cuatro nos ganaremos la confianza del pueblo.

Sin decir nada los tres villanos se dispersan y se mezclan entre la gente para conseguir sus propósitos...

14:00,El lugar: el palacio de Demonio Escarlata. Su última orden dada: "Traedme a los forasteros...traedlos muertos...".

Hace cuatro horas, en la Ciudad Escarlata...

-Llevamos casi una hora preguntando y ojeando, y solo hemos encontrado fábricas, fábricas y mas fábricas de energía, -comenta el Conmocionador- esto se vuelve desesperante, la gente nos ha dicho que hay naves pero que no saben donde están, solo saben donde están las fábricas, los comercios y el palacio, si al menos sus vehículos fueran mas grandes los podríamos usar.

-Iremos al palacio, es el único sitio que nos queda-responde Klaw- si no encontramos nada allí volveremos con Kang.

10:30, En cierto arsenal de palacio...

-Os lo dije,-se vitorea Klaw-un arsenal lleno de naves y armas, dispuestas a ser usadas por nosotros. Hay suficientes armas como para destruir Nueva York sin sudar gota. Cojamos algunas, una potencia extra siempre viene bien. El único problema será sacar una nave lo bastante grande, no nos podremos quedar aquí una vez la tengamos, pero eso dejémoslo para el final, ahora a por las armas.

Tras estas palabras el Conmocionador y el Torbellino asinten con la cabeza, seguidamente se dispersan por el amplio arsenal, escogiendo armas fáciles de transportar pero aparentemente de gran poder bélico, así quince minutos después la voz de Klaw vuelve a sonar...

-Ya estamos, si queréis quedaos con una de las armas, las demás dádmelas, ya he seleccionado una nave, las esconderé allí hasta que no larguemos de esta ruidosa montaña por si Kang no quisiera adueñarse de ella. Buscad a Kang y los otros e informadles, yo me quedaré aquí.

-Eso no estaba en las órdenes de Kang,-le replica Torbellino- debemos informarles estando todos juntos, además, no puedo fiarme de ti, puede que te largues y nos dejes solo a todos, aquí tirados...

-¿Osas cuestionarme, acaso no te fías de mi?, yo reuní a los Amos del Mal, yo soy el que está al mando aquí, y si intentas ponerte por encima de mi te quitaré tu estúpido disfraz como si fuera piel de plátano.

A veces las emociones mandan mas que la conciencia y ante estas palabras el torbellino solo tiene una reacción; atacar. Pero como bien sabe no es tan fácil vencer a Klaw, y aunque lleno de ira, el Torbellino rodea a su oponente. Empieza a girar en todas direcciones dejando a Klaw impotente al no poder disparar una descarga sónica sobre algo que apenas puede ver en el mismo sitio durante mas de un escaso segundo. Pero ante un atacante así solo puede hacer una cosa. Una descarga sónica amplia, salida de todo su cuerpo, llena todo el arsenal de energía que hace que se tambalee el Conmocionador, haciéndole caer al suelo a él y a Torbellino. Tras esto el Torbellino se levanta pero nunca sabremos que hubiera pasado, pues en ese momento, el arsenal se llena del sonido de las alarmas de seguridad. Dejan la pelea para otra ocasión pues ahora lo primordial es no ser descubierto.

-Dejaos de tonterías,-les replica enfurecido el Conmocionador- vuestras estúpidas bullas solo han hecho que nos descubrieran. Si ese Demonio Escarlata nos coge seguro que nos mataría.

Tras esto sonó la voz de uno de los guardias que aparecieron de repente tras la entrada al arsenal...

-Eso lo hará seguro estúpidos, nuestro amo os vio antes de que llegarais a la ciudad, es nuestro protector, siempre vigilante, apostaría mi vida que antes de que llegarais siquiera a la montaña fuisteis atacados. Otros de los forasteros que llegaron hoy están siendo perseguidos, acusados por conspiración contra nuestro señor.

-Tonto -balbucea Klaw- en nuestra tierra nuestros nombres inspiran terror, pero aquí aún no somos tan conocido. Por muchas armas que tengas tu y tus compañeros no podréis hacer nada contra nuestras fuerzas unidas. Je, je...

Tras esto los tres Amos del Mal presentes se dispersan repartiéndose a los guardias que están frente a ellos y moliéndolos a palos sin dificultad. Pero claro, estos soldados no se han entrenado para quedarse impotentes en situaciones de peligro, tras una paliza inicial, los cuatro soldados que aún pueden levantarse despliegan sus armas abiertamente dejando inconsciente al Conmocionador y dispersando durante unos segundos la energía sónica de la que está hecha Klaw, algo muy doloroso para él.

Ante la imposibilidad de poder contraatacar , solo queda una opción; la huida.

-¡Torbellino!, coge al Conmocionador, yo crearé una barrera para asegurarnos la huida.

11:00

Corren, por infinidad de pasillos, saben que no deben perder el tiempo y que lo mejor es reunirse con los otros; los demás Amos del Mal, lo único que saben de ellos es que también están siendo perseguidos por la ley de este mundo, de esta ciudad.

A cada paso que dan se encuentran con mas y mas soldados, no hay tiempo para un pelea, solo los aturden y siguen corriendo, ya no saben por donde, ya no saben hacia donde, ni siquiera saben en que lugar de palacio están, claro está, hasta que se encuentran con...

-Mierda...el Demonio Escarlata, hemos llegado a la sala del trono-se suspira Torbellino-.

Así es, el metálico guerrero escarlata se muestra frente a ellos, tras él su guardia personal, mejor equipados, con armaduras de asalto y lanzas de plasma. El Demonio se muestra bastante inalterable, quieto, analiza la situación. Sabe que había hecho bien en atemorizarles antes de que se acercaran a su ciudad, aunque eso no evitó que llegaran hasta ella. Pero eso ya no importa, ahora tiene a estos extranjeros frente a el y no les dejará con vida por mas tiempo.

-Torbellino, intenta despertar al Conmocionador, yo entretendré a este cabeza de lata...

El combate da comienzo antes de lo que Klaw hubiera deseado, la espada del Demonio Escarlata es mas que una espada normal y corriente, con solo un ligero movimiento ha destruido media sala, no ha herido a Klaw, para él, esto mas bien sonó a advertencia, a una muestra de su tremendo poder. Klaw reconoce su inferioridad, pero en esta situación solo le queda la alternativa de la lucha.

Para Klaw solo hay una forma de vencer; el número. Tras unos segundos de concentración, varios cuerpos idénticos a Klaw se desprenden del original. La ventaja del número sabe que no le servirá de mucho frente a un enemigo como este pero en esta situación no hay mas remedio. Primero tres de las cinco copias Klaw intentas retener y atar sónicamente a Demonio Escarlata. Al principio parece funcionar pero las alas doradas del demonio le liberan con facilidad.

-Torbellino, ayúdame,¿Como esta el Conmocionador? Necesitamos toda la ayuda posible en estos momentos.

-Tranquilo, empieza a despertar...

-Déjale despertar solo y ayúdame de una maldita vez.

-Pero si le dejo solo podrían atacarle, perderíamos a un apoyo...

-Ya es mayorcito para arreglárselas solo y me parece que los soldaditos del cabeza de lata no interferirán en la batalla, parece que sea un entretenimiento en el que solo él pueda participar.

-Tranquilízate, ya voy en tu ayuda.

Torbellino embiste, es la única forma de luchar que conoce. Primero lo rodea, estudia a su oponente, pero en el fondo sabe que el que le está estudiando a el es el Demonio Escarlata. Pero por suerte para el Torbellino él a terminado de asimilar a su oponente y con esa ventaja, Torbellino golpea. El Demonio ha caído pero no por mucho tiempo, rápidamente se levanta y dispara. El Torbellino lo siente, es como un rayo repulsor solo que diez veces aumentada su potencia.

-Estamos perdidos- se lamento Klaw-. No podemos hacerle ada sin que nos lo devuelva.

-Cállate Klaw, no te elegí a ti como uno de los nuevos Amos del Mal para que te estuvieras quejando todo el maldito día, ahora que estamos todos juntos solo falta que el Conmocionador se levante para que estemos a plena potencia.

Es la voz de Kang, acompañado por los restantes villanos habían aparecido perseguidos por un escuadrón de belicosos androides. Ahora ya estaban todos juntos, y el Conmocionador ya estaba despierto. ¿Pero eso cambiaba mucho la situación?

A una rápida orden de Kang todos los Amos del Mal atacan conjuntamente, por primera vez como un verdadero equipo, todos tienen su trabajo, mientras que el Juggernaut y Torbellino se libran de los guardias, los demás lanzan ráfagas de energía a la cabeza del Demonio Escarlata, incrustando sus metálicas alas en la pared, todos atacan, todos excepto el Pensador Loco, que se encontraba demasiado ocupado buscando una salida, ya que sin ningún arma no puede hacer nada en ese momento ...

-Ya se por donde marcharnos.-les replica el pensador-Vamos.

-De acuerdo, -contesta el Dr. Muerte- pero deja que antes les deje un pequeño regalito que he encontrado en uno de sus almacenes...

Durante su huida, Muerte deja caer una pequeña esfera, cuando ninguno de los Amos del Mal sigue dentro de la sala, el artefacto empieza a vibrar, haciendo que todos los objetos y el propio techo se deshaga en trocitos...

Tras esto, solo una figura se levanta de los escombros dejados, solo uno, el Demonio Escarlata.

El presente...

-Ya os dije que había visto un lugar perfecto para escondernos cuando llegamos,-dijo el Juggernaut- es perfecto; espacioso, cómodo y poco concurrido. Nadie nos encontraría aquí-

-Por una vez has hecho algo bien Caín,- le felicitó Kang- pero ahora mis preocupaciones no se centran en que nos encuentren, cuando atacamos al D. Escarlata solo parecía que lo frenábamos, no le hacía ningún daño, y por lo que me han contado Klaw y Torbellino, durante su pelea con ellos no pareció esforzarse en absoluto.

-Si jefe, además nos enteramos que el ataque que sufrimos antes de llegar fue obra suya- Klaw-.

-Eso ya no tiene importancia,¿ Encontraste una nave que cumpla nuestros requisitos?

-Si Kang, pero no la pude sacar del lugar, era demasiado grande y la dejé lista para la huida, allí también tenemos suficientes armas.

-Hablando de armas,- rie Kang- Muerte...muéstrales lo que encontraste en palacio...

-Si Kang, lo crean o no señores, la cubo que tengo entre mis dedos tiene el potencial de una bomba nuclear a pequeña escala, calculo que tiene unos diez metros de alcance. Algo que puede ser muy bien aprovechado para luchar contar Demonio Escarlata. Nos revelaremos como sus superiores.

El silencio reina durante unos segundos, hasta que una fría voz metálica resuena en el recinto, la voz del Demonio Escarlata se vuelve a escuchar...

-Eso será cuando el león caiga ante la hiena, ahora no os dejaré escapar pimpollos...

Todos notan que si existe el parecido al Hombre de Hierro, el Demonio Escarlata es igual de arrogante. Naturalmente no se le puede ver el rostro, pero se le nota en la voz, debe de tener una sonrisa de oreja a oreja, en verdad este guerrero metálico está disfrutando estas luchas. Esta vez no había nadie a su alrededor, ni hombres ni androides, solo él , sujetado con la mano izquierda a la pared y blandiendo su gran espada con la derecha.

El Demonio se proyecta sobre ellos, ninguno esta preparado para lo que les va a llegar. El Pensador Loco ante la imposibilidad de protegerse sin armas cae el primero. Mientras a una señal de Kang, el Conmocionador y Torbellino se alejan silenciosamente. Pero aún sin ellos el combate debe continuar.

Demonio Escarlata se abalanza sobre Klaw, su chispeante espada se batía hacia el brazo de Klaw, cortándolo y descomponiéndolo al instante, y aunque Klaw lo nota, ya se ha recreado otro brazo de la nada. Mientras el Dr. Muerte se dispone a disparar pequeñas cargas energéticas , que hubieran surtido efecto si no fuera por las potentes alas de acero.

Demonio Escarlata tiene todas las de ganar, Kang intenta le da con todo lo que tiene pero solo logra desequilibrarlo lo suficiente para asegurarse seguir con vida. Klaw está demasiado débil como para atacar y por muchas veces que el Juggernaut está tumbando a su enemigo, el Demonio Escarlata parece absorber la energía cinética, y ante esto por mucho que el Juggernaut pueda seguir luchando se siente impotente. Solo queda el Dr. Muerte y sabe que no resistirá mucho contra él, pero por suerte para él no será hoy cuando deba probar eso, pues en ese momento...

-¿Que demonios?- se susurró para si el Juggernaut-.

-Ya era hora,- rió Kang- esta lucha sin sentido empieza a cansarme. Si tuviera los prodigios de mi época esta lucha abría concluido con otro resultado.

-Pero que mierda es ese ruido, se dirige hacia aquí.

De repente, una gigantesca nave irrumpe en el edificio, en su interior Torbellino y el Conmocionador siguen luchando contra los androides que las protegían y mientras esto pasa, bajo donde están los Amos del Mal las órdenes de Kang empiezan a salir de su boca...

-Juggernaut, coge al pensador, Muerte lánzale las cargas nucleares, puede ser nuestra única forma de escapar...Klaw, ayuda a desalojar la nave de androides. Nos marchamos...

Tras esto, pequeñas pero aterradoras explosiones empiezan a destrozar el edificio, dejando salidas para los Amos del Mal, que sin duda alguna, nunca querrán volver a enfrentarse al Demonio Escarlata. Ahora solo hay un camino; la huida y tras la huida Kang espera obtener una nueva conquista. Una conquista para la que tendremos que esperar.

PRÓXIMO NÚMERO:

¡Continua la saga Dioses Vengativos, esta vez tendremos un Thor diferente y una nueva Asgard!