Stephanie Brown está soñando. Sueña que va vestida con su traje de Spoiler, patrullando las calles de Gotham y es feliz con ello, surcando por la ciudad y sintiendo golpear el viento contra su cara enmascarada.

Mientras se balancea, ve a una figura al final de un largo pasillo, formado por las calles de Gotham, que se estrechan más y más. Al final del mismo ve una figura pequeñita. Es un bebe.

Ella se balancea más y más deprisa, tratando de alcanzarlo. Pero de pronto, aparece un hombre enmascarado que ella no reconoce bien al principio.

Se trata de su padre, Arthur Brown más conocido como Cluemaster. En el sueño lleva su uniforme de "supervillano" de color anaranjado, con la cara cubierta con un pañuelo, dejando al descubierto solo su pelo rubio.

Cuando Spoiler intenta coger al bebe, su padre le pega un puñetazo que la derriba. Una vez Stephanie se encuentra en el suelo, Cluemaster la sigue golpeando mientras el bebe se va alejando y parece que cada vez está más lejos.

Spoiler intenta levantarse e ir tras él, pero los golpes de su padre se lo impiden.

- ¿Por qué lo haces? ¿Por qué me golpeas?- pregunta una impotente Stephanie Brown.

De repente, Cluemaster se transforma en otra persona. En Deathstroke, el Exterminador.

- Lo hago por que los jóvenes no estáis preparados para ser héroes- contesta el mercenario.

Entonces, Deathstroke le propina a Steph una patada en toda la cara y todo se funde en negro, mientras el bebe se pierde en la negrura.

Stephanie Brown se despertó de sopetón, sudando y gritando. Hacía apenas unos días que había sido apalizada por Deathstroke¹.

Steph todavía se encontraba algo malherida. Por suerte, ayudo bastante el hecho de tener una madre enfermera. No solo por que así ella le podía cuidar en casa sin que nadie en el Instituto pueda ver sus heridas y marcas, sino también por qué así su madre puedo hacerle un justificante médico que la excusó de ir a clase mientras sanaba, para que nadie la viese en ese estado.

La paliza de la que había sido objeto, le había dejado huella a Steph. Las heridas de su cuerpo se encontraban prácticamente curadas, pero, lamentablemente, además de los daños físicos, no se veía preparada para seguir con su labor como intento de vigilante enmascarada.

No solo eso, sino que ahora su madre no confiaba nada en ella. Después de haberle dicho hace meses que no volvería a hacer de Spoiler, fue todo un shock para ella encontrarse a su hija malherida y habiendo desobedecido su palabra.

En verdad, Stephanie Brown no tenía motivos para continuar siendo Spoiler. Su carrera superheroica tan solo le había reportado como recompensa un fracaso tras otro: una hija perdida, unas relaciones sentimentales fuera de lo ordinario y ahora, para colmo, una paliza y una madre muy disgustada con ella.

Oh, si. Había hecho algún bien que otro, pero desde su punto de vista, no le recompensaba las penurias que estaba pasando. Así que era la hora de dejar que las mallas violetas de Spoiler cogiesen polvo en el armario.

Había compartido esa decisión con su madre, pero naturalmente tras haberle mentido con anterioridad, no le había creído. Y eso le quemaba por dentro.

Stephanie Brown se dio media vuelta tumbada en su cama e intento volver a dormirse, con la esperanza de tener un sueño más agradable.

No obstante, media hora más tarde, alguien golpeo la ventana de su habitación.

Por unos instantes, se temió que fuese Deathstroke que volviese a terminar lo que había empezado, pero no se trataba de él. Steph se percató que los golpecitos que sonaban en la ventana de su cuarto eran código Morse. Y en esos momentos la palabra que sonaba en dicho código era "Robin".

Stephanie se levantó y abrió su ventana. Efectivamente, allí estaba apoyado en la barandilla de la misma, agarrado como buena mente podía, Tim Drake, más conocido como Robin.

- Robin, que sorpresa- dijo Steph, extrañada de encontrarse con su ex - novio.

- ¿Cómo te encuentras?- le preguntó- Me he enterado de lo que ha pasado con Deathstroke y quería decirte que...

- No te molestes. Si venías a darme la charla acerca de que no valgo para ser una heroína llegas tarde. Lo he dejado- le interrumpió Steph.

- No es eso- le corrigió Tim Drake- quería decirte que ojala te recuperases pronto. ¿Por qué estás tan agresiva?

- Oh- se sorprendió Steph- lo siento. Perdóname por no recibirte con los brazos abiertos tras pasarte meses sin querer saber de mi, después de que cortásemos².

- Steph, siento mucho el haberme alejado de ti. Pero necesitaba hacerlo- se excusó Robin.

- ¿Y se supone que eso me tiene que hacer sentir mejor?- dijo una indignada Steph.

- Lo siento- replicó Robin.

- ¿Te piensas pasar el resto de nuestra charla disculpándote?- se enojó Stephanie.

- Si. Si es lo que hace falta para que seamos amigos- contestó Tim Drake.

- ¿Amigos? ¿Tras todo lo que hemos vivido? - dijo Stephanie Brown- ¿Pasas de mi durante meses, y ahora me dices esto?

- Mira, Steph, por favor. Demos un paseo y hablemos- sugirió Tim.

- ¿No me oíste antes? No pienso balancearme contigo por los tejados. Ya no quiero ser Spoiler.

- No me refería a eso- contestó Robin quitándose la máscara- Me refería a dar un paseo tú y yo juntos, como Tim Drake y Stephanie Brwon.

Franchesco Monaguigui se encontraba en su sede, sentado en un sillón. Realmente, se encontraba muy indignado y enfadado. Estaba que trinaba.

Tras el encuentro entre Deathstroke y Spoiler, no se había vuelto a ver a la joven heroína. Monaguigui empezaba a temerse que Slade la hubiese matado. Y eso que le había dicho que la necesitaba con sus maquinaciones. Encima, el mercenario no le contestaba las llamadas. Era como si se hubiese esfumado de la faz de la tierra.

Tim Drake y Stephanie Brown se encontraban paseando por el parque Robinson, a la luz de la luna.

- Has tenido doble suerte, Robin. De que mi madre estuviese en el Hospital para así poder escaquearme, y de que te dijese que si a salir a pasear contigo- dijo una enardecida Stephanie.

- Lo se y lo merezco- contesto Tim.

- Vaya, que fácilmente te rindes- sonrió Stephanie.

- Mira, Steph. Tú tenías razón. Yo me equivoque- reconoció Tim.

- Uau. Tú no eres Batman, tú reconoces tus errores- exclamó Steph.

- Stephanie, debo decirte algo. Por favor escúchame- suplicó Tim.

Stephanie Brown calló por una vez en su vida y asintió con la cabeza.

- Fui un estúpido. Durante toda nuestra relación te mantuve alejado de mi vida privada personal y privada. Incluso cuando fuimos novios, me negaba a desvelarte mi identidad secreta- empezó a decir Tim.

- Tuvo que ser Batman el que te dijese mi verdadero nombre. En su momento me enfade mucho. Bueno, lamentablemente ya viste que incluso di por finalizada nuestra relación por eso. Son cosas de las que ahora me arrepiento- continuó Tim.

- Por ahora vas bien, Robin-interrumpió Steph.

- Steph, déjame continuar. Por favor- le pidió Tim.

- Vale, Vale, ya cierro el pico- contestó Stephanie.

- Nos iba tan bien siendo solamente "Robin y Spoiler", que me cerré siempre en banda a complicar todo, y que fuésemos también "Tim y Steph". Era todo un mundo para mi y se me echaba todo encima- se sinceró Tim.

- Era demasiado egoísta. Desde que nos conocemos, sabía que eras Spoiler. Y sin embargo, no te di el voto de confianza de decirte que era Tim. Incluso estaba todo ese asunto de que me conocieses como "Alvin Draper"... Fui un iluso. Toda mi vida, ocultándote quien era... cuanto tiempo perdimos.- se explayaba Tim.

- Incluso ahora que sabes quien soy, no puedes evitar llamarme "Robin" inconscientemente. Me he tenido que enterar de que tuviste un encontronazo con Slade Wilson y de que te pudo haber matado para que se me hiciese un nudo en la garganta. Y que solo pensase en ti y en todo el tiempo que hemos perdido. Cuanto tiempo perdido por nada- se desahogó Tim Drake.

- Tim, yo te he echado mucho de menos- dijo Steph.- Siempre estuviste para mi en los malos y en los buenos momentos. Y no me importaba que fuera como Robin, sin impórtame quien fueras detrás de tu antifaz. Al menos, al principio. ¿Recuerdas todo el jaleo con esa chica en el hospital? ¡Que pillada me hizo mi madre³!

- Pero entonces, cuando Batman me mostró que eres Tim Drake, y tú reaccionaste de esa forma... Eso me dolió. Me partió el corazón en dos. Me quemaba por dentro ver que de alguna forma fuese buena para tu llamémosla "identidad ficticia" de Robin, pero no buena para el ti "autentico", para Tim Drake- dijo Stephanie con lágrimas en los ojos⁴.

- Eso no es cierto, Stephanie- le consoló Tim- tú eres lo suficientemente buena para cualquier persona del mundo. Eres la mejor chica del mundo y yo he sido un idiota al querer restringirte de una parte de mi vida. Te necesito tanto siendo Robin como siendo Tim. Te quiero.

- Oh, Tim. Yo también te quiero- fue la respuesta de Stephanie.

Ambos se fundieron en un abrazo y sus labios se besaron apasionadamente. Los dos jóvenes enamorados por fin se habían reencontrado.

Norm Grant se encontraba en su casa preocupado. Ya había pasado una semana desde que se citó con Franchesco Monaguigui y sin embargo, no había recibido noticias nuevas acerca de él⁵.

Por una parte era un alivio para él, pero por otra necesitaba sacar adelante a su familia, aunque eso implicase hacer algo ilegal.

No obstante, esperaría, por que ante todo el bienestar y manutención de los suyos, es lo primero. Además, Monaguigui le dijo que el instante en el que supiese algo o le necesitase, le avisaría.

Al fin y al cabo, tenía el fajo de billetes que Franchesco Monaguigui le había dado como adelanto de lo que serían sus servicios.

Y habría que preguntarse una cosa, ¿Norm estaba inquieto por que Monaguigui no le había avisado para realizar ningún encargo o por qué existía la oportunidad de que en cualquier momento le sonase el teléfono y se encontrase involucrado en algo ilegal?

Tim y Steph se encontraba caminando, disfrutando de la noche. Iban agarrados de la mano y se miraban con ojitos de amor.

- ¿Y ahora qué?- le preguntó Tim a Steph.

- Quiero seguir conociendo a Tim Drake. He llegado a conocer muy bien a Robin, y ahora conocer a tu otra mitad. Tenemos mucho tiempo perdido que recuperar.- fue lo que le dijo Stephanie a Tim.

- Así será- sonrió Tim.

Tim paró de caminar un momento y dejó en el suelo la mochila en la que llevaba su traje de Robin. La abrió y sacó un traje completamente nuevo de Spoiler, no como el que quedó destrozado tras la pelea con Slade Wilson.

- ¿Qué estás haciendo, Tim?- preguntó Steph- He dicho que ya no soy Spoiler. Mira todo lo que me ha costado.

- Lo sé. Y te conozco mejor que nadie. Por eso se que aunque te lo niegues a ti misma, Spoiler es necesaria- dijo Tim Drake.

- Hay supertipos a patadas. Incluso Gotham cuenta con su propia fauna de vigilantes enmascarados. Todos mucho mejor preparados que yo. Hasta Deathstroke lo supo ver- se excusó Stephanie.

- Pero tú tienes algo, Stephanie. Incluso Batman se percató de eso. Recuerda que te estaba entrenando en el momento en que rompimos, motivo por el que aparcaste las visitas a Batman- le dijo Tim- Tardamos en darnos cuenta, más de lo que hubiésemos debido, pero tú tienes mucho potencial.

- ¿Y de qué me sirve ponerme más este traje? ¿Para volver a ser apalizada por alguien como Deathstroke?- preguntó retóricamente hablando Stephanie.

- No-contestó Tim- servirá para que puedas salvar a la gente y a que ayudes a hacer el bien. Tu motivación original para ponerte el traje de Spoiler fue detener a tu padre, Cluemaster. Con el paso del tiempo, llegaste más lejos y continuaste adelante, pese a la oposición de mucha gente a que fueses Spoiler. Incluso, lo sabes, con la mía. Hasta que te fuiste ganando la aprobación de mucha gente. Como te he mencionado antes, hasta la de Batman.

- Pero... ¿Y si no estoy suficientemente preparada?- empezó a dudar Stephanie.

- Nadie realmente lo está- confesó Robin- Ya estabas empezando a brillar con luz propia, pero quiero que sepas que me tendrás a tu lado cuando me necesites. Vales mucho y lo suficiente por ti misma, pero te echaré una mano siempre que me necesites

- ¿Y qué pasará con mi madre?- dudó Stephanie- Ya van dos veces que le he dicho que dejaría de ser Spoiler. No creo que nunca me perdonase una tercera mentira.

- No tienes por que hacerlo. Sincérate. Dile que necesitas a Spoiler, por que Gotham la necesita. ¿Y todas las vidas que has salvado? ¿Y las que puedes salvar todavía? Tus actuaciones han salvado y cambiado vidas. No tires la toalla, eres una luchadora y no quiero que cambie jamás de forma de ser.

Stephanie cogió el uniforme de Spoiler y lo contempló. Su (de nuevo) novio tenía razón. Ella era una luchadora. Había pasado por mucho en esta vida como para permitirse rendirse ahora.

Además, ¿qué pasaba con gente como la anciana que había salvado el otro día? Fue ella quien detuvo a ese atracador. No Batman, ni Nightwing, ni Robin. Fue Spoiler quien salvó el día.

En el momento en que Slade Wilson se topó con ella, se encontraba buscando información acerca de Franchesco Monaguigui. Este criminal había estado organizando golpes en Gotham, ¿y se iba a ir de rositas? No, si ella podía evitarlo.

- Tienes razón, Tim. Soy Spoiler- dijo una sonriente Stephanie.

Monaguigui había salido a dar un paseo, necesitaba despejarse. Ya había esperado demasiado. Sino es Spoiler quien se encarga de mandar a la cárcel a Norm Grant, será otro vigilante enmascarado de Gotham o incluso la Policía.

Pero ya no podía esperar más. Había esperado años hasta poder dar con la ocasión de vengarse de Grant por lo que le ha quitado y la paciencia se le estaba acabando. Hubiese sido su deseo que Spoiler se encontrase involucrado por mandar a la cárcel a varios de sus hombres, pero había llegado la hora de ponerse en marcha.

Sin embargo, un regalo le había caído del cielo.

Franchesco Monaguigui alzó la vista y vio con sus propios ojos algo que le alegró la noche. Se trataba de Spoiler, balaceándose por la ciudad junto al mocoso que acompañaba a Batman, Robin.

A fin de cuentas, esa zorrita enmascarada, había decidido salir de su escondite. Monaguigui se frotó las manos y abrió la boca con alegría. Por fin podía poner en marcha los últimos movimientos para que Norm Grant acabase entre rejas.

Mientras Monaguigui fraguaba planes de venganzas añejas, Spoiler y Robin pararon su balanceo por las calles de Gotham para aposentarse en un tejado.

Spoiler se subió la máscara hasta media cara y besó apasionadamente a su novio.

Presentía que las cosas serían más sencillas en lo sucesivo, ya que volvía a tener una fuente de apoyo, que irónicamente le había recordado que ella era una chica fuerte que podía con todo lo que se le presentase.

Spoiler estaba de vuelta. ¡Y que se preparase ese Monaguigi por que le iba a patear el culo!

1.- ¿No me digas que te perdiste el número anterior?

2.- En el Universo DC: Robin Nº 6 de Planeta.

3.- También en el Universo DC: Robin Nº 6 de Planeta.

4.- Definitivamente el Universo DC: Robin Nº 6 de Planeta es imprescindible.

5.-En el número anterior.

ALERTA DE SPOILER

Tomás Sendarrubias García: Leído el número 2 de Spoiler. (Bueno, leído el primero también, pero no saqué tiempo en su momento para comentarlo). Me gusta como presentas a Steph, parlanchina aunque esté recibiendo ostias como panes (que es lo que le toca en este número). Muy intrigante la lista que lleva Deathstroke.. Pero que muy intrigante.. ¿Qué será...? (Je, je, je).

Muchas gracias, Tomás. Así es Steph, pase lo que pase, no cierra su boquita… aunque puede que sea lo último que haga.

Sobre esa lista, habrá que permanecer atentos a DCtopia, pues las sorpresas pueden irse sucediendo jejejejeje

Y hasta aquí el correo de este número. Si os ha gustado el número próximamente habrá otro.

Be Happy!!! Acordaos de que espero con ansía vuestros comentarios: davidguiradoalzira@hotmail.com