FACTOR-X 169
Colores primarios I
Guión:
Jose Cano
PORTADA: Vemos un cartel de propaganda electoral, el fondo es una bandera estadounidense, en el centro está la cara sonriente del candidato al que se
anuncia, cuya mitad izquierda es completamente deforme, parece estar
quemada. Debajo viene el eslogan: "Vota a Leroy, vota al futuro."
Carolina del Sur posee una superficie 199.730 km2 y una población de
3.512.000 personas, de las que aproximadamente 350.000 son mutantes, hecho
que lo convierte en uno de los estados con mayor densidad de población
mutante de todo EEUU, quizás sólo superado por Nueva York, California y
Texas. Su capital es Columbia y su flor del estado el Jazmín amarillo, que
en el lenguaje de las flores representa el desengaño.
Hoy luce una maravillosa mañana de otoño y les habla Elena Pocklitz para el
Ojo en el Cielo.
Magneto se pasea por el edificio de las Naciones Unidas, en Uruguay un
comisario de policia es detenido por maltratar a un muchacho de 16 años por
ser mutante acusándolo de un crimen que no cometió, un grupo rádical alemán
comete varios atentados en Düsseldorf y Frankfurt en nombre "del verdadero
superhombre de Nietzsche" y Factor-X es cada día más popular en las
encuestas.
Vivimos en un mundo maravilloso.
Dicen que lo más importante para un político a la hora de dar un mitin es la
presencia. Muchos analistas mantienen - de modo bastante cínico y
deprimente - que la impresión que sepan dar, su capacidad de conquistar al
público y "seducir" a la cámara son mucho más importantes a la hora de ganar
votos que el mensaje de su campaña o su programa de gobierno. Se trata de
llamar la atención del electorado y transmitir una sensación positiva. Frank
Leroy al menos ha conseguido lo primero.
Las cámaras de las televisiones de todo el país y gran parte del mundo
siguen desde hace una semana a alguien que hasta hace poco no era más que un
hombre oscuro de la política local, medianamente conocido fuera de su estado
por sus intervenciones polémicas en las tertulias televisivas donde vertió
opiniones manifiestamente pro-mutantes, aunque bastante valorado dentro del
mundo de la política, por unos como un peligro, por otros como un aliado en
potencia.
Antes del pasado martes Frank Leroy ya había sido víctima de numerosos
boicots en sus actos públicos por parte de organizaciones anti-mutantes como
la Última Defensa de la Humanidad o el Ku Kux Klan, además de acciones
legales llevadas a cabo por los Amigos de la Humanidad, de cara a prohibir
ejercer en política basándose en que algunas de sus declaraciones eran
"apología del terrorismo".
En la última semana se han producido cinco ataques contra su residencia en
la ciudad de Columbia, en una ocasión un activista radical trató de
incendiarla, y a la salida del colegio sus hijas fueron apedreadas por un
grupo de niños. Su familia ha sido trasladada al completo con destino
desconocido, y el cordón de seguridad en torno a su persona en los actos de
la campaña se ha doblado. Incluso tres miembros de Factor-X han sido
designados por Valerie Cooper en persona para que protejan la integridad
física del candidato mientras dure la campaña electoral.
La pregunta que ahora mismo gran parte del público se formula es: ¿podrá
aguantar Frank Leroy la presión psicólogica de las
reacciones a la revelación de su condición de mutante y su pretensión a un
asiento en el Senado de los Estados Unidos de América?
Random está apoyado en el afeizar de la ventana en actitud chulesca,
observando con pretendida indeferencia a las personas que se concentran
alrededor del centro de campaña, mientras enciende un cigarrillo. Antes de
que tenga tiempo de darle la primera calada Dominó se lo arrebata y lo tira
la calle.
- Si te concentras para que no pueda hacerte daño la nicotina, pierde todo
el sabor, así que no merece la pena.
Random le lanza una mirada oblicua.
- Me aburro.
- Los periodistas llegaran en unos minutos y................
- ¡Dame algo que hacer de verdad! ¡Alguien a quien dispararle!
Dominó suspira.
- Cuando uno hace de guardaespaldas lo mejor que puede pasar es que no tenga
que dispararle a nadie. Este trabajo consiste en que no pase nada nunca.
Random bufa.
- Bueno, nunca creí que diría esto, pero deberías aprender de Carosella. Es
un profesional. Piensa que tus poderes te convierten en el guardaespaldas
perfecto, y que todo lo que aprendas ahora puede servirte algún día. No es
mala forma de ganarse la vida.
Él parpadea.
- ¿Qué quieres decir? ¿Si me marchase de Factor-X? Nunca me he
planteado.........
- No estoy queriendo decir nada, sólo intento que.........
- Ey, gente, ¿cómo va eso?
Guido aparece desde el fondo del pasillo y se acerca a sus compañeros.
Aunque Random y Dominó llevan puestos los trajes de Factor-X, él va con el
tópico smoking y las gafas oscuras, parece el fichaje estrella de Men In
Black III.
- No tan bien como a ti, Carosella, a juzgar por el pestazo a perfume que
llevas encima.
Guido se queda pasmado un instante y luego sonríe.
- Bueno, jefa, yo siempre estoy dispuesto a probar nuevos olores.
Y le da un codazo a Dominó. Esta se vuelve hacia él y lo mira. Guido
retrocede y levanta las palmas de las manos hacia fuera.
- Empezaste tú, yo sólo bromeaba y ........
- Date una ducha para quitarte ese olor y baja para cuando lleguen los
periodistas. ¿Dónde está Leroy?
- Le están cambiando las gasas de la cara y el brazo, para ponerlo
presentable, ya sabéis.
- Random, baja y colócate en la puerta de su habitación. Carosella, sabes
que luego no deberás despegarte de él, así que vete ya y quitate ese olor
rápido.
Los dos obedecen. Dominó se asoma un instante por la ventana y observa a la
muchedumbre en silencio. Después sigue el mismo camino que Random y baja las
escaleras. Una de las secretarias, una rubia, pasa por su lado. La líder de
Factor-X sonríe. Huele al mismo perfume que Guido.
La policia separa con la mayor eficiencia de la que es capaz a los
manifestantes de uno y otro bando, anti-mutantes y pro-mutantes, cada uno a
un lado de la barrera humana. Dominó pasa por el estrecho pasillo que dejan
entre las vallas y los antidisturbios sin mirar a los lados, llega hasta la
furgoneta de la prensa y ayuda a bajar de ella a la periodista, que le
sonríe.
- Volvemos a vernos. - dice Elena Pocklitz.
Sin soltar el micrófono y seguida de cerca por su nuevo cámara - el anterior
palmó en la segunda batalla contra La Comuna (1) - llega hasta la puerta con
la mutante precediéndola.
- Pasen, por favor. - dice Dominó, empujando la puerta con la espalda y
extendiendo el brazo indicando el interior del edificio.
Leroy baja las escaleras del piso superior acompañado por su director de
campaña, al que sus competidores calificarían de demasiado joven e inexperto
y sus partidarios de innovador y lleno de energía, apenas 27, apestando a
Harvard y con la carrera de derecho en el bolsillo, podría estar forrándose.
Rubio, pelo engominado hacia atrás, ojos azules, rompecorazones aficionado
en el instituto, de nombre Walter Poe. Guido camina unos pasos por detrás de
ellos.
El cámara se detiene, Elena comienza a hablar con Leroy. La periodista
procura no fijarse en que la mitad del rostro del candidato presenta un
aspecto más bien putrefacto, sanguinoliento, como una herida abierta.
- Es hora de hablar de algo evidente. Oimos, decimos: "Fran Leroy es
mutante", pero nadie habla de la naturaleza de su mutación. Es algo bastante
desagradable, por cierto.
- Mr. Leroy no pretende ocultar nada respecto a su mutación, Mr. Chambers,
como creo que ha quedado bastante patente.
- No pongo en duda su honestidad, sólo quisiera que usted, como su portavoz,
Mrs. Steinbeck, nos explicase a mí y al resto de participantes en la
tertulia, además de a nuestra querida Anne Pink porque el candidato presenta
al menos una vez por semana un aspecto tan.... desagradable.
- Mr. Leroy sufre en parte izquierda de su cuerpo un ciclo de descomposición
y regeneración cada ocho o nueve días. Le resulta bastante molesto llevar
trajes de Armani como el suyo, Mr. Chambers, durante la parte peor del
ciclo, que suele durar al menos 24 horas, y que en ocasiones lo ha llevado a
tener que cancelar actos públicos, y siempre ha de llevar durante al menos
tres días una serie de gasas sobre su brazo izquierdo y en parte del cuello
y el pecho para evitar males mayores. En compensación durante otros días,
buenos..... - la mujer sonríe - se podría decir que el aspecto de Mr. Leroy
es inmejorable, incluso mejor que el suyo, Mr. Chambers.
- Random, ¿estás en tu puesto?
- Claro.
- Bien. Carosella, ¿cómo va todo?
- Estupendamente. Puedes verlo desde tu esquina en sombras, jefa. Elena
sigue la entrevista y él contesta como buen político. Me encanta este tío.
- Calma ese entusiasmo. Concéntrate en el trabajo.
Poe se acerca a Dominó y se coloca junto al oido en que sabe que no está el
micrófono con el auricular.
- ¿Todo bien?
- No tiene por qué preguntar cada quince minutos. Cuando algo vaya mal se
dará cuenta por sí mismo.
La rubia del perfume pasa junto a ellos.
- Carosella, tu ligue apesta.
- ¿Mi ligue? ¿Elena? Todavía no me la he ligado. Y parece muy limpia, no sé
por qué......
- Me refiero a la rubia, la del perfume barato.
- ¿Esa tía? No me la he ligado, se pegó a mí en el ascensor. Apesta así
desde que llegó ayer, vete a saber......
- ...........
Dominó se vuelve hacia Poe.
- ¿Ve a esa chica? ¿Quién es? ¿En qué trabaja?
- Mmmm.... Creo que no la conozco. Debe ser de la tele.
- No, no lo es. Random.....
- La sigo.
- Carosella, pase lo que pase......
- .......no te separes de Leroy.
- Poe, tenemos que llevarla al pasillo, dónde no hay nadie, quiero pedirle
que..... ¡¿pero qué coño estás haciendo, Random?!
- Disculpa nena, ¿tienes fuego?
La mujer parpadea un segundo, sorprendida.
- Er..... sí, claro.
- ¿Me lo das ahí atras? Con todo el revuelo de periodistas y papeles no hay
nadie en el pasillo.
Poe escucha como los dientes de Dominó paran de rechinar.
- Vale, chico, captado, no empiezes a tirártela que voy para allá.
Random y la chica llegan al pasillo. Ella se pone de puntillas y le susurra
al oido.
- Chicos listos.
Y luego lo empuja por la ventana más cercana mientras el hombre-x masculla
maldiciones.
BLAM, BLAM,
Los dos disparos de Dominó aciertan en un hombro y en una rodilla. Detrás de
ellas, Poe cierra las puertas que comunican a la sala contigua, quedándose
en el pasillo. La mujer se retuerce, por las heridas de bala comienza a
brotar un líquido negruzco y viscoso, hasta que el cascarón se desprende, y
todo lo que queda es un ser compuesto unicamente por ese líquido, con forma
pretendidamente humana. Un chorro del líquido se dispara contra Dominó, que
se aparta, así que este acierta sobre la pared, disolviéndola. Otro es
lanzado contra Poe, este permanece quieto, pero el líquido parece golpear
contra una pared
invisible. Dominó salta sobre la mutante cubriéndose las cabeza con los
brazos y tirando a un lado la pistola. Pasa a traves de la masa viscosa y
rueda por el suelo empapada de él, humeando.
- Parece que las moléculas inestables sí que son resistentes.
- No lo entiendo. - murmura la villana, que empieza a supurar un nuevo
líquido verde y a sonar de modo muy extraño. - Sea de lo que sea tu traje
deberías haberte quedado calva...... No has podido protegerte la cabeza sólo
con los brazos.
- ¿Ah no?
Random aparece por la ventana, con cara de malas pulgas.
- Me agarré a la ventana del segundo, ¿dónde está la zorra?
Dominó señala a la masa viscosa.
- Ya ves por qué llevaba tanto perfume.
Random opta por el mismo sistema que Dominó y se lanza contra la mutante,
que parece decidirse por "abrazarlo". Empiezan a humear.
- Estos trajes no pueden ser tan resistentes.
Dominó observa la pelea mientras piensa en un modo de contener al monstruo.
Random se suelta y rueda por el suelo. El traje sigue intacto. Moléculas
inestables. Sin pensarlo dos veces se arranca una manga del traje y hace una
bolsa, que le lanza a Random.
- Métela dentro.
La mutante observa y escucha, trata de huir dirigiéndose hacia Poe, pero se
detiene a medio camino, como si no pudiese avanzar, y encara a Random, que
se le lanza sobre ella una vez más. Cogiéndola con las manos desnudas, como
quién amasa arcillaen lugar de a una mujer hecha de ácido, la mete dentro de
la bolsa de moléculas inestables y hace un nudo lo más fuerte que puede.
- Buf...... ¿Sabes que esto es ridículo? ¿Cómo demonios has podido hacer una
bolsa a partir de una manga de tu traje? ¿Y cómo sabías que había que
lanzarse contra ella para hacerle daño?
Dominó se levanta y se acerca hasta Random, le coloca una mano en el hombro
y dice:
- Chiripa. - se dirige hacia Poe. - ¿No tendrán hilo de adamantium para
cerrar el envoltorio, verdad?
- Pues aunque parezca increíble......
CORREO GUBERNAMENTAL
Dudas y sugerencias: tamborhojalata@hotmail.com.
Saludos
José A Cano/Advenedizo