TITANES #50
Crisis de Familia VII
I love you, I'll kill you
Guión: Tomás Sendarrubias
Portada: Javier Cuevas
Cerca de la Estación Victoria, Londres.
-... Oh, no, don´t be shy, You don´t have to go blind, Hold me, thrill me, kiss me, kill me...
Janet Drake pone los ojos en blanco tumbada en la cama de su habitación mientras escucha a su marido cantar desde la ducha. Sube el volumen de la televisión, donde uno de los grupos de baile de Britain Got Talent hace sus evoluciones. Jack sale del cuarto de baño silbando, y se sienta en su cama, mirando de reojo la televisión.
-¿Cómo vamos de tiempo?-pregunta, y Janet mira el reloj de su teléfono móvil.
-Bien, queda más de una hora para que empiece. Aunque me gustaría ir con tiempo, después de lo que nos ha costado conseguir entradas para Wicked, sólo faltaría que llegásemos tarde...
Jack se dispone a contestar a su mujer cuando de pronto, siente un escalofrío. Ha pasado años en la policía, y ha desarrollado un sexto sentido para el peligro. Lo que no sabe es por qué ha saltado esa alarma interior.
-¡Cuidado!-dice de pronto una voz que no conoce, y como si creciera desde un tamaño ínfimo, un hombre vestido de azul y rojo aparece en le centro de la habitación, apartando a Jack Drake de la cama unos instantes antes de que esta, con un ruido sordo, se convierta en un amasijo de astillas.
-¿Qué...?-comienza a decir Janet, y en ese momento, un marciano blanco se revela en la habitación, con las garras crujiendo y mirando con los ojos infectados de odio al matrimonio y a su repentino defensor.
-J´onn, sabemos que eres tú...-gruñe Átomo-. Y no te molestes, llevo bloqueadores psiónicos.
-¿Qué está pasando aquí?-exclama Jack, poniéndose ante Janet, pero Ray le hace un gesto para que se mantenga al margen.
El marciano blanco chasquea los dientes, y la lengua corta el aire, y finalmente, hace amago de lanzarse sobre Ray, pero este le apunta con una vara, y el aire de la habitación estalla, arrojando al marciano contra una de las paredes, que de hecho, cede ante el impacto, lanzando cascotes y trozos de cristal sobre las calles de Londres.
-Gracias, Barda-masculla Ray, volviéndose luego hacia el matrimonio Drake-. Quédense aquí, nosotros nos hacemos cargo de todo.
Y sin decir más, Átomo se encoge, desapareciendo de la vista de unos aterrorizados Janet y Jack Drake.
Batcueva, unas horas antes.
"¿Quién se beneficia?"
Es lo que Robin había preguntado, y Bruce, se había dado cuenta en ese instante de que lo había enfocado todo mal desde el principio. Y se dio cuenta de que la cuestión era peor de lo que se imaginaba. Como si su propia mente le esquivase, como si al tratar de concentrarse, surgieran muros que desconocía.
En el momento en que Robin se dirigió a la zona de la casa habilitada como gimnasio para entrenar y llamar después a sus padres, Bruce conectó un programa muy determinado en los ordenadores de la Batcueva, que pronto comenzaron a parpadear con una serie de colores predeterminados, secuencias y sonidos que Batman había programado de antemano para generar el ambiente apropiado para un proceso de autohipnosis. Poco a poco, fue calmando su respiración, y los sistemas registraron un descenso en sus pulsaciones y su tensión arterial. Bruce sintió como poco a poco caía, como si se alejase de sí mismo, y se fue hundiendo en su propia mente, como si fuera un inmenso lago de aguas oscuras. "¿Quién se beneficia?".
Estuvo a punto de fruncir el ceño cuando percibió que, efectivamente, sus líneas de pensamiento habían sido modificadas. Como si se hubieran establecido cortafuegos para evitar determinadas conclusiones. Había sido un trabajo quirúrgico, sutil pero efectivo. Reduciendo aún más su ritmo de respiración, se fue concentrando en cada una de esas murallas, esforzándose no por derribarlas sino por bordearlas, rodearlas y recurrir a caminos alternativos. "¿Quién se beneficia?". Marcianos Blancos. Superfuertes, metamorfos, telépatas, invisibles... Eran los poderes que había mostrado el asesino de Libby y de Pat, el que había atacado a Rose Wilson y a Iris Allen, y que probablemente, había estado a punto de devastar Smallville.
Y sin embargo, no había matado a los héroes. La propia Rose sólo había sido atacada como medio para llegar a Lian, Cerdian y Delfín. Superman hubiera sido inmune a la explosión nuclear. Pero sobre todo, Impulso. Bart Allen había estado indefenso, y sin embargo, apenas tenía unas pocas heridas. Batman se había enfrentado a los Marcianos Blancos, y si alguno de ellos hubiera atacado a Impulso, este estaría muerto. Sin duda. El hecho de que Bart siguiera con vida indicaba algo muy claro: el atacante no quería matar héroes. ¿Por qué?
Había furia, pero no se dirigía directamente a los héroes. No era un villano buscando venganza. No era el ataque de un loco, como el Joker, ni de un genio del mal, como Luthor. El asesino estaba furioso con algo, y proyectaba su ira en sus víctimas. No había componente sexual, ni posesivo. Sólo destrucción. ¿Qué podía causar ese comportamiento? La envidia.
La envidia. Alguien que lo hubiera perdido todo. A su familia. Alguien que considerase que había sacrificado a su familia para ser lo que ahora era. ¿Un héroe? Un héroe, uno de ellos. Alguien que estuviera solo, que no tuviese otra identidad que no fuera la de héroe. Alguien que considerase que lo había sacrificado todo en su lucha, y que viera con envidia como otros héroes no realizaban el mismo sacrificio. Por un momento, se vio a sí mismo reflejado en esas ideas. Ser Batman suponía un precio muy alto, un precio del que era consciente cada vez que veía a Clark con Lois, o a Garth sujetando a Cerdian. Era alguien que había sufrido y seguía sufriendo tanto como él mismo.
¿Pero por qué ahora? ¿Quién había salido beneficiado? Alguien que hubiese consagrado su vida a la lucha. ¿Cuánto hacía que no habían estado todos los héroes tan activos como estaban en ese momento? Mucho, mucho tiempo. Incluso se estaba hablando de volver a fundar la JLA, que llevaba sin funcionar desde la lucha contra Imperiex y Brainiac. La JLA.
No puede ser.
Batman abrió los ojos, y los monitores registraron un súbito aumento en su ritmo cardiaco. Recordó a J´onn, tratando por todos los medios de volver a activar la JLA. A J´onn, que había perdido a su familia. A J´onn, que lo había sacrificado todo, y que seguía haciéndolo para ser, cómo había sido siempre, el corazón de la JLA. A J´onn, cuyos poderes, al igual que los de los Marcianos Blancos, eran la telepatía, la superfuerza, la capacidad de vuelo, la invisibilidad...
Sin más, Batman se alzó del asiento, anuló los sistemas hipnóticos y llamó a la Atalaya. J´onn estaba allí, así que le envió a buscar a Booster y Beetle. Necesitaba hablar con Ray Palmer, así que Flash y Wildcat le pusieron en contacto con la Universidad de Ivy Town.
-Ray, te necesitamos. Necesitamos a Átomo-había dicho Bruce-. Creo que algo va mal con J´onn.
-¿Con J´onn? ¿Qué ocurre?
-No puedo contártelo ahora mismo, pero necesito que alguien lo vigile muy de cerca, y sólo puedo confiar en ti para ello. Ahora se encuentra fuera de la Atalaya. He activado tu tarjeta, y programado los teleportadores con tu signatura. Necesito que vayas a la Atalaya procurando pasar desapercibido, que nadie sepa que estás allí. Busca unos inhibidores telepáticos... y ármate.
-¿Armas?
-Sí. Hay un duplicado del bastón de Barda en la zona de exposición. Está cargado. Y cuando tengas los inhibidores y el bastón, necesito que de reduzcas tanto como puedas y te pegues a J´onn. Necesito que le sigas donde quiera que vaya, y que me informes si ves algo fuera de lo normal.
-Batman, ¿qué está pasando?
-Espero que nada, Ray. Espero que nada.
Londres.
El Marciano Blanco atraviesa el capó de uno de los coches que están estacionados en la calle, estrellándose contra el asfalto, que salta en pedazos. En dos segundos, se alza de nuevo, gruñendo mientras coge uno de los coches y lo arroja hacia el aire, hacia la habitación desde la que ha caído, pero Ray consigue disparar de nuevo el bastón de Barda a tiempo de reducir el proyectil a cenizas.
-¡J´onn! ¡Sabemos que eres tú! ¡Podemos ayudarte!
-¿Ayudarme?-gruñe la criatura, y su color va cambiando del blanco al verde, pero mantiene una forma monstruosa y agresiva-. Yo os estoy ayudando a vosotros...
-Estupendo-sisea Átomo, reduciéndose al tamaño de una mota de polvo justo a tiempo de esquivar las garras del marciano, que vuela de nuevo en dirección a la habitación de los Drake, aunque una esfera de color verde se lo impide, rodeándole. Átomo vuelve a crecer, y mira a su alrededor, esperando ver a Kyle Rayner, pero se sorprende cuando se da cuenta de que tiene delante a una especie de perro con un pijama de Green Lantern.
-¿Y tú quien demonios eres?-masculla Átomo.
-G´Nort-dice el recién llegado, pero no sonríe ni mira a Átomo. Es obvio que está utilizando toda su concentración en mantener encerrado al Marciano, que da tremendos golpes a la esfera. Y de todos modos, tampoco hay tiempo para muchas más presentaciones, pues Átomo se da cuenta de que el resto de los miembros de la JSA y los Titanes ya han llegado... aunque un segundo demasiado tarde para impedir que el Marciano rompa la burbuja de energía, que estalla en pedazos a su alrededor, lanzando al suelo a G´Nort, que gimotea aturdido.
-¡Troia! ¡Adam!-ordena Batman-. ¡Que no entre en el hotel!
Como dos rayos caídos del cielo, Donna y Adam caen sobre el Marciano, y los tres se estrellan en el suelo, lanzando coches y pedazos de asfalto por los aires, pero se quita de en medio a la Amazona con un fuerte golpe que la envía contra las columnas de un edificio porticado. Apareciendo desde el agujero de asfalto, el marciano arroja a Black Adam contra otro de los edificios, que se tambalea.
-No-masculla Batman, pero no pueden hacer nada para evitar que se derrumbe.
-Oráculo, toma el control de la situación-ordena Mister Terrific-. T-Esferas 1 a 7, transmitid datos a Oráculo.
-De acuerdo-dice Bárbara, y su voz suena en los comunicadores de todos-. Flash, Jesse, necesito que busquéis supervivientes. Argent, Centinela, G´Nort, quiero que os encarguéis de que no haya heridos... ¿Robin?
-Estoy con los Drake-dice Tim, respondiendo desde el interior del hotel y tratando de que sus padres no le reconocieran-. Voy a organizar la evacuación, Hawkgirl y Wonder Girl están conmigo.
-¿Así es como me lo agradecéis?-aúlla el Marciano, y por fin, toma la forma de J´onn, aunque sus ojos, generalmente amables, arden con un fuego siniestro, destructor-. ¡Os estoy haciendo mejores héroes!
-Hijo de puta-estalla Jesse Quick, y desobedeciendo las órdenes de Oráculo, embiste contra J´onn, que sin embargo, la detiene en el aire, sujetándola por el cuello.
-¡Essej, iuqa!-ordena Zatanna, y Jesse desaparece de las manos de J´onn antes de que este pueda hacerle daño.
-¡Si os oponéis a mí, no sois los héroes que el mundo necesita!-grita J´onn, y el grito retumba en sus cabezas, causándoles un fuerte dolor mientras el Detective Marciano vuela, y se lanza de lleno contra otro edificio, ignorando los rostros asustados que le miran desde las ventanas-. Derribaré esta ciudad sobre vosotros si es necesario para que os deis cuenta...
-¡No!-grita Centinela, viendo como J´onn impacta de lleno contra un edificio, atravesando la barrera que había puesto Argent. De inmediato, una serie de zarcillos de color verde resplandeciente aparecen del suelo, creciendo alrededor del edificio a toda velocidad, evitando que se derrumbe sobre sí mismo.
-Si seguimos atacando así, nos va a machacar-dice Nightwing, situado junto a Batman.
-¡Thunderbolt, ataca!-ordena Jakeem, y el genio purpúreo atraviesa de lado a lado a J´onn, que acaba de aparecer al otro lado del edificio, haciéndole gritar de dolor. Sin embargo, pronto la herida se cierra, y sin más, vuela a toda velocidad, destruyendo las columnas del edificio porticado contra el que había arrojado a Troia. Con sus puntos de apoyo destrozados, el edificio comienza a inclinarse hacia delante, amenazando con aplastar a Jakeem, pero un campo de luz dorada protege al muchacho, obra de Destino.
-No estamos a su altura-responde Batman. A su alrededor, parece como si Londres se viniera abajo, mientras J´onn hace frente a una recuperada aunque aturdida Troia, a Cyborg, a Booster Gold, a Superboy y a Zatanna, mientras Argent, Tempest, Centinela y G´Nort, que aún sangra por la nariz, tratan de que la ciudad no se colapse sobre sí misma. Flash busca supervivientes entre los escombros, y el Doctor Midnight trata de ponerlos a salvo, con la ayuda de Bushido, Stargirl, Blue Beetle y Changeling.
-Creo que tengo un plan-dice Nightwing-, pero necesito aquí a Destino, a Tempest y a Jakeem...
Smallville, Kansas.
Clark está sentado en el porche, leyendo, cuando escucha los pasos de su madre que bajan por las escaleras de la casa. Lois se ha quedado dormida en el salón, con el rostro cubierto por una vieja revista de crucigramas. No le hace falta ni mirar al rostro a su madre para saber que algo va mal, puede escucharlo en su acelerado corazón.
-Clark, está pasando algo en Londres-dice Martha Kent, y con las cejas enarcadas, Clark entra en la casa y enciende la televisión.
-¿Qué pasa, cariño...?-comienza a preguntar Lois, pero guarda silencio al ver lo que la televisión muestra, una imagen del infierno en la Tierra.
-...los destrozos causados por el enfrentamiento entre metahumanos en las calles de Londres, y que estamos viendo en directo. No tenemos aún datos de lo que está ocurriendo pero...
-Ese... ¿ese es J´onn?-masculla Lois, que ve al Detective Marciano aparecer y desaparecer de la pantalla, derribando un edificio-. Clark... creo que...
-No-responde él-. Dijeron que sin mí.
-No lo entiendo, Clark, ¿qué pasa si...?
-Lois, se están enfrentando a J´onn. Algo muy extraño ha ocurrido, pero no me han avisado. No han pedido mi ayuda, aunque seguro que saben que la necesitan. Conozco a Bruce... los dos conocemos a Bruce, y eso sólo puede significar una cosa...
-Que te necesitan por si todo lo demás falla-responde Lois, y Clark asiente-. Que Dios nos ayude...
Londres.
Una intensa oscuridad se extiende por las calles, como una ola ahogando todas las luces, al tiempo que dos proyectiles explosivos lanzados por Arsenal y el grito sónico de Canario Negro impactan de lleno en J´onn, que explota como si fuera un montón de gelatina, aunque se reforma inmediatamente. Las sombras se alzan y envuelven a J´onn, que siente como un frío gélido recorre todo su cuerpo.
-Tú eres Obsidian-dice, pero las sombras no responden-. La oscuridad también tiene mente.
Todd comienza a revivir. A recordar. Todos y cada uno de los momentos en los que sufrió la violencia de manos de su padre adoptivo. Todos y cada uno de los momentos de su vida de los que se avergonzaba. El momento en el que le había matado. El momento en el que había querido matar a todo el mundo. El momento en el que estuvo a punto de destruir Milwaukee y arrojarlo a un reino de sombras. Todd Rice gritó, y la oscuridad se apartó.
-Ya es suficiente.
J´onn se gira, y una lengua de color sangre bordea sus afilados dientes cuando se encuentra frente a Centinela. Tras él, han comenzado los incendios en los edificios, pero los bomberos no pueden llegar para apagarlos, pues las calles se encuentran cortadas. Al lado de Alan, y sostenido por una plataforma verde, Wildcat.
-Todo esto que estás haciendo...-masculla Alan-. Todo lo que nos has hecho... Has atacado a nuestras familias... a nuestros niños... Todo eso termina ahora, J´onn.
El anillo de Alan brilla con una luz cegadora, mientras la Llama Verde crea una armadura alrededor de Alan, la figura de un mítico caballero medieval armado con una enorme espada de aspecto afilado. Y una armadura semejante cubre a Wildcat, aunque en lugar de espada, cuatro afiladas garras brotan de los nudillos de sus guanteletes. Bajo ellos, Obsidian comienza a tomar forma física. J´onn chasquea los dientes, y los dos miembros más antiguos de la JSA se arrojan sobre él.
-Ese no es J´onn-dice Destino, situada en lo alto de un edificio que aún se encuentra en pie, flanqueada por Tempest, Batman, Nightwing, Jakeem Thunder y Mister Terrific-. Sigue ahí dentro, pero no es él el que domina. Es como... como si una parte de él se hubiera independizado y tomado el control del todo. Como si fuera su... lado oscuro.
-¿Y eso que significa?-masculla Tempest-. ¿Qué deberemos matar a un amigo para detenerle? ¿Qué no es realmente culpable de todo lo que ha pasado?
-Ya lo juzgaremos cuando llegue el momento-dice Batman-. Ahora, tenemos que detenerle.
-Batman...-le interrumpe Garth-. No sé si te has dado cuenta, pero nos está aplastando. Sólo tenemos una oportunidad, y es matarle.
-No tiene por qué morir nadie.
-Ya ha muerto gente-dice Jakeem, mirando a su devastado entorno. Sobre ellos, en el cielo, mientras en el suelo tratan de liberar a los atrapados y sacar a los muertos de los escombros, la espada de Centinela atraviesa a J´onn, pero su forma plástica se readapta instantáneamente.
-Necesito que refuerces a J´onn-dice Nightwing, mirando a Destino-. A la parte de él que no es un asesino.
Lytta asiente, y sin preguntar más, se aparta del resto, y alzándose a varios palmos del suelo, con la capa dorada ondeando a su alrededor, sus manos comienzan a moverse, suaves, dejando tras de sí un rastro de luces.
Con la fuerza del Corazón Estelar, Wildcat y Centinela arrojan a J´onn contra el suelo, y entonces, este desaparece, recurriendo a su invisibilidad. Centinela y Wildcat le buscan, tensos, preparados para atacar de nuevo, y en ese momento escuchan un grito, cuando uno de los heridos es arrojado contra ellos a modo de proyectil, a toda velocidad.
-No-dice Batman, mientras Centinela crea una plataforma acolchada que detiene al hombre, aunque es demasiado tarde. Al ser arrojado se le ha roto el cuello. Una nueva figura humana lanza un quejido mientras vuela hacia Centinela y Wildcat-. No podemos esperar más... ¡Ahora!
Los ojos de Tempest resplandecen, purpúreos, mientras recita un hechizo atlante que revela lo escondido, de modo que pronto la figura de J´onn aparece en el suelo, perfilada por una luz púrpura; y en ese momento, Destino le señala, y la luz dorada brota de ella a raudales, alcanzando a J´onn.
-¡No!-grita este, y su forma plástica oscila, mientras un nuevo cuerpo se forma desde su pecho, un cuerpo con el rostro que todos conocen, el del amable J´onn, la persona que ha sido durante tanto tiempo el corazón de la Liga-. ¡No me permitáis seguir! ¡No me dejéis seguir haciendo esto!
-Oráculo, dame línea con todos-ordena Batman, y al instante, está comunicado con todos los héroes-. Necesito que todos ataquéis a J´onn ahora. Que le confundáis. Que le abruméis, que no pueda pensar claramente. Ártemis, dirige el ataque. Black Adam, en retaguardia.
-¿Qué?-exclama Adam-. No permaneceré en un segundo plano...
-Adam, es el momento de obedecer-dice Alan, serio, y el monarca de Kahndaq, aunque renuente, asiente.
-Y Zatanna, necesito que refuerces el ataque de Jakeem. Atenta.
-Claro-responde ella, y al instante, Ártemis alza una de sus espadas, dando la señal de ataque con un antiguo grito de combate egipcio.
Como una marea, los héroes se lanzan sobre J´onn, que aún continúa enfrentándose a sí mismo, cambiando de forma una y otra vez.
-¡Thunderbolt, que quede atado a una forma!-ordena Jakeem, y de inmediato, el genio púrpura vuela hacia J´onn, pero en lugar de impactar contra él, crea una especie de rejilla de energía que se adhiere a la piel de J´onn y que él mismo mantiene, limitando sus cambios de forma, aunque se revuelve con tanta fuerza que Jakeem siente que el propio genio de la Quinta Dimensión está a punto de ceder.
-¡Nu olos opreuc, aun alos amrof! ¡ Nu olos opreuc, aun alos amrof-exlama Zatanna, dando con su hechizo solidez al de Jakeem Thunder.
Y sin embargo, J´onn continúa ganando.
Bushido sale volando y sólo la oportuna intervención de Flash evita que se rompa la espalda al chocar contra una farola. Artemis tiene que desarmar y apartar del combate a la Cazadora cuando esta es dominada telepáticamente por el marciano.
-Tempest... ahora...-dice Nightwing, y el atlante asiente. Sus ojos vuelven a brillar, pero esta vez, el hechizo que convoca es mucho más sencillo, una simple ilusión...
Aparece ante los ojos de J´onn, rodeado de sus aliados, magullados, desmayados, quizá alguno de ellos lisiado para siempre o muerto. Una chica, de apenas dieciséis años, vestida con una blusa blanca y una falda multicolor, con el cabello crespo y negro, apartado del rostro por una diadema. Y mira a J´onn con auténtico horror.
-¿Gitana?-masculla J´onn, al ver a la joven-. ¿Cindy?
-Bien-sisea Mister Terrific. Podría haber proyectado un holograma con la forma de la muchacha utilizando las T-Esferas, pero la magia le daba un viso de realismo que él nunca hubiera podido conseguir. Conocía la historia de J´onn, y sabía que mantenía una relación muy especial con Gitana, la joven que una vez fuera miembro de la Liga de la Justicia, hasta que las manipulaciones de Glorious Godfrey y el profesor Ivo habían acabado con aquella encarnación de la JLA, con las muertes de dos de sus miembros, Vibe y Steel. Pero desde entonces, había sido como una hija para J´onn-. Esferas 1 a 7... atacad.
Las esferas metálicas vuelan alrededor de J´onn, y le golpean con potentes descargas eléctricas, mientras Jakeem y Zatanna continuan concentrados en evitar que J´onn pueda cambiar de forma, y Destino entorpece como puede sus poderes telepáticos.
-Adam...-dice Batman, y no tiene que decir nada más, pues en ese momento, como un rayo negro, Black Adam ataca a J´onn, alzándole del suelo y volando hacia arriba, sujetándole con un brazo y golpeándole con el puño del siguiente, puñetazos que podrían haber partido la Tierra en dos. En cualquier otra ocasión, J´onn hubiera podido reducir el daño recurriendo a la plasticidad de su cuerpo, pero en esos momentos, atrapado como estaba en esa forma por Zatanna y Thunderbolt, cada uno de los golpes de Adam era como un cañonazo o el impacto de un camión. Wildcat, Alan y Troia se unen al ataque, golpeando con todas sus fuerzas al marciano, sin dejarle reaccionar.
-¡Matadme!-grita J´onn, con los ojos abiertos de par en par-, ¡no voy a poder detenerlo, matadme!
Adam cierra los ojos, y sabe lo que tiene que hacer. Y sin más, agarrando con fuerza a J´onn, golpea a Troia, lanzándola hacia el suelo, y hace lo mismo con Wildcat y Alan, que se apartan sorprendidos cuando Adam, recurriendo a la velocidad de Tehuti, vuela alto, lejos de su alcance.
-Que los dioses de Marte guíen tu camino-susurra Black Adam, y entonces, grita.
¡SHAZAM!
El relámpago cae sobre ellos, cambiando a Black Adam en su forma humana, Teth-Adam, y golpeando con violencia al marciano, abrasando cada una de sus células con magia y electricidad.
¡SHAZAM!
Adam vuelve a cambiar, pero no suelta a J´onn, lo mantiene abrazado, a pesar de los estertores que sufre el marciano. Toma aire y grita de nuevo.
¡SHAZAM!
Comienzan a caer, envueltos en el rayo mágico, pero él vuelve a gritar.
¡SHAZAM!
-Lo... lo siento...-masculla J´onn, pero trata de defenderse, y Adam ve en su mente la muerte de su mujer y sus hijos en un tiempo en el que Egipto era joven. Sus ojos se inundan de lágrimas, y con voz quebrada, vuelve a gritar.
¡SHAZAM!
La gravedad tira de ellos con toda su fuerza, vuelven a escuchar el crepitar de las llamas y a oler el polvo del aire. Pero no deja de gritar.
¡SHAZAM!
Y finalmente, se estrellan contra el suelo. El asfalto estalla, como una ola, como si la fuerza del impacto lo hubiera vuelto líquido. Los relámpagos cruzan el cielo, y pronto, llega la lluvia. Batman, Nightwing, Zatanna, Tempest, Jakeem, Destino, el Doctor Midnight, Centinela, Troia, Flash, Wildcat... todos los que continúan en pie se acercan hacia el inmenso cráter causado por la caída de Black Adam, y le ven salir, aún humeante, con el cuerpo desmadejado de J´onn en brazos.
-Se ha acabado-dice Adam, mirando a sus aliados, con el ceño fruncido-. Finalmente, ha muerto bien.
-Lo lloraremos más tarde-responde Batman, negando con la cabeza y mordiéndose las lágrimas mientras señala a su alrededor-. Tenemos mucho trabajo que hacer.
-Batman...-dice Destino, acercándose a Adam y al Detective Marciano-. No está muerto. Vive.
Isla de los Titanes, Nueva York.
-Esto no puede estar pasando.
Bushido masculla un reniego mientras mira a su alrededor, tratando de valorar a lo que se enfrentan. La Isla de los Titanes está bajo asedio, hay todo un ejército rodeando la pequeña isla en el Hudson. Helicópteros, barcazas que transportan pequeños tanques y transportes todoterreno, y docenas y docenas de hombres armados, todos con los un escudo en el hombro, un caballo negro de ajedrez, lo que les identifica como miembros de la agencia Jaque Mate.
Y todo lo que les impide entrar en la Torre, es Nightwing, cruzado de brazos y flanqueado por Arsenal y Troia, mientras Bushido y Argent lo observan todo desde una de las ventanas.
-Vaya, Carter, parece que al final has sacado tus verdaderos colores-dice Roy, sin apartar la mirada de las dos personas que dirigen lo que parece ser el asedio, Amanda Waller y Carter Hall.
-No vas a enfadarme, Roy, así que deja de tirar pullas-responde Carter-. Ahora soy el Rey de Negras de Jaque Mate, y según las nuevas resoluciones de Naciones Unidas, nos corresponde la tutela de J´onn.
-La habéis cagado en Londres-apostilla Amanda, vestida completamente de blanco, al igual que Carter viste de negro-. Mucho.
-Hicimos lo que tuvimos que hacer-responde Nightwing-. Aunque no puedo evitar que pienses que tú lo hubieras hecho mejor, Waller. La fantasía es libre.
-¿Desde cuando los miembros de la Batfamilia hacen bromas?-gruñe Amanda, y da un paso adelante, pero Donna cruza los brazos, entrechocando sus brazaletes, y desciende un escalón, interponiéndose entre Amanda y Dick.
-Te juro por mi honor de Amazona que si das un paso más, te devolveré a Washington o donde sea que tienes tu madriguera con los cuatro miembros inútiles.
-Donna, estoy seguro de que no quieres decir lo que estás diciendo-interviene Carter-. Tengo aquí toda la documentación de la ONU al respecto del nuevo estado de Jaque Mate como agencia de control internacional y las órdenes de que nos corresponde la tutela de J´onn J´onnz...
-Estoy dispuesto a analizar detenidamente cada uno de esos papeles, Carter-dice Nightwing, y Carter, lanza un suspiro y asiente.
-Todo esto no es más que una maniobra para hacernos perder el tiempo-gruñe Amanda, y Roy sonríe.
-Ya sabes cuanto nos gusta tenerte cerca, Waller. Cuanto más tiempo pasemos juntos, más felices seremos todos.
-Esto no me gusta-dice Flash, apoyado en una de las consolas de la sala de reuniones de los Titanes, observando atentamente todo lo que ocurre en el exterior-. ¿Han puesto a Waller a través de una fuerza de control que va a vigilar todo lo que hacemos?
-Ya has visto las opiniones de los noticiarios-dice Mister Terrific, sentado ante uno de los paneles, permaneciendo así en contacto con Tornado Rojo y Oráculo, que se encuentran en la Atalaya y Themyscira respectivamente-. Nos culpan de la destrucción de un barrio completo de Londres... murieron cincuenta y ocho personas, y ciento trece resultaron heridas de seriedad. Hemos asustado a mucha gente.
-¿Crees que deberíamos entregar a J´onn?-masculla Dinah, cruzando los brazos ante el pecho, y tras meditarlo unos segundos, Michael asiente.
-Venga ya, Mike-dice Wildcat-. ¿Para qué? ¿Sabes lo que harán con él? Estudiarle, viviseccionarle, experimentar para conseguir mejores armas, o mejores soldados...
-Tienen los medios necesarios para contenerle-replica Mister Terrific-. Y sabemos que nosotros no. ¿Cuánto tiempo podemos mantener encerrado al Detective Marciano?
-Para siempre si me permitís exiliarle-responde Destino, sombría, pero Flash niega con la cabeza.
-J´onn ha sido nuestro amigo mucho tiempo, Lytta-dice-. No creo que sea tan fácil como...
-¿Dónde está Zatanna?-pregunta Batman.
Themyscira.
Golpe. Golpe. Salto. Golpe. Abajo. Golpe. Patada alta. Salto.
Bette suelta el aire, entrechoca los puños y repite la secuencia frente al maniquí de madera. Y lo hace de nuevo, con más fuerza.
-Me alegra ver que has mejorado-dice Menalippe, avanzando hacia ella y con una sonrisa amable en los labios-. Tu recuperación ha sido prácticamente un milagro, gracias a Atenea.
-Muchas gracias-responde Bette, y siente que la sangre le hierve al escuchar el sonido seco de su voz. Apenas es capaz de mover los labios desde... desde que Vandal Savage la atacó. No hay espejos en su dormitorio. No hay espejos en la sala. Las Amazonas han tenido la piedad de cubrir con telas todas las superficies reflectantes para que Bette no tenga que enfrentarse a su propio rostro. Pero ella lo conoce perfectamente, lo recuerda del momento en que Menalippe, con una oración a Atenea en los labios, le retiró las vendas. No hay piel sobre su rostro, aunque las Amazonas consiguieron recuperar sus párpados lo suficiente como para que siguieran siendo funcionales. Sus lacrimales no funcionan, ni los músculos de su mandíbula, para los que necesitará mucha rehabilitación. No tiene labios, y su nariz es sólo un hueco por el que le aire entra y sale ruidosamente. No dijo nada al verse, pero la palabra que acudió a su mente fue "monstruo"-. Habéis sido muy amables conmigo, y estoy segura de que sin vuestra ayuda, ni siquiera sería capaz de levantarme de la cama.
-Toda la fuerza que has mostrado estaba en ti. Pero me hago una pregunta-dice la Amazona-. ¿Volverá Flamebird a volar?
-No-responde Bette, con un escalofrío-. Su tiempo ha acabado. No sé qué voy a hacer, pero no me siento con fuerzas para... para volver a ponerme ese uniforme.
-¿Sabes? Las Amazonas tenemos un dicho-dice Menalippe, sentándose junto a una baranda para contemplar el mar-. Lo que la luz del sol quema, abunda cuando cae la noche. Y las sombras deben tener enemigos entre las sombras si queremos que la luz siga naciendo cada día.
-No estoy segura de entender muy bien lo que dices-responde Bette, y Menalippe le tiende un fardo que sostenía entre sus manos. Cuando Bette lo abre, deja escapar un sonido de sorpresa, como un silbido a través de los huecos de su boca. Un traje negro, de un tejido semejante al que utiliza Batman, aunque más pequeño, de su talla. Un murciélago silueteado en blanco en el pecho. Una capa que imita la piel de las alas del murciélago. Y la máscara... una máscara parecida a la del propio Batman, con las orejas puntiagudas y el rostro completamente cubierto, tan cerrada que desde el exterior no se podían ver ni los ojos, aunque Bette estaba segura de que la persona que se pusiera la máscara disfrutaría de una perfecta vista, como si aquella tela membranosa no estuviera allí.
-Hay alguien que me ha dado esto para ti. Alguien que me ha dicho que es hora de que Batgirl vuelva a aparecer-dice Menalippe, y Bette la mira atónita.
A unos metros de ellas, Bárbara Gordon se muerde el labio inferior, pensando en si ha hecho lo correcto, mientras se aleja de la sala, empujando con sus brazos las ruedas de su silla.
Isla de los Titanes, Nueva York.
Jesse observa con gesto serio cómo Dick, Roy y Donna continúan discutiendo en la entrada de la Torre con Amanda Waller y Carter Hall, a quienes se ha unido otro hombre vestido de blanco al que Jesse reconoce por los viejos ficheros como Dmitri Pushkin, más conocido entre los miembros de la JLA como Rocket Red. Carter la mira, dice algo a sus acompañantes y a los Titanes, y se separa del grupo, acercándose a ella.
-Creo que ya deberías saber que no tengo nada que hablar contigo-dice Jesse, mirando fijamente a Carter, que niega con la cabeza-. Atacasteis a la JSA por mandato de Luthor y permitisteis que Calculador robase los datos de Mister Terrific...
-Cometimos un error-admite Carter, frente a ella-. Pero he oído que lo habéis solucionado perfectamente. Calculador y Vandal Savage están fuera de la circulación.
-Supongo que si "perfectamente" significa que hay quien tiene que ir solucionando vuestros errores, sí, lo hemos hecho.
-Entiendo que estés enfadada, Jesse, tienes el mismo carácter que tenía tu madre. Pero estoy seguro de que tú, en mi lugar, hubieras hecho lo mismo.
-A mi no me cegaría un patriotismo enaltecido para ponerme al servicio de Lex Luthor, por Dios-gruñe Jesse, y da un paso para alejarse de Carter, pero él la agarra por el hombro-. Si quieres conservar esa mano, será mejor que la apartes de ahí.
-Jesse, precisamente por eso, quiero que trabajes conmigo.
-¿Qué?
-Jaque Mate no ha hecho más que empezar a funcionar, pero aún no está al completo. La ONU aún está debatiendo los nombramientos de la Realeza. El puesto de Rey de Blancas ha estado paralizado por China hasta que Rusia propuso a Dmitri. Ni siquiera Amanda, que fue la primera en entrar, tiene a su equipo completo. Pero el presidente Ross ha conseguido que tres de los cuatro reyes sean estadounidenses.
-Amanda Waller y tú, ya lo veo-dice Jesse-. ¿Y quién es la Reina de Negras?
-Tú-responde Carter, y Jesse abre los ojos desmesuradamente mientras él le tiende un documento sellado por la ONU-. Se ha acordado por unanimidad ofrecerte el puesto de Reina de Negras de Jaque Mate. Estarías en la cima de la pirámide, Jesse, ayudándome a controlar a Waller... y controlándome a mí. Tendrías tu propio equipo de trabajo, libertad absoluta para seleccionar a tu Alfil, tu Caballo y tu Torre siempre que se atengan a la Regla del Par.
-¿Regla del Par?
-Jaque Mate será una agencia completamente simétrica, al menos en lo que a la Realeza se refiere. El mismo número de metahumanos que de humanos. El mismo número de hombres que de mujeres. Tendremos jurisdicción a nivel internacional sobre todos los conflictos originados por metahumanos. Jesse, si Jaque Mate hubiera estado funcionando al cien por cien, quizá hubiéramos podido evitar el desastre de Londres. ¿Qué me dices?
Zatanna observa el cuerpo yaciente de J´onn. Han conseguido sintetizar un narcótico que afecta a su fisiología marciana, y además, Tempest, Destino y ella mismo han puesto poderosos hechizos de salvaguarda sobre él. Y sin embargo, nadie está seguro de cuanto podrán mantenerle preso.
-Puedes salir, Cindy-dice Zatanna, y al instante, una muchacha aparece frente a ella, con los ojos llorosos.
-¿Cómo...?-masculla Gitana, la verdadera, y Zatanna no puede evitar una sonrisa.
-Atravesaste uno de mis hechizos de protección-explica-. Supe que eras tú en cuanto cruzaste los accesos de la Torre de los Titanes. Desde luego, Nightwing y los demás tienen un problema con la seguridad de este sitio. No deberías estar aquí.
-Tenía que verlo-gimotea Cindy-. No puedo creerme que J´onn haya hecho todo lo que dicen que ha hecho. Él siembre ha sido tan bueno...
-J´onn estaba enfermo-dice Zatanna, acercándose a la muchacha-. Ha acumulado dentro de él mucha envidia, mucho odio, mucha ira... y mucho dolor. Probablemente si hubiera sido simplemente humano, no hubiera pasado nada, pero al ser un telépata tan poderoso, y debido al concepto que tienen los marcianos de la identidad como tal, toda esa oscuridad se creó su propia personalidad. Otro J´onn.
-¿Y no se les puede separar?
-No-masculla la maga-. No, porque no dejan de ser la misma persona, Cindy. Destino lo ha intentado, pero esa parte oscura de J´onn no puede ser extraída. Es como un cáncer psíquico que se ha adherido por completo a su mente.
-Lo van a matar, ¿verdad?-gimotea Gitana-. Antes o después, se darán cuenta de que no pueden contenerle y lo van a matar.
Zatanna intenta responder a la muchacha, tranquilizarla... pero se da cuenta de que la muchacha tiene razón. Jaque Mate está a las puertas, y en algún momento, o se enfrentarán a los Titanes y el resto de los héroes reunidos, o estos se verán obligados, probablemente tras consultarlo con Jefferson Pierce, a entregar a J´onn. Y no se hace muchas ilusiones sobre como la agencia tratará al marciano, aunque Carter esté al frente.
-Sé lo que vamos a hacer-dice Zatanna, pasando un brazo sobre el hombro de la muchacha-. Aunque me va a costar muy caro...
La conversación entre los tres representantes de Jaque Mate y los Reyes de Blancas de Jaque Mate se detiene en cuando Batman aparece en la puerta de la Torre, en silencio.
-Este debate ya no tiene sentido-dice, y todos se vuelven hacia él, sorprendidos-. J´onn J´onnz ya no está en la Torre de los Titanes. Ha escapado.
-¿Qué?-exclaman Amanda Waller y Roy al mismo tiempo.
-¿Cómo ha sido eso posible?-pregunta Dmitri, más calmado que su compañera.
-Desconozco los detalles.
-Quiero ver todos los registros de vuestros sistemas de seguridad-ordena Waller, pero Batman niega con la cabeza.
-Imposible. De algún modo todos los sistemas de la Torre de los Titanes han fallado al mismo tiempo. No hay registros de la huída. No podemos ofrecerle nada, señora Waller.
-Esto es...
-El momento de que nos marchemos, Amanda-la interrumpe Dmitri-. No sé qué estáis haciendo, Batman, pero por el tiempo que trabajamos juntos, te voy a dar un voto de confianza. Os lo voy a dar a todos. Pero es el último. Lo que ocurrió en Londres podría haber ocurrido en cualquier lugar, y no voy a permitir que el mundo en el que viven mis hijos sea un lugar en el que nadie controla ese tipo de cosas. Voy a confiar en que estáis haciendo lo correcto, y me voy a llevar a Jaque Mate de aquí. Amanda, tenemos mucha documentación que rellenar, cuanto antes salgamos de aquí, mejor.
Amanda mira a Batman y a los demás como si fuera a decir algo, pero finalmente, niega con la cabeza y baja las escaleras.
-¿Qué demonios ha pasado?-masculla Arsenal.
-Zatanna-dice Batman, y Nightwing niega con la cabeza.
-Sólo espero que sepa lo que está haciendo.
En algún lugar del Himalaya.
Después de mucho tiempo, finalmente J´onn abre los ojos y mira a su alrededor. Se encuentra en una sala amplia, con un suelo de baldosas en el que se puede distinguir un sencillo motivo decorativo, una espiral roja. El aire huele a incienso, y la luz, tenue, procede de cuatro pequeñas lámparas de aceite situadas en los cuatro puntos cardinales de la habitación. Y hay alguien más con él ahí.
-Me alegra ver que por fin estás despierto-dice una voz amable, y J´onn se incorpora, aún aturdido, para encontrarse frente a un hombre de anciano aspecto, ataviado con una sencilla túnica de color azafrán y una sonrisa abierta pintada en su boca desdentada.
-¿Dónde estoy? ¿Y qué estoy haciendo aquí?-pregunta el marciano. Su mente aún está nublada, pero siente que algo se va encendiendo dentro de él, como una gran ira comenzaba a despertarse en su interior, como si se estuviera resquebrajando una presa dentro de él...
-Bienvenido a Nanda Parbat-dice el anciano, sin dejar de sonreír-. Rama Kushna te espera.
Epílogo 1
Isla de San Jano, Pacífico Sur.
Brion Markov casi no puede evitar una exclamación de sorpresa al ver el entorno paradisíaco en el que Jaque Mate ha establecido su base, una pequeña isla situada en el Pacífico Sur. Uno de los agentes de Jaque Mate le había recogido en Pearl Harbour para llevarle hasta allí en un pequeño barco, y ahora Brion estaba en lo que podría ser el Paraíso Terrenal... de no ser por la inmensa fortaleza de alta tecnología que dominaba el interior de la isla, una torre prácticamente cilíndrica, coronada por varios pináculos y antenas. Y mientras baja del barco, Brion puede ver como lo que debe ser el comité de bienvenida aparece en la playa. Son cinco personas, todas vestidas de negro, de las cuales, Geofuerza reconoce inmediatamente a dos, el Rey y la Reina de Negras. Los demás, por su uniforme, deben ser agentes de base, aunque sospecha que la Torre del Rey de Negras probablemente no este muy lejos. Brion Markov apenas ha oído algunos rumores sobre la mujer llamada Li Shen, a la que los chinos habían llamado Asesina Zorra Fantasma, pero Brion sabía que era imposible verla si ella no decidía revelarse.
-Me alegra ver que te has recuperado de las heridas causadas por Vandal Savage-dice Carter Hall, acercándose a Brion, y tendiéndole una mano, que Brion estrecha con firmeza.
-La medicina de las Amazonas es prácticamente milagrosa-dice Brion, mientras la Reina de Negras se acerca a él.
-Es estupendo tenerte aquí-dice ella, y Brion sonríe mientras estrecha la mano que ella le ofrece-. Me alegra que hayas aceptado mi ofrecimiento para ocupar el puesto de Torre de la Reina de Negras. Bienvenido a Jaque Mate, Brion.
-Muchas gracias, Jesse. Muchas gracias.
Epílogo 2
En algún lugar del cosmos.
Los gravitones estallan cuando la brecha entre realidades se abre. Los fotones se curvan, sus trayectorias se rompen mientras se hunden en el agujero negro recién surgido.
Brota una nave.
Luego una segunda.
Y enseguida, es toda una flota lo que aparece.
Al frente de ella, una oscura silueta lo contempla todo desde el mando central. Y sonríe.
La Dama Estigia ha encontrado un nuevo universo que conquistar.
Epílogo 3
Isla de lo Titanes, Nueva York.
-Estás aquí-dice ella, y Dick, sentado en la orilla del río, se gira hacia ella y se incorpora. Por unos segundos, se miran, y finalmente, Dick avanza hacia ella y la abraza.
-Me alegro de verte...
-He venido en cuanto recibí tu mensaje. Siento lo de J´onn, jamás hubiera esperado algo así.
-Nadie lo esperaba-responde él-. Hemos perdido tanto últimamente... Blue Marvel y Augurio desaparecieron, Creeper debe estar en algún punto del espacio; Flamebird aún se está recuperando en Themyscira, y ahora Jesse nos ha dejado para convertirse en la Reina de Negras de Jaque Mate. Al menos, Power Girl ha decidido quedarse, Donna y G´Nort empieza a ser incluso útil.
-Eso sí que es toda una sorpresa. Entonces, ¿con quien contamos en el equipo?
-Roy, por supuesto, y Donna cuando no está ocupada en Themyscira. Bushido y Argent siguen con nosotros, pero tienen poca experiencia, aunque lo compensan con entusiasmo. Power Girl y G´Nort. Y bueno, Tempest ha pedido una excedencia del grupo, pero volverá. Al parecer habló con Destino sobre Atlantis, y la JSA va a ayudarle a averiguar qué ocurrió.
-Bien. ¿Y nosotros qué vamos a hacer?
-Vamos a averiguar por qué demonios Calculador y otros criminales estaban armados con tecnología de Apokolips. ¿Te apuntas entonces?
-Sí, suena bien.
-El equipo te necesita, Kory.
Starfire mira a Nightwing unos segundos, y entonces le besa en los labios, suavemente.
-¿Y tú?-pregunta-. ¿Me necesitas?
Nightwing la mira a los ojos y asiente. Por algún motivo, siente que las cosas van a empezar a ir bien.
CORREO DE LOS TITANES
Fin de "Crisis de Familia" e inicio de la nueva andadura de los Titanes en Marveltopía, con la presentación de la nueva alineación del grupo. Nightwing, Arsenal, Bushido, Argent, Troia, Power Girl, G´Nort y Starfire. En algunos momentos he pensado en dar a la colección un giro más radical hacia los Titanes originales, pero me parece interesante seguir trabajando con personajes como Bushido y Argent, así que vamos a ver qué tal. Bueno, espero que hayáis disfrutado de la saga, y que tengáis ganas de ver todo lo que se acerca en el horizonte. En JSA, tendremos la Búsqueda de Atlantis, en Titanes, la presentación DCTópica de uno de los personajes más representativos de "52"... ¡¡¡y no os perdáis Jaque Mate!!!