PORTADA: Se ve a Trébol de frente, y de fondo diferentes viñetas en la que se le ve enfrentándose a Zola, besándose con Peregrino, tomando café con Estrella del Norte y en la cama de hospital abrazando a su hija recién nacida.

Molly se levantó con una gran resaca esa mañana. Habían salido a celebrar el ascenso en el trabajo de su amiga y se había pasado con la ginebra. Hacía muchísimo que no bebía. De hecho apenas bebía desde la época de la universidad cuando se enteró días después de que se había liado borracha con su mejor amiga, y que no era la primera vez que ocurría. No es que tuviera nada en contra; total sabía bien que era hetera de los pies a la cabeza y que lo que había pasado era debido al alcohol, pero no le gustaba la idea de quedar en ridículo y encima no tener forma de defenderse de ello. Pero la verdad es que eran buenos tiempos aquellos, en los que lo que más le importaba era no quedar demasiado en ridículo y hablar del macizón profesor de ética... ahora tenía muchas mas cosas en las que pensar... como mirar en el pasado... y pensar en Frank

Frank Alain Racine. Ese era su nombre completo por lo que ella sabía. Fue su primer amor, más allá de los típicos enamoramientos de instituto. Él fue la primera persona por la que llegó a pensar a veces por encima de él que en ella misma. Y esperaba que alguna vez él hubiera hecho lo mismo con ella, pero lo dudaba.

Racine. Lo había conocido por primera vez muy de pasada cuando aquel "lo que sea" llamado Gran Maestro los reclutó para aquél extraño juego¹. Ella poco tiempo después, debido a la pelea con su padre decidió dedicar sus esfuerzos a su trabajo de profesora de guardería, mientras intentaba sacar el título de profesora de grado superior. Estaba decidida a dejar de ser superheroina, pero se dio cuenta de que si le habían dado ese don, era para usarlo por el bien de la gente, por lo que no duro mucho su tiempo de abstinencia superheroica.

Tiempo después, los gobiernos de los distintos países europeos decidieron que era buena idea que superhéroes de sus países colaboraran en misiones importantes, así que en una misión contra un grupo de terroristas internacionales que formaban parte de una rama de Hidra conoció por fin a Frank. Después de la misión Halcón Peregrino le invitó a tomar algo, y ella aceptó. Fue amor a primera vista. Odiaba admitirlo pero le atraía terriblemente. Y él también parecía atraído. Fue todo un flechazo.

Al principio todo fue estupendo y maravilloso. Y lo mejor de todo es que podía compaginar sus estudios para profesora con su vida superheroica y su relación con Frank. Resultó que en su identidad civil era un reputado escritor, aunque eso no quería decir que fuera un gran escritor. Aprovechaba sus misiones como mercenario por diferentes y exóticos paises para luego contar en sus libros una versión de lo ocurrido, añadiéndole cosas de su propia cosecha. Eran las aventuras de Jean LaFonte, aventurero y agente secreto frances, con habilidad para estar siempre en lugar exacto en el momento preciso y para enamorar a toda mujer que apareciera en su camino. La verdad es que su estilo era muy malo, y además no era él el que escribía los libros...bueno sí, pero siempre había alguien que le añadía cosas para hacerlo más interesante o le corregía los múltiples errores gramaticales (lo sabía porque ella misma le retocó uno, basado en un enfrentamiento que tuvo con Cráneo Rojo² (en el libro un hijo secreto de cierto general nazi) trabajando codo con codo con Ojo de Halcón (un agente secreto americano experto en tiro) y el Hombre de Arena (el amigo de agente americano, apodado "el Ogro"). Sinceramente estaba más interesante lo que le había contado que lo que escribió en el libro.

Debido al gran éxito de los libros, Frank vivía en el lujo, y pese a que tenía una mansión en Marsella, compró una gran casa a pocos kilómetros del pueblo en las afueras de Dublin, donde vivía, llevándose a su mayordomo y su propia ayudante, Ursula (autora de los retoques de la gran mayoría de sus libros, por cierto), ex agente de SHIELD, de quien Molly aún se preguntaba cómo es que trabajaba para Peregrino. Ella siempre sospechó que estaba enamorada de Frank, aunque con su modo de actuar no lo diese a entender, y pese a eso se llevaban bastante bien, gustándole especialmente continuar los dardos verbaloes que Úrsula le lanzaba a Frank.

Fueron meses muy especiales para ella. Trabajaron juntos en varias misiones, y le acompañó a recoger el titulo de profesora. Parecía que las cosas no podían ir mejor. Y efectivamente: solo podía ir a peor.

Un día dejo de llamarla. Primero pensó que simplemente estaba ocupado en alguna misión. Pero al intentar llamarlo descubrió que su teléfono estaba cortado. Y al ir a su casa descubrió que ya no estaba allí. Había desaparecido. Podría haber ido a Marsella a verle y a pedir explicaciones, pero por un lado lo más seguro es que tampoco estuviera allí por lo menos en una larga temporada, y por el otro lado estaba bastante claro que no estaba interesado en que le siguiera; estaba dando por terminada su relación, de la forma más dolorosa posible.

Muy poco después participaron en la misma misión juntos, pero afortunadamente para ella (no hubiera soportado el tener que verle) cada uno tenía su propia misión en su propio país³, así que no tuvo necesidad de verle.

Después de eso estuvo muy ofuscada durante un par de meses. Por suerte Jessica, su compañera de piso, la ayudo a animarse, y en una de las salidas nocturnas conoció a Henry. El resto fue historia. Se enamoró, se acostaron, quedó embarazada y Henry desapareció sin dejar rastro. Ese fue el golpe definitivo. Su depresión bien pudo costar la vida de su hija embarazada, pero afortunadamente (¿por qué no le parecía tan raro?) nada pasó y su hija nació normalmente y en un parto casi sin dolor. El embarazo y nacimiento de su hija fue la razón lógica por la que decidió dejar de ser heroína de nuevo. Y parecía que iba a ser la definitiva. Pero no fue así.

Y ahora estaba en un grupo con gente estupenda: Cristal era una mujer encantadora, de esas que parecen muy dulces e inocentes pero que ocultan un algo más que le hacía llevar la voz cantante en la relación con su marido. Pietro era un gruñón, y un tipo la mayoría de las veces insoportable, pero sin embargo también tenía un algo que hacía que te dieras cuenta de que una vez eras amigo suyo era fiel a ti hasta la muerte, y eso le encantaba. Relámpago era un amor de chico; su hermanito pequeño. Y Artemisa era la típica feminista radical, y a ella siempre le han caído bien las feministas radicales así que no tenían ningún problema con ella.

El único problema era Frank. Y un problema gordo. Al principio parecía que podría llevarlo, pero poco a poco se estaba dando cuenta de que era algo imposible. No le podía perdonar lo que le había hecho, y sabía que antes o después iba a estallar. Y una vez estallara no podría estar en el grupo más. Y eso le dolía en el alma.

1.- En la famosa Contest of Champions I #1 al 3, publicada en España por Forum en el Marvel Héroes Especial Verano 1989 si no me equivoco, y hace poquito en un tomo.

2.- Ocurrió en Solo Avengers #6

3.- Alpha Flight v1 #108

EN EL PRÓXIMO NÚMERO: segunda parte de Vidas Pasadas. Esta vez ahondaremos en el pasado de Halcón Peregrino

EUROBASE

No hay correo para este numero, pero aprovecho para disculparme por el retraso (otra vez) de la serie, y para explicar un poco lo de esta saga. Debido a la falta de tiempo y a ciertos cómics que me he leído vía DC++ me he dado cuenta que algunos planes que tenía para la sería son un poco complicados de cumplir, así que he decidido hacer punto y aparte e ir preparando y atando algunos cabos sobre la historia de algunos de los personajes, y luego ya continuar un poco con la línea temporal actual de la serie. Espero que os gusten estas mini historias (pensadas originalmente primero para un anual y luego para un número único, pero es que al final he decidido hacer el Xumer y dividirlo en tres mini números XDDD)

Ala, agur.