MASACRE VOL. 3 #5
TODO LO QUE USTED QUERÍA SABER SOBRE LA FUNDACIÓN ÉXODO Y NUNCA SE ATREVIÓ A PREGUNTAR I
REVANCHA
Guión:
Alex García
Portada: Masacre, subido sobre el pecho del Hombre Dragón, a punto de atravesarle con una de sus espadas. Siryn intenta sujetarlo
San Francisco.
Wade Wilson, Masacre, y Theresa Rourke, Siryn, están en la azotea de un
rascacielos, contemplando fijamente la fachada de la sucursal de La
Fundación Éxodo.
- Bien - dice Siryn -, parece que es la hora.
- Sip - dice Masacre mientras sostiene un rifle en cuyo extremo se halla un
arpón de titanio unido a un cable -, voy a presentarles mi dimisión a esos
mamones, y cobrarme daños y perjuicios... a poder ser en especies.
El arpón sale disparado hacia el edificio, incrustándose a un par de metros
de la azotea, justo al lado de una ventana cuyas luces están apagadas.
- Vale, Terry, yo iré primero. Voy a intentar abrir la ventana sin disparar
las alarmas, y entonces vienes ¿Entendido?
Siryn mira el cable y suspira. Sería más fácil volando, piensa, pero su
grito sónico podría activar las alarmas.
- Si - dice resignada -, eso me temo.
- Vamos, nena, cualquiera diría que le tienes miedo a las alturas.
El consiguiente empujón apenas le deja tiempo a Wade para agarrarse al
cable y deslizarse silenciosamente hasta la ventana.
- Mujeres... la que no intenta sacarte las tripas te empuja desde un
rascacielos. Me empiezo a sentir como Al Bundy.
Wade se apoya en la pared y saca un pequeño artefacto metálico y lo pega en
la ventana; pulsa un botón del aparato y cruza los dedos. El aparato emite
un pequeño zumbido y luego una pequeña luz verde se enciende. Acto seguido
Masacre abre la ventana como un ladrón profesional de los de las películas -
corta un círculo en la ventana y la abre desde fuera.
Una vez dentro, Masacre le hace señas a Siryn, la cual se cuelga del cable
y llega hasta la ventana sin problemas.
- Realmente este era el mejor método para entrar.
- Era el más sigiloso,¿no? - pregunta Terry.
- Oh, eso también, pero yo lo digo porque al levantar los brazos para
colgarte también se te levantan otras cosas... ¡Gracias, señor, por inventar
los trajes de spandex para tías!
- Wade...
- Vale, vale, Sor Teresa. Qué sosa eres, con Comadreja esto sería una
juerga.
- No me parece que atravesar la seguridad de un edificio que cuenta en su
personal con el Hombre Dragón sea una juerga.
- Bah, tonterías. Ya verás como esto será coser y cantar. Claro que yo no sé
coser y que dicen que canto mal en la ducha, pero nadie es perfecto.
- ¿Alguna vez te tomas algo en serio, Wade?
- Sí. Que me tomen el pelo. Y me sé de un mamón gris superdesarrollado con
alas de pollo que lo va a pagar caro.
Sin que Wade o Terry se den cuenta, una misteriosa figura observa la
escena; casi imposible de ver debido a su camuflaje que le confunde con su
entorno, emite un leve gruñido al ver a la pareja entrar en el edificio, y
decide seguirles. Nadie impedirá que lleve su venganza a cabo...
Vigilando que no haya nadie, salen de la habitación y se dirigen
rápidamente hacia un ascensor; Wade lleva en el cinturón un aparato que
congela durante unos segundos las imágenes de las cámaras de vigilancia. Una
vez dentro del ascensor, abre el panel donde están los botones y conecta
otro de los artilugios de Comadreja a los controles, consiguiendo la clave
para acceder a los niveles restringidos.
- Bueno, bueno. Veamos lo que se oculta tras la puerta número dos...
- Señor, están en el ascensor 18.
- Perfecto - dice el Hombre Dragón -; ocúpese de que se paren en el subnivel
4. Yo mismo me encargaré de recibirlos... Preparen a nuestros nuevos
efectivos.
- Como desee, señor.
Cuando la puerta del ascensor se abre Wade y Terry se llevan la sorpresa de
sus vidas al encontrarse con el Hombre Dragón en persona.
- Vaya, vaya. No recuerdo haberle invitado a venir, señor Wilson.
- Ya ves, soy como Papá Noel. Entro donde quiero por la chimenea - empuña un
potente rifle láser - y traigo regalos para todos.
- ¿Para todos? Estoy seguro de que mis asociados se alegrarán mucho.
A una señal del Hombre Dragón varios individuos aparecen ante ellos.
- Estoy seguro de que no tengo que presentarles a Hidroman, Morsa, el "Capi
Loco" y a los Metahumanos. Caballeros, Masacre y Siryn han entrado aquí sin
permiso. por favor... encárguense de ellos.
- Wade... estamos en apuros.
- Qué va, mujer, si vieras la que se armó cuando me metí en el
helitransporte de SHIELD para robarle el puro a Nick Furia...
Hidroman lanza un potente chorro de agua a Masacre. Éste se agacha y le
lanza una granada conmocionadora, pero la granada no explota.
- ¿Qué demonios? ¡Esa granada estaba en garantía!- exclama Masacre mientras
esquiva un rayo de Ojo de Fuego, de los Metahumanos.
- Me temo que tu garantía ha sido anulada por mi compañera Mákina, amigo -
dice la chica. De repente se lleva las manos a los oídos, presa de un gran
dolor, y cae inconsciente; satisfecha, Siryn se vuelve a tiempo de ver a
Morsa cargar hacia ella; Terry se echa hacia atrás y con su pierna derecha
da impulso a Morsa, quien se da de cabeza contra el cuerpo superduro de
Martillo; la mente de Siryn se llena de dolor mientras escucha una voz que
le ordena que se rinda, pero el dolor cesa cuando Wade se da cuenta de que
el causante del ataque es un chico oriental enmascarado y lo noquea con una
patada en la mandíbula.
- Esto sería más fácil si mis armas funcionasen - comenta Masacre antes de
ser arrastrado por un chorro de agua -. Y si me hubiese traído el traje de
baño - suspira.
Encerrada en una jaula de cristal, Siryn enfoca su grito, causando
vibraciones que hacen explotar el cristal; de repente Martillo se abalanza
sobre ella y la estrecha en un abrazo mortal.
- Siento mucho que nuestra primera cita acabe así - ríe él.
- Lo mismo digo - reuniendo todo el aire que puede, Siryn acerca su cara a
la de su rival todo lo posible y entonces emite su grito sónico con toda la
intensidad que puede, pero con cuidado de no reventar los tímpanos de su
rival, que cae inconsciente.
Masacre cae al suelo, herido por los rayos de Superia; acto seguido
Hidroman le envuelve en una burbuja de agua, intentando ahogarle. Siryn
agarra por detrás a Superia y la empuja hacia Hidroman, logrando que éste
pierda la concentración y liberando a Masacre. Wade mira a su alrededor y ve
a una chica joven con cara de intensa concentración e inmediatamente intuye
que es ella quien está inutilizando su equipo; esquivando con una pirueta
varios proyectiles cristalinos creados por uno de los pocos Metahumanos que
sigue en pie, aterriza delante de ella.
- Tú debes ser Mákina, ¿verdad? Diría que es un placer conocerte, pero - con
un golpe seco en la carótida la deja inconsciente - me moría de ganas de
poder hacerme el machote con un par de armas de fuego - desenfunda una UZI y
una Beretta -; a ver, ¿quién es el siguiente huevón que me va a plantar cara
y comerse dos kilos de plomo?
- ¡Umm, plomo caliente! ¡Me lo pido, me lo pido! - un hombre enmascarado
vestido de amarillo y morado salta delante de Wade.
- Hombre, si te empeñas - dispara a su oponente en una pierna -, pero Terry
no me deja matar gente, así que confórmate con llevar muletas un par de
meses.
De repente el hombre se levanta, como si nada le hubiese pasado.
- Lo siento, colegui, pero el Capi Loco tiene un gran factor curativo, ivo,
ivo, ivo.
- ¡¡¡SIIIIIII!!! ¡Por fin un poco de violencia gratuita y nadie podrá
censurármelo! ¡Bwa-ha-ha-ha-ha! ¡Come plomo, mamón!
Siryn, que ya no tiene ningún oponente, se vuelve para ver a Masacre
descargar varios cargadores de sus armas en el Capi Loco, que ríe divertido.
- Oye, hace cosquillas - dice el lunático -. Ahora vamos a jugar a otra
cosa: tú mírame fijamente a los ojos.
Los ojos del Capi Loco empiezan a brillar, y entonces Masacre deja caer sus
armas y empieza a bailar por la habitación, como un poseso.
- Soy la reeeeeiiinaaa dee los maaareeeesssss - canta.
Inmediatamente Siryn se sitúa detrás del Capi Loco y lo inmoviliza con una
presa en el cuello.
- No sé lo que le has hecho, pero más te vale que lo deshagas
inmediatamente, amigo.
- Sólo lo está pasando bien, nena. Dentro de poco se le pasará y volverá a
ser un tipo aburrido, como todos por aquí. Supongo que será por la cosa esa
que les pusieron en la nuca.
- ¿A qué te refieres?
- No sé, una radio, o algo así. A mí me la pusieron, pero se estropeó en
seguida...
"¿Algún dispositivo de control mental, tal vez? ¿Cuáles serán en realidad
los objetivos de la Fundación Éxodo?"
Masacre, mientras tanto, sigue haciendo tonterías durante un rato, hasta
que los efectos del poder del Capi Loco pasan.
- Choy un cohete chuperchónico, choy... Euh... ¿Qué demonios estoy haciendo?
- Oh, no sé, yo te he visto igual que siempre.
- Nunca te han roto la boca, ¿Eh, irlandesa?
- Inténtalo, gruñón.
- Mujeres...
En ese momento unas puertas metálicas se abren y una figura plateada, sin
ningún rasgo apreciable, entra en la sala. Sorprendida, Siryn suelta al Capi
Loco, que se aleja dando acrobáticos saltos.
- Ahora estamos en apuros - dice Siryn -; eso de ahí es el Superadaptoide.
- ¿El Superqué? ¿Es un supositorio o una compresa o qué?
- Es un androide creado con la facultad de imitar los poderes de los
metahumanos - dice la voz del Hombre Dragón a través de un altavoz -; mis
felicitaciones por el combate que acaban de ganar, pero su camino termina
aquí.
- Una leche - masacre salta hacia al Adaptoide, katana en mano, y le amputa
un brazo a la altura del hombro -; ¿Ves? Si esto copiase mis poderes
ahora...
El Superadaptoide se vuelve hacia Masacre, adoptando su aspecto.
Súbitamente, un nuevo brazo crece para ocupar el lugar del anterior.
- ...se haría crecer otro brazo. Vale, sí, estamos jodidos.
Por toda respuesta el adaptoide modifica ligeramente su aspecto, abriendo
una boca y emitiendo un terrible grito sónico que hace ponerse de rodillas a
Masacre. Siryn contraataca con su propio grito, pero el adaptoide se fija en
el cuerpo inconsciente de Hidroman y un tremendo chorro de agua derriba a
Siryn; acto seguido varios grilletes cristalinos aprisionan sus brazos y
piernas, y una mordaza del mismo material le impide usar su grito sónico;
por el rabillo del ojo ve a masacre, inmovilizado de la misma forma.
El Hombre Dragón entra en la sala, sosteniendo un pequeño aparato mecánico
en su enorme mano derecha. Contempla la escena y sonríe.
- Comuniquen a Hawkins que el experimento ha sido un éxito. El controlador
del Superadaptoide permite una eficacia en combate del 79%. Recojan a los
dos sujetos y llévenlos al laboratorio 51, y ocúpense de atender a nuestros
efectivos caídos.
Mientras sus hombres se llevan a Masacre y Siryn, el hombre Dragón no puede
evitar sonreír.
- Bendito silencio...
Y apartado en un rincón, el Capi Loco mira en silencio la escena...
PROXIMO NÚMERO: ¿Qué pasará con Masacre y Siryn? ¿Cuáles son los planes del
Hombre Dragón? Todo eso y más en la segunda parte de " Todo lo que usted
quería saber sobre la Fundación Éxodo y nunca se atrevió a preguntar",
parte 2.
LA CHOZA DE WADE
Sí, ya lo sé, he tardao mucho muchísimo, de verdad se siente. (Pero también
me sé de más de uno por ahí que lleva más que yo sin sacar un número, así
que...) En fin, ya sabéis, si queréis escribir hacedlo a
masacre@marveltopía.net Y no os perdáis el cross-over Caballero Luna/Masacre, ya disponible.