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Debido a la amenaza constante de los enemigos de la paz en Suramérica se ha decidido constituir una Fuerza de Tarea multinacional de ataque que se encargue de asegurar la paz en la región. Esta es su historia.
 
Fuerza de Tarea

FUERZA DE TAREA #1
Buenos días, Sudamérica
Guión: Sebastián

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PORTADA: La Fuerza de Tarea saliendo de entre las sombras, en la espada de Ares se refleja un hombre vestido de negro con una guadaña en una mano.

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Bogotá. Usualmente uno piensa por las películas de Hollywood que Bogotá queda en medio de la jungla y que es un pueblito al estilo de los pueblitos mexicanos de las películas. Se equivocan. Es una ciudad del tamaño aproximado de Nueva York, y en algunos lugares tan bonita como la ciudad que nunca duerme. Aquí vivo yo. Mi nombre es Juan José Martínez. Trabajo para el ejército de Colombia, pero ahí me llaman Ares. En bogota vive mucha gente loca, hay un tipo en el centro de la ciudad que vive en un monumento y un señor que jura ver extraterrestres que se transforman en cualquiera y son verdes y de orejas puntiagudas. Pero hay un caso que me preocupa. Dolor.

Dolor y los adoloridos

Ahhhhh.

"Ay, vamos, muchachos, no sean llorones, no he comenzado." Unos ladrones que iban a robar a una joven se retuercen en el piso. "Sólo voy en el nivel uno". Uno de ellos, entre gritos, se mete con su mamá. "¡Ah, no, mi mamita si que no. Ella es una santa! ¡Ahora, por eso, nivel dos."

De pronto alguien grita: "¡¡Pablo!!"

El voltea. "Ese es mi nombre, no lo uses mucho o se gasta."

Es ares. "Tenemos una misión, Pablo".

El se ríe. "Bueno, pero esta vez yo manejo, la última vez que manejó otro se cayo el avión1". Se voltea, se acaricia la perilla y le dice a la joven que acaba de salvar. "Bueno, bella damisela, si estos truhanes la vuelven a molestar o si quiere una cita conmigo éste es mi teléfono." Saca del bolsillo de su cazadora un móvil y se lo muestra, le besa la mano, se ríe y le da una tarjeta.

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Examen psicológico.

- Nombre

- Quetzalcoalt

El psicólogo del O.G.R.E2 evidentemente se siente incomodo y tose.

- Ejemm... ¿no tiene otro nombre?

Quetzalcoalt se rasca la cabeza, no tiene su traje ceremonial de batalla sino un pantalón blanco y una camisa blanca. "Creo que en algún momento tuve otro"

El psicólogo lo mira inquisitivamente. "Cuénteme de los traumas de su infancia"

El dios azteca lo mira extrañado. "NO..NO COMPRENDO". Su voz se escucha con un eco, el dios se esta exasperando.

- Si... ¿Su papá le pegaba de pequeño? ¿No tenia amigos o algo así?

Quetzalcoalt lo mira extrañado y evidentemente exasperado por el interrogatorio del hombrecillo

"QUE HOMBRECILLO TAN IMPERTINENTE ES USTED. SOY EL GUARDIAN DE LOS AZTECAS. ¡¡ESO A USTED NO LE IMPORTA!! ¡¡MI... MI MISIÓN ES PROTEGER AL PUEBLO DE LA AMERICA DEL SUR!! ADEMÁS, SOY UN DIOS."

El psicólogo tose y lo mira por encima de sus lentes. "Continuaremos después."

Quetzalcoalt sale, evidentemente molesto, y se encuentra a Llave.

"SALUDOS, MIGUEL PINO."

Llave sonríe. "Saludos... oh, gran serpiente emplumada."

Quetzalcoalt baja el tono de su voz. "Es bueno ver que algunos me respetan"

Llave contiene una carcajada y continua. "Tengo que hablar con vos."

Se dirigen a las afueras de la base del OGRE y llegan al cabo O'Higgins (la base está en la isla de Pascua) y Llave habla. "Necesito que me hagás un favor... abre las aguas."

Quetzalcoalt se concentra y una porción del océano Pacifico, de unos cien metros, se abre en dos.

"Hecho"

Llave baja y recoge un pequeño relicario, vuelve a subir y le hace una seña que termine. Quetzalcoalt lo mira extrañado.

"Oye, gracias... llevaba años tratando de sacarlo. Mi exnovia lo había lanzado al mar cuando discutimos"

La Serpiente Emplumada se da cuenta que en este nuevo pueblo que protege al parecer nadie lo respeta.

De repente un hombre llega. "Señor... tenemos problemas en Santiago de Chile."

Llave se acomoda el cuello de la camisa. "Bueno, Quetzalcoalt, ponte tu traje de batalla. Salimos en diez minutos"

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Santiago de Chile.

Un hombre habla por un teléfono móvil. "Si, Llave, es cerca de la Universidad Católica... sí, creo que así se llama el hospital... ¡¡Quieres que Geist y yo entremos ya!! Si según entiendo Madremonte está en camino... ok, no la esperaremos". Dracon mira a su compañero y le avisa. "Wolfgam, creo que depende de nosotros."

Los agentes de policía no se acercan a Dracon y a Geist por dos razones, la primera Geist produce una aura incómoda de miedo en ellos, y Dracon... bueno, él les extraña.

"Rob. Vamos"

Geist se concentra y alrededor suyo se comienza a formar una figura espectral, la figura toma forma es un espíritu tétrico. Los policías se asustan. El espíritu entra al hospital y comienza a recorrerlo. Mientras, Dracon se concentra en analizar el hospital bajo todos los espectros.

"Dracon, ¿ves al tipo de la guadaña en la sala de maternidad?"

Dracon enfoca. "Si, lo veo en visión térmica. Al parecer está muy excitado o algo así."

Se oye una voz femenina tras ellos. "Espero que no sea un pedofilo o algo así, che"

Geist se sonroja. "Te esperábamos, Madremonte"

Ella sonríe. "Vos llámame Camila"

Una nave aterriza cerca y se bajan cuatro personas. Uno de ellos es Ares.

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Dentro del hospital.

"Estos niños son la semilla del mal. Un ángel me lo dijo en un sueño." El tipo de negro con la guadaña habla con una de las enfermeras. "Ellos en el futuro van a condenar la humanidad, son cien niños, los veinte de este lugar y otros ochenta en to'o el mundo."

La materia a su alrededor responde. "Hay unos 6 mutantes ajuera. To'os ellos se van a condenar... to'o eta en los números, lea la Biblia." Saca una pequeña de su bolsillo y se la da a la mujer. "Primero me voy a encargar de los intru'os esos." El suelo se desplaza bajo él y baja al segundo nivel del edificio.

Después que llega el total de los miembros de la Fuerza de Tarea, Ares y Pishtaco entran. El hospital está desierto en los corredores, las luces fallan y la gente se esconde. De repente, el techo se mueve y los cables y todo el mobiliario los ataca. Ares, con cierta gracia y agilidad, evade unas camillas, y parte en dos una estatua de la Virgen Maria que lo ataca. "Dios mío, mi mama me mata donde sepa que partí en dos eso."

Pishtaco se ríe. "De mi se van a burlar cuando les diga que las mangueras de suero fisiológico me están dando combate." El mutante inca evade las mangueras y lanza unos dardos contra unos extintores que se disponían a atacar. El suelo se mueve y amenaza con tragarlo. De repente, salen raíces del suelo y lo destrozan.

"Oye, Pishtaco, che llego la caballería." Es Madremonte y todo el equipo.

El hombre de negro los ve y ve la estatua rota. "H..herejes... los mata'e." Baja al primer nivel, los ocho mutantes conocen a su enemigo. "Yo soy el sega'or del futuro, un angel me di'o que la humani'ad se va a destruir si no mato a cien niños que van a ser los lideres del mundo. ¿Me van a ayudar?" Los mira esperanzado y convencido en su misión.

Quetzalcoalt da un paso adelante y habla. "NO SE QUIEN ERES, PERO ERES UN COBARDE SI MATAS A NIÑOS. COMBATE CONTRA NOSOTROS, LOS GUERREROS, SI TE SIENTES DIGNO DE HACERLO."

El Segador lo mira confundido y decepcionado, y apunta su hoz hacia el. "No te reconojia, Satanás, por que e'es tu, ¿no?" Se lanza contra ellos y se dispone a atacar.

El hospital se transfigura ante su ojos y ataca a los héroes. Ares habla. "Quetzalcoalt, sácalo del hospital, preferiblemente a terreno abierto. Geist, asústalo lo suficiente para que no pelee. Los demás síganlo."

Acto seguido, el dios azteca se lanza contra él y lo taclea, lo saca del hospital. Todos lo siguen menos Estrella Roja. "No toleraré que me ordenes, colombianito de mierda."

Ares se enoja. "¡¡Pues es una jodida orden y lo haces ya!! No depende de mi, veinte niños morirán si no lo haces. ¡¡Y es solo el comienzo!!"

Estrella Roja se atemoriza ante la decisión de Ares en sus palabras, y de inmediato se dirige al campo de batalla.

Ares sube por un hoyo en el techo y despliega su campo psicoquinetico instintivamente. La primera vez que lo hizo fue en su colegio, en una toma guerrillera. Desde entonces lo ha hecho mucho contra ellos. Un orinal trata de impactar contra él, pero es desviado por su campo. Una enfermera, al verlo, se esperanza, como muchos otros.

"¿A..Ares? Yo soy colombiana. Me llamo Martha. Soy de Medellín. Estas aquí para ayudarnos, ¿cierto? Vas a matar a ese tipo, ¿no?"

Ares sonríe y calma a la mujer con su voz gentil y pausada, como le enseñaron. "No se preocupe, Martica, que mis hombres y yo ya estamos en eso. Ahora venga y me ayuda a sacar a los niños." El héroe colombiano se guarda su espada y comienza a trabajar. Varios médicos y enfermeras refugiados ayudan. Con una voz que suena como el rugido de una cascada, Ares ordena a todos y colabora.

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El campo de batalla es una zona de elementos cambiantes, es un parque fuera del hospital, pero para el Segador es un arma. Todas las estatuas y toda la materia inanimada responde a su mando. Los árboles y varias plantas de espinas tratan de atacarlo, la tierra misma ruge a sus pies. Geist se esfuerza en aterrorizarlo, pero se da cuenta de algo, esta muy loco como para temer. De repente se da cuenta de algo. El piso bajo el se derrite y se hunde como en arenas movedizas. Siente miedo a quedar atrapado.

Dolor evade todos los ataques del Segador. De repente, una estatua de un ángel lo ataca por la espalda. El gira y la golpea en la cabeza, se lastima la mano y la estatua lo golpea y le lastima la cabeza. Dolor cae inconsciente.

"Uno por uno loj voy derrotando. Que tontos son si no e' me unen." Se ríe y de repente gira para ver un cometa rojo que se acerca a gran velocidad. Con esa aceleración Estrella Roja lanza al Segador unos cien metros. Al caer, el perturbado sujeto pierde toda concentración y el parque vuelve a ser como antes. Madremonte aprovecha y hace una cárcel de piedra y tierra para el Segador.

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Afuera del hospital. En la entrada.

Llave ayuda a Ares y a la policía a evacuar el hospital. En la parte de atrás se escuchan los ruidos del combate. Se oye una explosión y se ve una luz roja. Los ruidos cesan por un minuto, y vuelve a sonar mas fuertes y horribles. Ares habla. "¡Señor! Iré a ayudar a mis hombres. La policía y el personal medico pueden continuar con su labor."

Ares se pone en marcha, Llave lo sigue. "Iré con vos, Ares. Seré de poca ayuda, pero algo me hizo pensar en la conducta del sujeto." Ares lo mira extrañando. Llave sonríe. "Debido a su poder, el combate durará mucho. Tengo un plan"

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Atrás del hospital.

Dolor se toca la cabeza y recupera el sentido. "Mierda, estoy viendo pajaritos. ¿Anotaron la matricula del camión que me atropelló? Porque si es así se las verá con mi abogado."

Pishtaco lo ayuda a levantarse. "Vamos, viejo, ¿estás bien o no?"

Dolor asiente con la cabeza y se incorpora. Dracon examina al cautivo. "Escucho su corazón latir, y al parecer no tiene fracturas. ¿Qué hacemos mientras llegan las tropas, wolfgam? ¿Alguna idea?"

El mutante conocido como Geist se encuentra en posición fetal en el suelo. Sus ojos tienen lagrimas. "Me faltó el aire, Roberto, tuve miedo como la primera vez que pasó. Estaba en Brasil y caí en arenas movedizas. Los indios me llevaron ahí. Ahí se disparo mi poder, pero esta vez..." Se calla y comienza a sollozar.

Estrella Roja se acerca y lo calma. "Bueno, amigo, no seas niña. Todos tenemos miedo. Ahora párate y pórtate como si orinaras parado."

Quetzalcoalt, que se encontraba al margen, interrumpe. "El enemigo se despierta, creo que va a atacar otra vez."

El Segador rompe la jaula con su guadaña y lanza una onda que desestabiliza todo el piso. Está enojado, sus ojos están inyectados en sangre. Aunque es un loco relativamente pasivo y cree lo que dice, en este momento se enfurece. "¡¡Por que no me dejan cumplir mi misión, ayudantes del diablo!! ¡¡Lojs goy a matar!!" Ruge, y el parque entero se vuelve contra los héroes.

El piso los ataca, las piedras vuelan en dirección a ellos. Pishtaco evade los escombros a alta velocidad. Dolor se concentra y comienza a esquivarlos, no evadiendo el que viene sino el que está por venir. Se comienza a acercar, Geist trata de controlar su miedo y lanza su espectro contra el. La forma fantasmal es lo mas aterradora posible, tanto que el Segador dirige sus ataques contra el. En su estado intangible el espectro solo lo desespera. Pishtaco, en su descuido, consigue alcanzarlo, y le propina un puñetazo a toda velocidad, fracturándole la quijada y llevándose varios dientes. El Segador instintivamente lo hiere con la hoz en el brazo. El mutante peruano grita y cae al suelo debido al dolor y al tamaño de su herida. La sangre corre a chorros.

El Segador descarga su guadaña otra vez contra el peruano. Quetzalcoalt detiene el golpe de gracia y descarga toda su fuerza mística contra el trastornado mutante, no le hace ningún daño y no le causa gracia.

"¿Cómo crees que me 'as a dañar a mi, que Jehová me escogió. Solo un Dios me podría hacer desistir, ¡y u'ted no ej un dios!"

La serpiente emplumada se enfurece, pero antes que logre hacer algo es aturdido por innumerables piedras que salen del suelo y por todo el mobiliario del parque entero.

Estrella Roja ataca al enemigo desde el aire con ráfagas de fuego. El mutante se concentra y crea un vació de aire en la zona donde se encuentra Estrella Roja. La bella mutante peruana cae a pique, solo para ser detenida por Ares, quien se impulsa en las piedras y escombros para atajarla.

"M...me salvaste l... la vida... pre... preferiría morir." La mutante se desmaya.

Solo quedan Ares, Llave, Dolor, Dracon, Madremonte y un aun atemorizado Geist. El Segador se ríe. "Si creen que me pueden ganar están locos."

Dolor se desaparece por el piso, enredado por varias raíces, y segundos después aparece tras el. Le hace señas de silencio a todos y le tapa los ojos con las manos.

"No, no, no, respecto a nuestra locura el psiquiatra es el que da la ultima palabras... ¡¡¡ahora sufre como has hecho sufrir!!"

Dolor llega al máximo de sus niveles. El Segador grita y se retuerce del dolor. "¡Ahora, Geist!"

El homo superior paraguayo usa su poder contra su enemigo, le devuelve todo el pánico que el le causo. El Segador se desploma y todo el parque se normaliza definitivamente. Solo queda destrucción.

Minutos después, y tarde, como siempre en esta zona del globo, las fuerzas de rescate llegan: los bomberos, los paramédicos (irónico, considerando que están en un hospital) y los periodistas (que son unos metidos y Dolor los odia a muerte3).

Dolor se encarga de producir un efecto analgésico en Pishtaco, quien tiene el brazo bastante perjudicado por la herida de guerra. Quetzalcoalt pide disculpas al equipo por no morir en combate y baila la danza ritual del arrepentimiento. Estrella Roja mira con cierto resentimiento y extrañeza a Ares. ¿Por qué si le desobedece, lo insulta, y le mete animales muertos en su armario de la base la ayudo? Geist habla por un móvil con su novia, que vive en Uruguay (específicamente en Montevideo). Dracon y Madremonte ayudan a encerrar al Segador en una nave prisión (de esos modelos viejos de los 80 que O.G.R.E. compro a S.H.I.E.L.D.). Y Ares y Llave hablan con los medios.

- "Según entiendo, ustedes son un grupo de mutantes. ¿Algo parecido a los grupos mutantes de E.E.U.U?", dice una reportera de CNN.

Llave responde. "Si se refiere a los Cachorros o al equipo de primera línea del gobierno norteamericano del que se ha hablado en varias ocasiones, si y no"

Ares continua. "Nuestro radio de acción es mas amplio que el de estos equipos, y nuestros miembros son de varias nacionalidades. Pertenecen a una organización autónoma al Concejo de Seguridad de Sudamérica, organización que representa los intereses de Perú, Argentina, Chile, Paraguay y Colombia."

- "si, pero, ¿cual es su tarea y por que se les denomina Fuerza de Tarea?" Pregunta un reportero de el clarín de argentina

Ares responde. "El termino Fuerza de Tarea es empleado respecto a las fuerzas especiales de una fuerza armada o de seguridad. Un ejemplo de esto es la S.W.A.T. en Norteamérica"

- "¿Y cual es su tarea?", pregunta el mismo reportero con insistencia.

Llave responde. "Si algún sujeto poderoso ataca alguno de nuestros países, o algún país cercano y este nos pide ayuda, ahí estaremos. Si la policía y el ejercito no pueden contener el problema, ahí estaremos. Si un país usa mutantes o seres poderosos para atacar alguno de nuestros países, ahí estaremos. Esa, señor, es nuestra tarea. Ahora, si nos disculpan..."

Ares y Llave se retiran. Los reporteros caen como moscas sobre las victimas y les comienzan a hacer preguntas morbosas y estúpidas. Un hombre mira en un televisor el debut de estos campeones y habla a una mujer. "Ellos no van a hacer eso. Llama a los Libertadores. Mañana les demostraremos quien manda en este continente."

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1.- En su lógica torcida, Dolor se refiere a la colisión del anual de Factor-X.

2.- (Organización de Guardia y Rastreo de los Estados Sudamericanos)

3.- Dolor me dijo que escribiera eso, el escritor no se hace responsable por amenazas o calumnias en contra de periodistas, aunque si les guarda cierto rencor.

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EL TREN AL SUR

¡Buenoo! Este es el primer número, esperemos que guste o, si no, no pasara de ser un one shot... nah, mentiras, probablemente lo siga escribiendo hasta que mi correo se llene de cartas insultantes. Bueno, en todo caso, escriban a sebastian0102@yahoo.es (cartas insultantes al menos solo mándenlas después del numero 3)

 
 
   
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