Portada: El escudo de SHIELD. Por encima suya y del titulo de la serie descienden manchas negras que parecen cubrir el cómic por completo.
Estos sucesos tienen lugar antes de la Guerra de Bandas aparecida en Asombroso Spider-Man
En alguna parte del cielo de Nueva York.
Aquellos que lo han visto anteriormente han quedado fascinados o simplemente
han dejado que los pocos segundos de asombro quedaran en un vago recuerdo de
algo que quizás no había pasado. Sobre las nubes, estable y majestuoso, el
Helitransporte de SHIELD, la mayor organización creada jamás para la defensa
de la tierra.
Como el ojo contemplativo de un desconfiado dios, el Helitransporte vigila
un viejo rancho.
- Comandante Bridge. Hemos realizado un rastreo de superficie en la zona
delimitada y tenemos unos 25 individuos armados de un total de 40. Suponemos
que hay mujeres y niños.
Aquel joven uniformado permaneció firme tras notificar el rastreo. Esperaba
una respuesta de su superior, que de manera pensativa contemplaba un buen
número de pantallas cargadas con una amplia diversidad de imágenes.
- ¿Está ahí? - preguntó firmemente G.W. Bridge
- Afirmativo
Bridge resopló mientras cerraba una carpeta bastante gruesa con el nombre de
Frank Castle. Parecía resignado a realizar aquella operación. El joven
pareció notar aquella falta de disposición, y tras unos segundos de silencio
regalado volvió a su deber.
- Señor. Tenemos dos equipos de asalto preparados y esperando su
confirmación.
- De acuerdo. - contestó Bridge - Operación Cazador Cazado aprobada. Proceda
a resolución.
El joven saludó y se marchó a toda prisa del despacho de Bridge. Nada más
salir activó el transmisor que llevaba en su muñeca sin dejar de marcar el
paso firme.
- Aquí Agente Travis. 5 minutos para el asalto.
- Roger. Grupos Skull 1 y Skull 2 preparados - contestó alguien
- De acuerdo chicos. Pero esperad mi llegada. Siempre quise cazar a este
cabrón. CORTO
El joven apagó el transmisor mientras se detenía a la espera del ascensor.
Su rostro mostraba una sonrisa singular que casi rozaba la perversión.
Mansión Central del Rancho Willgod
Sammuel Smith, conocido como el "Reverendo", estaba sentado sobre una vieja
silla, contemplando la oscura figura de Frank en el suelo. Junto a él,
Anuska, su nueva mano derecha, que no acababa de salir de su asombro con
aquella monstruosidad.
- ¿Por qué habrá venido? ¿ Cómo se enteró de nuestro movimiento? - preguntó
ella
El Reverendo tardó en contestar. Anuska ya estaba acostumbrada a tener que
mantener la paciencia con él.
- No lo se. Quizás se toparía con alguno de nuestros Angeles Cazadores.
La joven se acercó a Frank. Su piel se había vuelto completamente negra, con
una textura similar al látex. Apenas podían diferenciarse sus rasgos
faciales, dominados completamente por una lámina negra. Estuvo observándole
detalladamente, como si intentase encontrar algo que le pudiera quitar el
factor sobrenatural al asunto. Reposó la palma de su mano sobre el pecho de
Frank y notó que respiraba. Seguía vivo.
- Espero que no interfiera en nuestros planes, Smith.
- Puedes estar tranquila - contestó el Reverendo.
- ... Cosa que tu no pareces dominar - dijo ella acompañando sus palabras
con una mirada fija mientras se incorporaba.
El Reverendo se levantó estrellando la silla contra la pared. La joven
mercenaria desenfundó rápidamente la pistola y apuntó al Reverendo, quizás
con decisión o quizás con un poco de miedo. En ese preciso momento, debido
al estruendo creado, entraron dos hombres armados que apuntaron a la chica
mientras parapetaban a su líder.
Todo el mundo se miró. Todos cruzaron miradas de indecisión en un constante
intento de adelantarse a las intenciones del otro. Un descuido podía costar
la vida. Nadie apartaba sus armas. Sammuel miró a todos y alzó la mano
tranquilamente.
- Bajad las armas. ¡ TODOS! - gritó
No hizo falta un segundo aviso. Todos guardaron sus armas y los dos hombres,
un poco reminiscentes, se marcharon. El Reverendo quedó de nuevo a solas con
la joven y con el cuerpo de Frank.
- Dime ahora quien controlaba el asunto - dijo el Reverendo acercándose a la
chica en extremo.
- Me faltaba una buena razón para matarte - respondió ella tranquilamente. -
Ahora si no te importa, tengo cosas que hacer, para el bien de ambos.
Ella intentó comenzar a caminar, pero un fuerte agarrón del brazo por parte
del Reverendo le hizo detenerse. Sabía que iba a pasar eso. No le cogió de
sorpresa.
- ¡ Te encontré moribunda en la selva. Eras una guerrillera acabada, llena
de parásitos, sangre y barro. Soy tu nuevo Padre. No puedes faltarme al
respeto!
Ella no dijo nada. Quizás fue el tono sosegado y amenazador del Reverendo,
quizás una fuerza mayor. Anuska no encontró fuerzas para contestarle, de
mantener su postura crítica y desconfiada. Miraba al Reverendo y tan sólo
podía centrarse en la fuerza que irradiaba la mirada de aquel hombre. Sintió
miedo y confusión.
Bajó la cabeza y abandonó la mansión. La noche había caído pero las
estrellas se habían resistido a realizar su aparición. Las nubes amenazaban
con una inminente lluvia pero aquello no era problema para la joven. Se
quedó recostada sobre la escalinata de la entrada. Estaba sobrecogida por
las palabras del Reverendo, como si le hubieran sido clavadas en el alma.
Intentó tranquilizarse acogiéndose a la inmensa soledad de aquel lugar.
Buscó en uno de sus bolsillos y sacó un paquete de tabaco. Encendió un
pitillo con ayuda de las manos para paliar el viento y dejó escapar con
satisfacción una amplia bocanada de humo, a la vez que se aterrorizaba con
lo que contempló en el cielo.
No le dio tiempo a gritar. Ni siquiera fue capaz de sentir algo. Dos
vehículos voladores sobrevolaban el rancho y un buen número de individuos
estaban deslizándose por cuerdas hacía ella. No había ruido de motores, no
había sonido alguno, pero eran claras las trompetas de batalla que sonaron
en la cabeza de Anuska.
Sus reflejos actuaron tal y cómo lo habían hecho anteriormente. Desenfundó
su Desert Eagle y comenzó a disparar al cielo, rompiendo el silencio de la
noche y la escasa paz que merodeaba por aquel lugar. Dos impactos hicieron
que un agente de SHIELD se precipitara al vacío. Cayó malherido por la
herida de bala pero le mato la colisión con el suelo, que le hizo estallar
por dentro. El factor sorpresa había desaparecido para los dos grupos de
operaciones, sustituido por un rápido fuego cruzado que servía de heraldo de
la contienda caótica.
Algunos agentes comenzaron a disparar contra la joven para dar cobertura a
sus compañeros. Anuska tuvo suerte y pudo tirarse al suelo rodando,
encontrando un buen lugar donde parapetarse. Los disparos alertaron tanto a
un bando como a otro. Muchos de los hombres del Reverendo salieron armas en
mano y comenzaron a disparar al cielo. No se olía miedo por ninguna parte.
Todos estaban dispuestos a quitar vidas con sus armas. Los hombres de SHIELD
se vieron expuestos a una posible muerte completamente inesperada. Una de
las naves montó un cañón de apoyo que comenzó a barrer la zona para dar
tiempo a sus agentes. Dentro de dichos vehículos no habían balas que
pudieran matar a nadie, pero el ambiente estaba igual o más caldeado que en
la zona de guerra.
- ¡Quiero cobertura aérea de inmediato! - gritó Travis mientras intentaba
coordinar las imágenes recibidas de las cámaras de sus agentes.
- "Disperse a sus hombres. Esperamos confirmación de Cuartel General" -
respondió alguien desde el otro lado justo en el mismo momento en el que
otra imagen se perdía al estrellarse la cámara.
- ¡Maldita Sea! - exclamó Travis mientras dejaba su puesto de control y
comenzaba a colocarse las protecciones de Kevlar. - ¡Stuntman dispón la nave
para un salto!
Uno de los operativos de comunicaciones agarró un fusil de asalto y se
colocó junto a Travis, que al contemplarlo se quedó un poco extrañado
- ¿Qué haces?
- Le cubriré, señor
El furioso agente le puso la mano en el hombro a aquel héroe inesperado y le
sonrió.
- De acuerdo, vamos allá
Fuera todo estaba desatado. Los hombres del Reverendo habían conseguido una
clara ventaja al tener lugares seguros desde donde disparar. No obstante los
agentes de SHIELD que habían llegado a posiciones seguras se estaban
encargando de acabar con aquellos que estaban disparando al cielo..
Anuska seguía oculta, disparando eventualmente con cuidado de no recibir una
bala perdida. Uno de los hombres se acercó a ella en un rápido movimiento.
Iba herido en el hombro.
- <¡Miguel! ¿Te han dado?1>
- <¡Ana! ¡Tenemos que poner a buen recaudo al Reverendo!>
Uno de sus hombres cayó al suelo cerca de ambos. Estaba totalmente
destrozado por la zona del estomago. Gimió de dolor y arrastró su mano hacía
el arma justo antes de morir.
- <Entra tu Miguel... el Reverendo está con el Castigador en la Mansión>
- <¿Estás bien Ana?>
Tres impactos destrozaron el cráneo de Miguel, que cayó sin vida al suelo.
Anuska disparó hacía la zona de donde procedían los disparos. Un
destacamento de agentes de SHIELD habían formado una zona segura y desde
allí estaban tomando ventaja con respecto a los hombres del Reverendo. Sabía
perfectamente que le iba a costar bastante salir viva de allí.
El interior de la mansión...
El reverendo desquiciado estaba de rodillas frente a Frank
- ¡Lucifer! ¡Belasco! ¡Corazón Oscuro! ¡Quien sea! - gritaba dando porrazos
en el pecho de Frank
Dos de sus hombres entraron en la casa mientras disparaban. Uno de ellos
estaba herido en el brazo pero seguía combatiendo. El segundo cerró la
puerta fuertemente mientras los impactos de bala se estrellaban en ella.
- ¡Reverendo! ¡Tenemos que salir de aquí deprisa!
- <Madre del amor hermoso> - dijo el segundo al ver el cuerpo de Frank
tirado en el suelo.
Ambos miraron al Reverendo, su rostro parecía descolocado. Varias lágrimas
corrían por su cara. Había perdido la poca cordura que le quedaba.
- ¡Reverendo acompáñenos. Le pondremos a salvo!
- ¡Dejadme hermanos! ¡Salid y acabad con aquellos que pretenden destrozar
nuestro sueño!
Los dos mercenarios se miraron entre si y se dispusieron sobre las ventanas
para devolver el fuego. El Reverendo se colocó de nuevo sobre Frank y le
impuso las manos en el pecho.
- ¡Te obligo a venir a mi, hijo de las tinieblas!
Comenzó a golpearle el pecho. Sus poderes no parecían hacer efecto sobre
Frank
- ¡Ven a mi Castigador!
En ese momento una protuberancia salida del pecho de Frank alcanzó el rostro
del Reverendo. Le cubrió por completo la cabeza y con un rápido movimiento
le rompió el cuello.
Uno de los mercenarios se giró y se quedó helado. Frank estaba de pie.
Totalmente cubierto por el simbionte. Su cuerpo estaba totalmente
regenerado, se marcaban su rostro entre aquella oscura segunda piel. El
mercenario comenzó a disparar hacía Frank, haciendo que el otro se percatara
del peligro y le apoyase en el fuego. Frank se movió sin esfuerzo alguno
esquivando las balas. Una nueva protuberancia, como si fuera un tentáculo,
salió del cuerpo de Frank para traspasar el pecho de uno de los mercenarios.
El otro se tiró por la ventana, gritando pavorosamente. Nada más ponerse en
pie fue alcanzado por una bala perdida y cayó al suelo, muerto.
Travis contempló la escena y se reunió con dos agentes que estaban
parapetados en una furgoneta. Uno de ellos tenía una herida en la pierna
pero se había apostado de forma que estaba acabando con todos los
mercenarios que intentaban acercarse a una ametralladora que había perdido a
su tirador.
- ¡Señor! - dijo uno de ellos al contemplarle
- Tenemos que infiltrarnos en aquella mansión. Seguramente nuestra presa
esté dentro. Comunica a Skull1 que nos de cobertura de fuego para acercarnos
a la pared este.
- Señor, no queda nadie del grupo 1
Travis pareció enfurecerse. A pesar de ser agentes de SHIELD habían caído en
una emboscada. Sabía que eso iba a causarle un gran papeleo si salía vivo de
allí.
- De acuerdo... tu vendrás conmigo. Vosotros dos cubridnos
- Si Señor
Travis espero a que sus compañeros abrieran fuego contra los mercenarios
apostados en las casas para salir corriendo junto con otro agente. Llegaron
hasta el pozo donde se ocultaron como pudieron. En ese momento tuvieron en
punto de mira a Anuska, que permanecía oculta, sin percatarse que le estaba
dando la espalda a Travis.
- Cúbreme - dijo Travis
El agente se lanzó corriendo contra la joven. Cuando esta se dio cuenta
recibió dos disparos en el estomago. Intentó devolver el disparo pero de una
fuerte patada en el brazo fue desarmada. Cayó al suelo bajo la mirada de
Travis, que parecía regocijarse en su trabajo. Varios disparos hicieron que
se tirase al suelo para cubrirse, permaneciendo atento a su compañero que
continuaba disparando ráfagas contra un grupo de mercenarios.
- ¡Vamos! - gritó Travis - ¡Se nos va a escapar el Castigador!
El joven se puso en pie y fue corriendo hacía Travis. En ese momento un
mortero dirigido hacía el lo destrozo en tres partes. Medio tronco cayó al
suelo y en medio de una último esfuerzo intentó arrastrarse, muriendo en el
acto.
Travis cerró los ojos unos segundos. Luego le quitó la Desert Eagle a la
joven Anuska y se dirigió a una de las ventanas de la mansión. Entró de un
salto y apuntó a todos los lados en busca de su presa. Contempló al
mercenario muerto y al Reverendo sin vida en el centro de la habitación. Se
acercó con sigilo y en máxima alerta y comprobó que Sammuel Smith estaba
muerto.
En ese momento vio una figura de pie, entre las sombras del quicio de una
puerta, contemplándole. Travis abrió fuego apuntando al pecho, pero no
ocurrió nada.
- ¿Qué buscas? - pregunto Frank
- ¿Castigador? - dijo Travis llevándose la mano a una pistola de plasma
En un momento de rapidez Travis desenfundó y disparó. Alcanzó a Frank que
cayó al suelo. El agente de Shield efectuó dos nuevos disparos con una
sonrisa en la cara pero esta vez vio como un escudo creado por el simbionte
aminoraba el daño de los disparos. Eso confundió a Travis que siguió
disparando.
Esta vez Frank reaccionó. De un acrobático salto se puso en pie y comenzó a
correr en zigzag esquivando los disparos de Travis. Llegó hasta el y de una
patada le hizo perder el equilibrio. Un nuevo tentáculo salió del antebrazo
de Frank que agarró la pistola de plasma y la lanzó a varios metros del
agente. Travis rodó hacía el lateral mientras sacaba un cuchillo de su bota.
Intentó clavarlo en el talón de Aquiles de Frank pero éste saltó esquivando
el movimiento. El tentáculo agarró la cabeza de Travis y lo levantó
estrellándolo contra la pared.
En el exterior disparos, gritos de dolor y ráfagas que iluminaban la noche
junto con el color rojo de la sangre. En el interior de la mansión Travis
estaba sin poder moverse, alzado del suelo, agarrado por un tentáculo que
salía del traje simbionte de Frank
- ¿Qué estas buscando? - volvió a preguntar Frank
- A ti Castigador... quiero tu cabeza - respondió con valentía Travis
Frank se quedó contemplando a su prisionero. El traje se abrió a la altura
del cuello y Travis pudo contemplar el rostro del castigador. Sus ojos
parecían llenos de fuego, y junto con las ojeras profería un aspecto
aterrador.
- ¿Todo SHIELD me está buscando?
- No hace falta movilizar a tantos para una basura como tu. Lo se todo de ti
Castigador...
- ¿Lo sabes todo de mi?
Travis intentaba liberarse pero no podía. Estaba fuertemente agarrado y
estaba empezando a agobiarse. En ese momento entró un agente de Shield por
la puerta. Frank no dudó. No tuvo ni que pensar. Un tentáculo salió de su
espalda que agarró del pie al agente y lo tiró al suelo, abriéndole la
cabeza por el impacto.
- ¡Bastardo! - gritó Travis intentando moverse
- ¿Lo sabes todo de mi?
- ¡Eres un jodido psicópata que cree que matando criminales volverá su puta
esposa y sus hijos... estas enfermo, das lástima!
Frank lo soltó. Travis cayó al suelo llevándose las manos a la garganta. Dos
agentes entraron de nuevo y abrieron fuego contra Frank. El simbionte se
encargó de que las balas no hirieran al castigador. Uno de los tentáculos
agarró el fusil del mercenario muerto y lo llevó hasta Frank. Éste lo empuño
y abrió fuego contra los dos agentes, que cayeron abatidos.
El exterior se quedó sin el ruido de balas. El lamento era ahora el único
sonido. Las heridas y el olor a muerte de aquel rancho.
Travis se incorporó agarrando de nuevo su cuchillo. Frank lo observaba
- Tardarán poco en enviar nuevos grupos de asalto Castigador... es tu fin
- ¿Qué buscas? - volvió a preguntar el Castigador
- ¡Maldito seas Castle! - gritó Travis arremetiendo contra él. Intentó
varios estoques con su cuchillo pero el Castigador los esquivaba todos.
- ¡Eres mío! ¡VOY A MATARTE!
Los movimientos de Travis no sirvieron para nada. Frank de un codazo lo tiró
al suelo, aunque el joven y agresivo agente volvió a alzarse.
- Ya te vale. con ese traje cutre de Spiderman...
Frank se quedó mirando. El traje comenzó a bajar hasta los pies de éste,
quedándose completamente sin protección. Allí estaba Frank, en ropa
interior, frente a Travis.
- Vamos chico... es tu oportunidad. Libra al mundo del Castigador.
Travis se lanzó furioso a por Frank. Lanzó su estocada para clavar el
cuchillo en el corazón pero Frank le bloqueo el ataque y con un rápido
movimiento le agarró el cuchillo y se lo clavó en el estomago. La expresión
de Travis cambió por completo. Sintió el cuchillo en su estomago, sentía
como Frank lo movía de un lado a otro.
- E...Eres mio.. Castig.... - gimió Travis
Frank agarró bien el cuchillo y comenzó a subir hasta la traquea de Travis.
El joven sintió como era abierto en canal, hasta que cayó al suelo
completamente muerto. No pudo soportar tanto dolor.
El traje volvió a cubrir a Frank. Salió al exterior y contempló todo lo
sucedido. Cadáveres de ambos bandos tirados por todo el rancho, olor a
pólvora, a sangre, a miedo. Frank no era capaz de asimilar el cambio que se
había producido en su interior, pero le gustaba. Anduvo por la zona hasta
que miró al cielo. Vio a lo lejos varias lucecitas. Eran nuevos grupos de
apoyo de Shield.
Era mejor salir de allí... Frank se metió en el maizal y se perdió de vista.
FIN
Epilogo: Bridge sentado en su despacho. No parece nada contento. Apenas
tiene luces encendidas. Tan solo el reflejo del ordenador ilumina su cara.
Acciona un botón y vuelve a escuchar la grabación de la transmisión de
Travis
"E...Eres mio.. Castig...."
A ciencia cierta no sabía cuantas veces lo había escuchado ya. Apagó el
comunicador y cogió el teléfono.
- Bridge al habla. "Cazador Cazado" pasa a prioridad máxima. A partir de
ahora Castle es considerado amenaza mundial. Avise a todo tipo de
autoridades.
FIN
1.- Hablan en Español
LETRAS Y BALAS
BODYCOUNT
Masacre total
- Mafiosos: 28 Mercenarios del Reverendo, El Reverendo, Anuska
- Inocentes: 10 Mujeres y Niños en el fuego cruzado de Mercenarios y SHIELD
- Superseres: 17 Agentes de Shield más Travis
Victimas en este episodio: 58
Número total: 130