PODERES COSMICOS VOL. 2 #15
Muere... ¡y deja vivir!
Guión:
Bergil
Portada: Dibujada por John Byrne. Plano picado. El tercio izquierdo lo ocupa Kl'rt. El brazo derecho transmutado en el de la cosa, con el puño cerrado y golpeando los ordenadores que ocupan el resto de la portada. El brazo izquierdo, en llamas, flexionado y hacia atrás.
PRÓLOGO
La estrella de neutrones 824Y165 aumentó de temperatura
de forma exponencial, hasta estallar como una hipernova. La pirotecnia
espacial pudo observarse en sistemas situados a pársecs (1)
de distancia.
- Estoy preocupado, Señor del Orden. -exclamó
Lord Caos.
- No es para menos, Lord Caos: caos y orden deben estar
en equilibrio para que el Universo perdure. Lo que se acerca es el fin
de todo.
FIN DEL PRÓLOGO
En un callejón en los barrios bajos de la capital
de Satiriani, el Mundo Trono II de los skrulls, Kl'rt y su oponente se
estudiaban mutuamente antes de lanzar el primer golpe. Girando en círculo,
músculos y circuitos se tensaban anticipando el enfrentamiento inminente.
De repente, sin pronunciar una palabra, el tecnarca atacó. Extendiendo
su brazo derecho al tiempo que lo metamorfoseaba en una maza, intentó
golpear a Kl'rt, que esquivó el ataque transformando su brazo izquierdo
en uno de rocas naranjas y desviando el golpe. A su vez, encendió
su brazo derecho y lanzó un chorro de llamas al cuerpo de su enemigo,
que se limitó a abrir un agujero en su torso para dejarlas pasar,
inofensivas. Las llamas chocaron contra el muro del callejón y se
apagaron.
Más movimientos en círculo. Súbitamente,
el tecnarca se lanzó hacia adelante, buscando alcanzar a Kl'rt.
La poca información de que éste disponía sobre la
Tecnarquía le aconsejó no dejarse enzarzar en un cuerpo a
cuerpo, por lo que se elevó dejando que su atacante pasara por debajo
de él, descendiendo cuando se estrelló contra la pared que
se encontraba detrás de Kl'rt. Tampoco ahora se pronunció
palabra alguna. El tecnarca se limitó a levantarse, quitándose
de encima los cascotes.
Dezan aterrizó en la terraza de la sala del trono
y recuperó su aspecto normal. Entró caminando en la habitación
y se encontró con Talos, que pasaba nerviosamente de un lado a otro.
"Si no estuviéramos ya en la planta baja",
pensó Dezan mientras, a pesar de la tensión, una sonrisa
asomaba
a sus labios, "Talos habría abierto un surco hasta caer a la
planta de abajo".
- ¡Dezan! -exclamó Talos al verle-. ¿Alguna
novedad?
Viendo la igualdad en que se encontraban, Kl'rt decidió
que los daños colaterales no eran admisibles. Lanzó varios
rayos antimateria a su enemigo, alguno de los cuales le alcanzó,
y despegó para dirigirse a áreas más despobladas.
No forzó su velocidad, intentando que el tecnarca no le perdiera
de vista. No tuvo que preocuparse por ello. Transformando sus extremidades
inferiores en dos toberas, el tecnarca se elevó con un rugido. Entonces
Kl'rt sí que tuvo que esforzarse para no ser atrapado. Tras unos
minutos, descendió en una amplia llanura, distante varios kilómetros
de la ciudad. Instantes después, el tecnarca se posaba frente a
él.
- No creas que no sé lo que pretendes, skrull.
Tus sentimientos serán tu perdición.
Kl'rt no le respondió. Era consciente de que se
enfrentaba a un enemigo formidable, y de que iba a necesitar de toda la
extensión de sus poderes y su experiencia en combate para salir
vivo de aquel enfrentamiento. Inspirando profundamente, expulsó
de su mente todo aquello que no fuera la pelea que le esperaba. Una vez
relajado, encendió su cuerpo y esperó.
Viendo que no iba a obtener ningún resultado con
sus puyas, el tecnarca decidió concentrarse también en la
pelea. Convirtió las toberas de nuevo en piernas, y transformó
sus brazos en cañones, comenzando a lanzar andanadas hacia su rival,
que se limitó a interceptarlas arrojando bolas de fuego. Tras varios
minutos intercambiando disparos, Kl'rt se sintió intranquilo.
"Esto no es normal", pensó. "Así no llegamos
a ninguna parte. Este tipo está tramando algo". En ese momento sintió
una ligera vibración bajo sus pies. Instintivamente, despegó
y se detuvo a una docena de metros del suelo.
Ni un segundo demasiado pronto. Unos tentáculos
tecnoorgánicos que el tecnarca había deslizado por el subsuelo
perforaron la superficie en el mismo sitio que Kl'rt ocupaba momentos antes.
Retrayéndolos hacia sí, el tecnarca también se elevó
y reanudó los disparos.
El ordenador iba presentando los datos que el Servicio
de Inteligencia Skrull había reunido sobre los Tecnarcas:
"Altura: Variable. Pero, normalmente, algo mayor
que la de los skrull, y similar a la media terrestre. Al parecer, la mayoría
de los Tecnarcas no pueden crecer al inmenso tamaño que Magus [VER
Magus; Warlock] era capaz de adoptar.
Historia: La civilización conocida como
Tecnarquía procede del sistema Kvch, situado en una región
de la Vía Láctea, en el brazo opuesto al que ocupa la Tierra
[VER Tierra]. Esta raza es una forma de vida tecnoorgánica, cuya
apariencia externa se asemeja a un montón de circuitos y maquinaria.
El proceso de nacimiento se lleva a cabo mediante plantas de creación
biotecnológica. El ser conocido como Warlock [VER Warlock; Magus;
Nuevos Mutantes; Patrulla-X], el mejor conocido de todos los Tecnarcas,
se refería a su padre como su Señor Constructor, indicando
que sólo tenía un padre, pero que no existen diferencias
de sexo en su raza. Los niños se ganan el derecho a vivir combatiendo
con sus padres hasta que muere uno de los dos.
El Tecnarca conocido como Magus, padre de Warlock,
fue derrotado por el grupo conocido como Los Nuevos Mutantes [VER
Nuevos Mutantes; Saqueadores Estelares; Magus; Warlock], devolviéndolo
a la infancia. Se desconoce cómo se ha solucionado el vacío
de poder que se produjo a continuación, aunque existen indicios
de que ha tomado el poder una facción expansionista.
Nivel de fuerza: Los Tecnarcas poseen fuerza sobreskrull,
pero sus límites son desconocidos.
Poderes sobrehumanos conocidos: Los Tecnarcas son
seres tecnoorgánicos. Es decir, que su estructura parece un conjunto
de maquinaria. Los Tecnarcas pueden adoptar la forma de cualquier ser vivo
sólido o máquina. Cuando mimetizan a un ser vivo, es imposible
distinguirlo de uno real. Cuando mimetizan una máquina, puede utilizar
su reserva de energía como combustible para propulsarse. Por ejemplo,
si toman la forma de una nave, no utilizan combustible, sino su propia
energía interna. También pueden absorber moléculas
de una fuente desconocida, posiblemente extradimensional, para añadir
a su propia masa. Los Tecnarcas pueden alimentarse absorbiendo energía
de una simple toma de energía. También puede transformar
a criaturas vivas en tecnoorganismos, gracias a la inoculación del
llamado Virus de Transmodo [VER Transmodo, Virus de], y absorber sus energías.
Cuando transforman a un ser vivo, pueden no absorber su energía,
pero tampoco pueden invertir el proceso. Los circuitos vivientes de los
Tecnarcas brillan con una luz azulada cuando están repletos de energía,
son amarillos cuando tienen su nivel habitual, y negros cuando su nivel
es bajo. Los Tecnarcas pueden sobrevivir en el vacío del espacio
sin protección, y son capaces de viajar por el hiperespacio. Poseen
unos sensores tecno-orgánicos que les permiten percibir su entorno
en formas inaccesibles para los seres orgánicos. También
pueden fundirse física y mentalmente con un ser orgánico,
creando una sola entidad, y así lo hizo Warlock con Doug Ramsey
[VER Ramsey, Douglas; Cifra; Nuevos Mutantes]. Cuando ambos se fundían,
tomaban la forma corporal de Douglas Ramsey, con un recubrimiento de células
tecno-orgánicas de Warlock. Al principio, ambas consciencias eran
independientes, pero pronto aprendieron a mezclarlas. Podían cambiar
de forma, de modo que ambos cuerpos se encontraran separados, pero ligados
en ciertos puntos. Hay peligro en esa fusión, ya que el Tecnarca
puede infectar a su compañero con su virus. También, cuanto
más dure la fusión, más peligro hay de que ambas consciencias
lleguen a un punto en el cual ya no puedan separarse. Warlock siempre consiguió
romper la fusión y separar cuerpos y mentes. Como seres tecncoorgánicos,
los Tecnarcas no son vulnerables de la misma forma que los seres orgánicos.
También pueden reducirse a une forma líquida y, más
tarde, volver a solidificarse."
- ¿Tenemos algún dato más? -preguntó
Talos.
- Sí, señor -respondió el técnico
que les estaba suministrando la información-. Hay una entrada relacionada.
A medida que el tiempo pasaba, los disparos de Kl'rt fueron
perdiendo precisión y potencia. Las andanadas del tecnarca cada
vez estallaban más cerca de él, hasta que finalmente fue
alcanzado de lleno. Con un aullido de dolor, Kl'rt se desintegró.
El tecnarca sondeó con sus mecanismos la zona por si se tratara
de una treta de su rival. Al no encontrar nada, se encaminó hacia
el espacio exterior. Volando despacio para no alertar a los radares defensivos,
tardó varias horas en llegar a su destino: un satélite atmosférico
abandonado cuya antena había redirigido hacia su planeta madre y
que empleaba como base de transmisiones. Transformando su mano derecha
en un conector, lo introdujo en el puerto de introducción de datos
y emitió la secuencia que iniciaría la conexión. A
los pocos instantes, la comunicación hiperespacial se había
establecido, y el rostro del Tecnarca Supremo, cabeza del Consejo que había
asumido el poder tras la desaparición de Magus (2)
apareció en la pantalla.
- ¿Sí?
- Unidad K913L informando, señor.
- ¿K913L? Ah, sí, la destinada en Satiriani,
¿verdad?
- En efecto, señor. Esta unidad fue descubierta
por la entidad Kl'rt, que se enfrentó a ella en combate físico.
En el transcurso de la pelea, la entidad Kl'rt fue destruida. La cobertura
de esta unidad sigue intacta.
- De acuerdo, K913L. Prosiga de acuerdo con las instrucciones
que recibió - y la pantalla se oscureció.
Instantes después, estallaba ante el impacto de
un chorro de fuego. K913L se giró rápidamente, para encontrarse
cara a cara con...
- ¡Kl'rt! -escupió el nombre.
El ordenador del Servicio de Inteligencia Skrull seguía
mostrando datos:
"FALANGE
Historia: El incidente denominado "Amenaza Falange"
se produjo en el planeta denominado Tierra [VER Tierra]. Supuso un paso
más en la lucha de la subespecie dominante de la especie humana
(Homo sapiens sapiens) por controlar y, eventualmente erradicar,
a la subespecie minoritaria pero mucho más poderosa (Homo sapiens
superior o Homo superior), conocida genéricamente como
mutantes.
El primer intento tuvo lugar hace varios años, cuando el doctor
Trask [VER Trask, Bolívar; Centinelas; Molde Maestro; Patrulla-X]
creó robots gigantes a los que denominó Centinelas.
Estos robots fueron derrotados por el grupo de mutantes conocido como Patrulla-X
[VER Patrulla-X]. Sin embargo, el primer robot y más poderoso de
ellos, denominado Molde Maestro [VER Molde Maestro], no fue destruido,
lo que le permitió crear versiones cada vez más evolucionadas
de los centinelas que eran derrotadas sucesivamente por uno o varios de
los llamados mutantes [VER Cíclope; Lobezno; Júbilo]. El
humano llamado Stephen Lang [VER Lang, Stephen] casi consiguió destruir
a la llamada Patrulla-X, pero aparentemente fracasó en su intento.
La muerte del Tecnarca conocido como Warlock [VER Tecnarquía; Warlock;
Magus] durante el incidente conocido como Objetivo: Exterminio [VER
Hodge, Cameron; Genosha; Patrulla-X; Factor-X; Nuevos Mutantes] proporcionó
a los científicos anti-mutantes la oportunidad de estudiar con detalle
su estructura [VER Transmodo, Virus del], lo que eventualmente condujo
a la posibilidad de infectar, bajo condiciones controladas, a seres humanos
con el virus de transado, lo que condujo a la aparición de una especie
mixta [VER Tecnarquía; Falange] en la que competían las tendencias
antimutantes de su parte humana y el carácter colectivo de la parte
tecnoorgánica. Por las evidencias de que disponemos, parece que
la parte tecnoorgánica adquiere progresivamente el control de la
nueva entidad, por lo que no es descartable que, antes de ser derrotados
por el grupo mutante denominado Patrulla-X, la Falange lograra establecer
contacto con el planeta de origen de la Tecnarquía.
La lucha de los humanos contra los mutantes está
lejos de haber terminado [VER Nimrod; Bastión; Tolerancia Cero,
Operación]. Existen incluso indicios de que en ciertos futuros alternativos,
los Centinelas han alcanzado el cumplimiento de su directiva principal
y han exterminado o apresado a los mutantes [VER Summers, Rachel; Fénix
II].
FIN
FIN
FIN
...///...
- Explícame una cosa, Talos. ¿Cómo
es que tenemos tantos datos sobre la Tecnarquía, si nunca hasta
ahora nos habíamos enfrentado a ellos?
-Se llama espionaje, Dezan. Consiste en enterarse
de los secretos que otra gente desearía mantener ocultos, por si
en el futuro pueden resultar útiles...
- ¿Creías que habías acabado conmigo,
verdad? Hasta las máquinas podéis ser engañadas.
- ¿Cómo sobreviviste a un impacto directo?
- Puesto que no vas a salir de aquí, no tengo ningún
inconveniente en decírtelo. Viendo que el intercambio de disparos
no nos iba a llevar a ninguna parte, decidí hacerte creer que habías
acabado conmigo. Un instante antes de que fuera a recibir el impacto, emití
un fogonazo, reduje mi tamaño, me volví invisible y me transformé
en un terapiano. Terapia, como bien sabes, es un mundo sumido en una perpetua
oscuridad, en la que sólo cabe la visión infrarroja. Por
ello, los terapianos han desarrollado la facultad de alterar su emisión
calorífica a voluntad, al objeto de no ser detectados. ¡Y
ahora, dejémonos de pamplinas y vamos a lo que de verdad importa!
-y, diciendo esto, Kl'rt convirtió sus dos brazos en roca, para
inflamarlos a continuación. Acto seguido, descargó una serie
devastadora de puñetazos sobre su rival, que retrocedió sorprendido.
Aprovechando la distancia, Kl'rt lanzó una serie de descargas de
su rayo antimateria.
Ahora era K913L el que se encontraba a la defensiva. Sin
embargo contaba con un arma contra la que no existía defensa posible
en el Universo. Pero para emplearla era necesario el contacto físico.
Aunque ello conllevara su destrucción, a la postre la Tecnarquía
vencería. Por ello, K913L comenzó a avanzar hacia el skrull,
que no podía retroceder en el escaso espacio de que disponían.
Finalmente, se halló a menos de un metro de él. Los daños
que había sufrido su estructura estaban más allá de
cualquier posibilidad de reparación, pero no importaba: emitiendo
un tentáculo, lo hincó en la pierna derecha de Kl'rt que,
sorprendido, dejó de disparar.
- ¿¡Qué!? -exclamó, sorprendido.
- Demasiado bien lo sabes, skrull. Te he infectado con
el virus de transado. Más tarde o más temprano, acabarás
convertido en uno de nosotros, y contribuirás a la mayor gloria
de la Tecnarquía y a su extensión por todo el Universo.
- Nunca, ¿me oyes bien? ¡Nunca, basura cibernética!
¡NUNCA! - y convocando su poder calorífico, Kl'rt alcanzó
el nivel nova. El satélite se vaporizó, y K913L con él.
A nivel de tierra, los skrulls que miraban el firmamento pudieron contemplar
durante algunos instantes como una nueva estrella se encendía antes
de desaparecer en la negrura.
- ¿Qué habrá sido eso, Talos? -preguntó
Dezan.
- Demasiado bien lo sabes, Dezan. Eso ha sido el
poder calorífico de Kl'rt llevado a su máximo nivel.
- ¿Habrá vencido?
- Más nos vale. Si las sospechas de Kl'rt eran
ciertas, vamos a necesitar todo el poder que podamos reunir para hacer
frente a esta amenaza.
- Mis sospechas eran ciertas -dijo una voz tras ellos
-. La Tecnarquía existe y ha pasado a la ofensiva.
- ¡Kl'rt! -exclamó Dezan -. ¿Cómo
te encuentras?
- Eso es algo que necesita determinarse. Hemos de bajar
al servicio médico. Necesitaré su ayuda. Y la vuestra. Esto
es lo que quiero que hagáis... -dijo, mientras bajaban por las escaleras.
- ¿¡¿QUÉ?!? -bramó Talos-.
¡Te has vuelto loco! ¡Eso es ponernos en manos de nuestros
enemigos!
- No hay otro remedio, Talos. Allí tienen más
conocimientos sobre la Tecnarquía que nosotros y. en general, son
seres honorables. Si les exponemos honestamente nuestra situación,
estoy convencido de que nos ayudarán sin aprovecharse de nuestras
circunstancias. No es su estilo.
EPÍLOGO
La Tierra. Una conocida mansión de la Quinta Avenida
de Nueva York. Jarvis avanzaba rápidamente por los pasillos.
- ¡El señor Capitán tenía que
ir al servicio justo cuando suena el transmisor espacial! ¿Quién
cielos será?
(1)
Aclaración
científica: si un pársec son algo más de tres
años luz, y nada hay en el Universo más rápido que
la luz, la explosión no debería verse hasta pasados varios
años desde que se produjo. El que se vea de forma casi instantánea
es prueba de lo mal que van las cosas en el Universo.
(2)
Ocurrió en Los Nuevos Mutantes # 50.
Próximo episodio: Un cambio de escenario
se produce en Poderes Cósmicos v. II # 16... pero no es el
que tú te esperas. Y no olvides escribir a AUTOPISTA
HACIA EL ESPACIO-CORREO DE LOS LECTORES.