TITANES #63
Presentación radiactiva
Guión: David Guirado
Era el gran día. El nuevo equipo de Titanes había hecho su presentación oficial ante el gran público. Robin, Wonder Girl, Destructora, Superboy, Stargirl, Kid Flash y Arsenal posaban orgullosos en un escenario, destacando por ser la noticia del día. Los Titanes cabalgaban de nuevo1.
Los periodistas que habían acudido a la rueda de prensa se disputaban el turno para lanzarles preguntas a los diferentes miembros del equipo.
- ¿Por qué unos Titanes? ¿Qué es lo que creéis que os hace especiales?- aventuró un periodista local.
Arsenal ni se lo pensó por un momento a la hora de contestar esa pregunta.
- Los héroes jóvenes han de prepararse adecuadamente para realizar su labor. Y el movimiento se demuestra andando. La mejor forma que tienen para probar sus habilidades es pulirlas. Yo fui un héroe adolescente y participe en la primera encarnación del equipo. Bien, ahora es mi turno de guiar a estos chicos por el buen camino. Si de paso salvamos al mundo mientras damos la oportunidad a estos chicos de encontrar su lugar en el, mejor que mejor- contestó Arsenal, arrebatando el micrófono de las manos de Maxwell Lord.
El público que había presenciado la rueda de prensa bullía de emoción, deseoso de saciar su curiosidad. Sin embargo, un invitado no deseado iba a empezar a complicar el asunto. Alex Sartorius, más conocido como el Doctor Fosforo, irrumpió entre la multitud camuflado por un inductor de imágenes que le otorgaba en esos momentos la apariencia de un hombre trajeado de mediana edad2.
- Yo tengo una pregunta muy importante- comentó el camuflado Doctor Fosforo- De hecho creo que es la cuestión que todo el mundo querrá saber en unos momentos.
Maxwell Lord recuperó el micrófono de manos de Roy Harper.
- No se corte caballero, si es tan importante, dígala- dijo el millonario.
- Me preguntaba qué es lo que harían estos Titanes si ahora mismo les atacase un villano- musitó el villano.
Al decir esa frase, los miembros del equipo se pusieron en tensión. De alguna forma, sabían que esa no era una pregunta retorica. Stargirl agarró su vara con fuerza en posición de combate, mientras que Wonder Girl empezó a levantar sus puños. La nueva Robin puso cara de asombro a la par que Arsenal colocaba una flecha en su arco. La tragedia se mascaba, pese a que Maxwell Lord no parecía darse cuenta de ello.
- Eso es sencillo. Estos jovenzuelos le darían una buena tunda, hablando en plata- respondió un Maxwell que pecó de confiado.
- Ahora van a tener la oportunidad de probarlo- masculló el Doctor Fosforo, mientras desactivaba su inductor de imágenes y mostraba su verdadero aspecto, el de un ser que era prácticamente un esqueleto envuelto en un espectro brillante de color verdoso.
La multitud empezó a chillar histéricamente al comprobar que un villano reconocido se encontraba entre ellos. Máxime uno con poderes radioactivos que fácilmente podría provocar estragos y desgracias varias. Aquello era el verdadero caos, puesto que había gente chillando y corriendo de un lado para otro.
- Traten de controlar la calma- proclamó Maxwell Lord a través del micrófono, al mismo tiempo que tenía la certeza de que aquella presentación había quedado completamente arruinada.
El Doctor Fosforo se controló, al menos al principio. Se sentía seriamente tentado de empezar a disparar a diestro y siniestro entre la multitud y llevarse por delante a varias personas, pero era muy consciente de las ordenes que había recibido, consistentes en centrar su ataque en los Titanes. Y por más que le desagradará tener que seguir los mandatos de nadie, la suma recibida había sido tan considerable que estaba dispuesto a tener una excepción.
- ¡¡Doctor Fosforo!! ¡¡Ese bastardo es mío!!- exclamó una Stargirl llena de ira, mientras le disparaba un rayo a través de su cetro de poder al villano, el cual repelió con una especie de campo de fuerza.
- Parece que la niña pija tiene también su parte de mala leche- comentó Destructora mientras desenvainaba su espada.
- ¡Ni se te ocurra acércate a él!- ordenó Arsenal a Destructora- Ese hombre es radioactividad pura y puede ser letal sino se tiene la protección adecuada. Lo más prudente sería que tú, Robin y Kid Flash os apartéis del campo de batalla o podríais ser contaminados.
Antes de que ninguno de los Titanes pudiese reaccionar el Doctor Fosforo emitió una descarga de radioactividad y la lanzó contra el escenario donde estaba postrado el equipo. Instintivamente, Superboy se lanzó a proteger a sus compañeros parando el rayo.
- Mis poderes han aumentado recientemente. Ahora soy capaz de hacer cosas que antes no podía, lo que eso se traduce en malas noticias para vosotros- amenazó el hombre radioactivo.
Maxwell Lord había bajado del escenario, con la intención de organizar a la gente que se había dejado llevar por el pánico, aunque ya poca gente quedaba cerca del escenario puesto que habían huido despavoridos del lugar.
Superboy se dio cuenta de que el disparo de Fosforo le había provocado una minúscula grieta en su armadura, aunque no dijo nada para no preocupar a ninguno de sus compañeros.
- Kid Flash, haz caso a Arsenal y márchate de aquí con Destructora y Robin. Nosotros podremos con este malnacido- ordenó Courtney.
- Pero...- balbuceó Bart.
- ¡Pero nada!- replicó Stargirl a la vez que disparaba de nuevo con su vara al criminal.
Kid Flash no lo dudó más y cogió en brazos a Destructora.
- ¡Suéltame, pies ligeros!- le gritó Rose- Quiero un pedazo de ese cabrón.
Bart Allen la ignoró y se marcho a supervelocidad en dirección a la base de los Titanes.
- Que sepas que hemos pegado nuestro último polvo sino me devuelves a la batalla- vociferó Destructora; amenaza a la que Kid Flash hizo caso omiso y siguió corriendo.
Mientras tanto el Doctor Fosforo no cesaba de emitir descargas radioactivas contra los Titanes. Superboy había logrado encajar alguna de ellas, protegiendo de esa forma a Arsenal y a Robín. Courtney había generado con su vara un pequeño campo de fuerza pero no aguantaría demasiado los ataques del villano. Cassie esquivaba como buenamente podía los ataques.
- ¡Maldita sea!- gritó Courtney, mientras se esforzaba para que su vara aguantase los disparos radioactivos.
- Ese payaso nos tiene acorralados-observó Stephanie Brown- Me encantaría poder darle de leches.
- Quizás sea muy arriesgado para ti que no tienes protección adecuada para soportar la radioactividad, pero yo debo intentarlo- comentó Superboy.
Superboy activo los jets de su traje de combate y se abalanzó contra el villano. Arsenal le disparó una flecha explosiva para intentar aturdirlo, pero fue un gesto en vano. Conner se puso enfrente del Doctor Fosforo y logra encajarle un fuerte puñetazo en la cara. Eso consiguió derribarle.
- ¿Qué te parece? ¡Eso puede funcionar!- señaló la nueva Robin.
Al mismo tiempo que Superboy derribó a Arsenal, Stargirl se acercó volando.
- ¡Superboy! ¡No le des ni un momento de respiro!- le vociferó la chica.
- Parece que Stargirl le tiene una manía especial a Fosforo- observó Wonder Girl- Nunca la había visto así de furiosa ni mucho menos.
Arsenal se limitó a asentir con la cabeza mientras colocaba otra flecha en su arco.
Superboy se acercó al caído Fosforo con la intención de seguir golpeándole. Pero cuando el chico se encontraba enfrente de él, el villano alargó sus brazos y cogió a Superboy de la cintura.
- Este día lo vas a recordar el resto de tu corta vida- le prometió Fosforo mientras sus manos empezaron a brillar muy intensamente.
Superboy se percató rápidamente de que había caído de pleno en alguna treta de su enemigo y se maldecía interiormente por ello. Sentía que el tacto de su enemigo estaba agrietando seriamente su armadura, perdiendo con ello toda posibilidad de emular sus antiguos poderes. Pero eso no era lo peor, sino que en cualquier momento la radioactividad afectaría a su cuerpo...
Wonder Girl se acercó con la esperanza de salvar a Conner, pero Fosforo soltó una de sus manos para poder disparar un rayo que alejase a la jovencita de él. Cassie logró esquivarlo, pero esos segundos de demora podrían haber sido letales para Superboy.
Afortunadamente, Stargirl disparó con su vara a Fosforo, lo que fue suficiente para despistar al villano y que este soltase a Superboy. En ese preciso momento, Kid Flash regresó de alejar a Destructora y agarró a Conner para impedir que Fosforo continuase usando sus poderes contra él.
Bart llevó a su compañero de equipo junto a Maxwell Lord, quien estaba situado a una distancia prudencial de la zona de combate.
- ¿Por qué has llevado de vuelta a la base a Rose en lugar de a Max, quien carece de cualquier habilidad de combate?- preguntó Conner a Bart, distrayéndose a si mismo del hecho de que su armadura había quedado prácticamente inservible.
- Debido a que Destructora es demasiada impulsiva. Max jamás se acercaría por su propia voluntad a Fosforo, mientras que ella estaría más que dispuesta a exponerse a él si eso significa poder golpearle- explicó Kid Flash, mientras que por su cabeza pasó la imagen de una Rose Wilson en miniatura siendo calcinada viva por un pequeño Doctor Fosforo.
Wonder Girl retrocedió y se acercó a Conner. La amazona fue consciente de los daños que había recibido la armadura de combate de Superboy. Se percató de que, en caso de que no tuviese reparación, probablemente ahora su chico tendría que dejar el equipo. Por lo menos durante el tiempo que durase el arreglo de su traje y un sentimiento de congoja le invadió, lamentando haberle hablado tan mal3.
- Conner, tu traje... Lo siento mucho- musitó Cassie.
Superboy agachó la cabeza.
- No quiero tu compasión- fue lo único que acertó a decir, mientras que rechazó la mano que le ofreció Cassie.
Stargirl atacaba una y otra vez energéticamente a su enemigo con su vara de poder. Hasta el villano se percató del resentimiento que ocultaban los ataques de Courtney.
- Niña, conozco el poder de este artilugio. No es la primera vez que me veo las caras con alguien que porta el cetro de Starman- dijo Fosforo.
- ¡¡Por tu culpa Ted Knight está muerto!! El padre de un amigo mío falleció debido a tus actos y eso es algo que me vas a pagar, tengas o no tus poderes aumentados- amenazó Stargirl, disipando a todo el mundo la causa de su ira hacia el criminal4.
Kid Flash se acercó a toda mecha hacia Robin, con la intención de llevarla a la base del grupo junto a Rose Wilson.
- Me siento un poco inútil en este enfrentamiento- comentó Stephanie mientras Bart la cogía en brazos.
- Ya tendremos mejor ocasión de lucirnos en nuestra siguiente misión- contestó Kid Flash, mientras se fijaba en que el rostro de la nueva Robin era más atractivo de lo que se había dado cuenta hasta ese momento.
- Esperad- les indicó Arsenal- Quizás no haga falta ni que os marchéis de aquí, porque esto está a punto de acabar.
Stargirl y Fosforo se encontraban lanzándose descargas mutuamente. Sartorius, de alguna manera, había aprendido a general un pequeño escudo personal a través de la radioactividad, lo que le resguardaba de los ataques de Courtney. A su vez, la chica se esforzaba por esquivar todo lo que le lanzaba el villano. Era una lucha muy igualada, aunque a favor de la chica jugaba todo el resentimiento que guardaba dentro hacia su enemigo.
- No está nada mal, chica. Pero en esto llevas las de perder- le provocó Fosforo.
La única respuesta que obtuvo fue un disparo a plena potencia de la vara de Stargirl, lanzado con tal potencia que fue capaz de atravesar su campo de fuerza y dejó medio aturdido a Sartorius.
- Este es tu fin, escoria- sentenció Courtney, apuntando a la cabeza de Fosforo.
Arsenal tensó a la vez su arco, apuntando al villano con una flecha que contenía un taser eléctrico, pero Courtney se dio cuenta de ello y con un gesto indicó a Roy Harper Pese a que una parte de su ser le gritaba que vengase la muerte de Ted Knight, Stargirl jamás recurriría a algo tan burdo como es el asesinato. En lugar de disparar su arma, la chica le atizó con una fuerza brutal un fuerte golpe con su vara, con tal ímpetu que le provocó la inconsciencia.
- No está nada mal. Mejor de lo que me esperaba- susurró Arsenal, mientras guardaba la flecha que no había empleado en su carcaj.
- ¡¡Hurra!! ¡¡Hemos ganado!!- exclamó una eufórica Stephanie Brown, aún sin importarle que ella prácticamente no había intervenido en la lucha.
Maxwell Lord se apresuro a llamar por su móvil a un equipo de contención procedente de los laboratorios Cadmus, donde Fosforo podría ser detenido e, incluso, podrían investigar la causa de su repentino aumento de poderes.
Superboy se alejó de la zona cabizbajo, ignorando como Wonder Girl le pedía que no se marchara de allí y que le escuchase. El día en que la nueva formación de los Titanes iban a ser presentados al público había sido un fracaso absoluto. No sólo la presentación había sido interrumpida por un peligroso criminal, sino que posiblemente ahora Superboy no podría seguir en el equipo hasta que no reparasen su armadura. Y eso era un arreglo que sabía que llevaría su tiempo.
Un rato más tarde, Conner estaba sentado en su cuarto, quitándose su armadura de batalla. El resto de los miembros de los Titanes estaba todavía en el lugar de la pelea contra Fosforo, asegurándose de que los hombres de Cadmus retenían sin problemas al villano.
Realmente el traje de combate de Superboy había sufrido demasiados desperfectos durante la batalla y le urgía acudir cuando antes mejor que le reparasen su traje. Ahora que había perdido sus poderes Kryptonianos era el único medio que tenia para poder imitarlos lo más eficazmente posible. Sin ese traje, ahora sentía que era poco menos que inútil.
- ¿Se puede?- preguntó una voz femenina, mientras tocaba la puerta de su habitación.
- Adelante- contestó Superboy mientras acababa de desprenderse de su armadura.
Sin más dilación, Destructora entró a la habitación de Conner.
- Oh- musitó en voz baja Superboy, aunque lo suficientemente fuerte para que Rose Wilson lograse escucharle.
- ¿Ocurre algo?- preguntó la chica.
- Nada, no te lo tomes a mal. Simplemente esperaba a otra persona- reconoció Conner.
- ¿Quizás a Cassie?- le interrogó la chica- Bueno, yo soy la única persona a la que Kid Flash apartó de la batalla, así que aquí me tienes.
- Últimamente Cassie... Ella y yo no estamos... bien- admitió Superboy en voz alta. Pensaba que quizás fuese ella, queriendo arreglar las cosas entre nosotros.
- Esa rubia estirada se lo pierde- replicó Destructora mientras se acercaba a Conner, invadiendo totalmente su espacio personal.
Conner Kent se percató de ello y quiso remediar la situación.
- Rose, te estás acercando demasiado- le advirtió a la chica.
- ¿Eso es un problema?- preguntó retóricamente, mientas acercaba sus labios a los de Superboy.
Destructora le plantó un beso al chico de acero que le dejó sin aliento. Inmediatamente Conner le rechazó y apartó su cara de la de Rose Wilson.
- Esto está mal. Aunque no estemos en nuestro mejor momento, quiero a Cassie y no la traicionare así como así- proclamó Conner.
Rose Wilson esbozó una sonrisa.
- Ahora él que se pierde algo eres tú, Supernene. Yo no soy de nadie y hago lo que quiero, con quien quiero y donde y cuando quiero. Deberías probarlo, te sentaría bien en vez de ser el perrito faldero de nadie- anunció Destructora antes de salir de la habitación.
Un rato más tarde, una vez Fosforó fue puesto bajo custodia, Arsenal retornó a un pequeño escondrijo que tenía en una casita a las afueras de New York, en un conocido barrio residencial. El día había sido muy largo, pero el arquero aún tenía mucho por hacer.
Bajo con sumo cuidado por unas escaleras que conducían a una pequeña cárcel que albergaba un muy particular prisionero, sin el cual todos sus planes hubiesen sido inútiles. Al fin y al cabo, sino se hubiese encargado de capturarlo, jamás se hubiese podido ocupar de refundar los Titanes.
Arsenal podía sentir el odio en el rostro de su prisionero. Incluso a él le asombraba la tensión y la intensidad que destilaba la mirada del pelirrojo que tenia encerrado. Si no fuese tan importante el mantenerlo con vida, sin dudar le degollaría ahí mismo para así evitar esa mirada.
- Todo está saliendo según mis planes´-reconoció Arsenal delante de su prisionero, el cual, como siempre, forcejaba sus cadenas con fuerza tratando en vano de liberarse.
- No luches más. Es inútil que te liberes de esas cadenas- dijo el arquero al contemplar como su enemigo peleaba insistentemente por liberarse- Vas a quedarte ahí por mucho tiempo, Roy.
?Roy? fue el nombre con el que Arsenal se dirigió a su prisionero, puesto que no era otro que Roy Harper a quien tenía preso en contra de su voluntad. Roy se encontraba en el interior de una celda insonorizada, bien sujeto con unas cadenas, luchando incesantemente por escapar.
- Supongo que te dará igual lo que te diga. Eres un luchador y es tu naturaleza pelear- comentó el guardián de Roy, mientras sacaba una tarjeta metálica de su bolsillo y apretaba un botón de la misma.
Al accionar ese comando, la figura de Arsenal empezó a distorsionarse, empezando a cambiar de aspecto, eliminándose su disfraz de Roy Harper y mostrando su verdadera apariencia. Llevaba mucho tiempo fingiendo ser quien no era y deseaba sentirse él mismo: Deathstroke, el Exterminador5.
- Impresionante, ¿verdad?- se jactó el mercenario- Nadie salvo tú y yo, sabemos la verdad. Y es que los Titanes tienen un lobo con piel de cordero en su grupo. Y cuando se den cuenta de eso, ya será demasiado tarde para todos ellos.
Roy Harper se sentía impotente ante las palabras de Deathstroke. Pasase lo que pasase, se prometió a si mismo que el villano pagaría por todo aquello que estaba haciendo. Concentró de nuevo todas sus fuerzas en tirar de sus cadenas, para intentar liberarse una vez más. No podía dejar que aquel maniaco permaneciese por más tiempo haciéndose pasar por él y sobretodo, estar por más tiempo haciéndole crear a Lian que ese sádico era su padre.
La risa de Deathstroke resonó por la sala al contemplar el mercenario los intentos en vano de su prisionero por escapar.
1.- Ver el número anterior.
2.- Ídem de ídem. Se debe de haber leído el número anterior para leer la epopeya contada en este.
3.- Si leéis el número 61, podéis comprobarlo.
4.- Si no sabes a lo que me refiero, es que has cometido el error de no leer los imprescindibles tomos de Starman editados por Planeta de Agostini. En concreto, la muerte de Ted Knight tiene lugar en el sexto.
5.- En el número 59 de la serie, del jovial Tomás Sendarrubias, podéis comprobar el momento de la sustitución. Aunque hay que decir que en esos momentos la identidad del secuestrador de Roy no se había hecho pública. Si releéis ahora el Nº 2 de Spoiler, el Nº 5 de DC Premiere y lo números anteriores de la serie, estoy seguro de que los mirareis con otros ojos.
LA EMBAJADA DE LOS TITANES
Tomás Sendarrubias García: "Leído. Pronto empezamos con los problemas internos, muy bien llevados, la verdad. Inesperadas las reacciones de Courtney, David, bien planteadas."
Y más que van a haber en un futuro cercano jejejejeje EL equipo va a ser de todo menos una balsa de aceite. Espero que te haya gustado la resolución (temporal, eso sí) a lo de Destructora.
MarvelTopia: "Choque de egos y personalidades! Impulso en pelotas! Te falta una pelea en el barro y número completo. ¿A que si, David Guirado Lozano"?
Como acabo de comentar a Tomás, este va a ser un grupo, debido a algunas personalidades fuertes incluidas en el mismo, un tanto caótico. Lo de la pelea en el barro no es mala idea, quizás habría que plantearse algún enfrentamiento contra Clayface... :)
Y hasta aquí hemos llegado. Lo que siempre os digo podéis enviar vuestras dudas, comentarios, impresiones, cheques en blanco al portador a davidguiradoalzira@hotmail.com o bien podéis visitar el grupo de facebook de Marveltopia.