LINTERNA VERDE #144
La noche más oscura II
Guión:
Ben Reilly
Portada: Israel Huertas
- Las estrellas, la luna, una pequeña cena sobre un mental a cuadros. ¿Quién puede negar que soy un romántico?
- Has olvidado mencionar el gigantesco asteroide asesino que puede arrasar la Tierra.
- Aguafiestas.
Kyle Rayner y Jennie-Lynn Hayden, ambos el último reducto de lo que una vez el fue el Cuerpo de Linterna Verdes, una especie de cuerpo de policía intergaláctico que acabó siendo traicionado y destruido por aquel al que consideraban el más valiente entre ellos: Hal Jordan. Gracias a su anillo, Kyle había creado una improvisada merienda de plasma verde para entretenerse un poco mientras los hombres de la NASA terminaban de estudiar un asteroide que se dirigía rumbo a la Tierra.
- Linterna Verde, aquí control Houston ¿me recibe?
- Afirmativo Houston.
- El capitán Black ha realizado la maniobra de despegue. Estamos listos. En su turno.
- Entendido Houston. Vamos a patear a ese asteroide fuera de nuestra galaxia. Corto -Kyle miró hacia Jen que negaba con la cabeza-. ¿Qué?
- "Vamos a patear a ese asteroide fuera de nuestra galaxia" Lameculos...
- Un poco de drama nunca viene mal.
- Drama sí, hablar como en una peli de Bruce Willis...
Kyle hizo caso omiso de las burlas de Jen y concentró toda su voluntad para que el anillo crease un gigantesco calón de alta tecnología que medía por lo menos metro y medio en cuyo lateral se podía leer: "Cañón para destruir asteroides gigantescos que amenazan con destruir la vida en la Tierra, marca ACME"
- A veces eres demasiado friki.
- ¿Sólo a veces?
Kyle disparó un potente rayo al asteroide pero éste ni se inmutó. El joven Linterna Verde miró a Jen y ésta se encogió de hombros. Kyle volvió a disparar con idéntico resultado.
- Se me ocurren tantos chistes sobre nuestros problemas en la cama que no sé por dónde empezar.
- Muy graci... ¿qué problemas en la cama?
- Concéntrate Charlton Heston... asteroide asesino directo a la Tierra... cosa muy mala.
El cañón de Kyle creció otro metro y medio. Ésta vez Jen ayudó a Kyle y ambos dispararon con todo el poder que tenían pero el asteroide seguía sin querer explotar.
- Oh, oh... esto se pone feo.
- Llamemos a más gente.
- No llegarán a tiempo. Debemos avisar a la Tierra para que se preparen por si algo sale mal.
- Vale -Jen se quedó pensativa-. Pero no digas...
- Houston, tenemos un problema.
- ... eso... nos enfrentamos a la destrucción total de la Tierra y tú haces chistes.
- A Spider-Man le funciona
Ganthet no podía creer lo que veían sus ojos. En los últimos días había oído rumores pero hasta que no lo vio con sus ancianos ojos no pudo creerlo. El planeta Oa, situado en el centro del Universo, vivía de nuevo.
No podía explicar lo que había ocurrido. Kyle Rayner y Hal Jordan habían destruido el planeta en una encarnizada lucha años atrás... y los plantes no se reconstruyen así como así. Bajó hasta la superficie. El planeta era un erial, no había vida sobre él.
- Te he estado esperado, Ganthet, último Guardián.
Ganthet se dio la vuelta y se encaró con una forma humanoide envuelta en una túnica negra con capucha que impedía ver su rostro.
- ¿Quién eres? ¿Has hecho tú esto?
- Deberías conocerme. Soy un viejo amigo.
- ¿Jordan?
Los dos Linterna Verdes se acercaron al asteroide. Si no podían destruirlo quizás podrían desviar su trayectoria pero parecía ser imposible de nuevo. El condenado asteroide seguía su camino hacia la Tierra.
- No vamos a conseguirlo -dijo Jen-.
Y como por arte de magia el asteroide explotó. De su interior salieron decenas de seres con trajes rojo y el pelo aparentemente ardiendo.
- ¡Efigies! -gritó Kyle-.
- ¿Los lacayos de los Controladores?
- Esos mismos.
- Se dirigen hacia Nueva York.
- En marcha
Las Efigies eran la respuesta de los Controladores a los Cuerpos de Linterna Verdes. Siendo una distinta evolución de los Guardianes de la Galaxia, los Controladores querían destruir la maldad del universo por medios no necesariamente morales. Para ello, primero crearon las Estrellas Oscuras y más recientemente las Efigies siendo el primero de ellos Martyn Van Wyck, un terrestre al que habían abducido y modificado genéticamente. Al igual que los Linterna Verde, las Efigies podían crear constructos sólo que en vez de utilizar plasma verde utilizaban fuego. Van Wyck habían resultado ser un duro adversario, una auténtica némesis en más de un sentido pero las ansias de control de los Controladores sobre sus criaturas hicieron que les lavaran el cerebro hasta convertirlos en lacayos obedientes sin un ápice de imaginación o voluntad. Seguían siendo poderosos, pero menos.
- Tú encárgate de los ciento veinte de la derecha -brometó Kyle-.
Ambos Linterna Verde empezaron a crear inmensos y variados constructos que iban dejando fuera de combate a decenas de Efigies. Kyle era el que más Efigies derrotaba, creaba todos los constructos con un poder casi igual al de un Linterna Verde de verdad y ni siquiera estaba sudando. Tampoco notaba ninguna reducción de energía en el anillo. ¿Hasta dónde llegaban sus poderes ahora mismo?
Sumido en sus pensamientos como estaba no notó que una fortachona Efigies se le acercaba por la espalda. Un león de dos cabezas de puro fuego le atacó. Si no hubiese sido por el campo de fuerza que siempre le protege probablemente habría muerto abrasado pero hoy estaba de suerte. Concentró su poder en crear una versión de Mr. Spock que le hizo la extraña llave Vulcano a la Efigie dejándola inconsciente.
- ¡Kyle! -gritó Jen-.
Sin haberse percatado, el golpe que había recibido de la Efigie le había hecho perder el control de sus constructos. Varias Efigies campaban a sus anchas, una de ellas levantaba un autobús escolar. La tragedia casi se palpaba. El fuego de la Efigie alcanzó el tanque de combustible. Unos horrorizados padres que esperaba la vuelta de la excursión de sus hijos vieron cómo el autobús explotaba. Kyle se movió rápido, como nunca había hecho hasta ahora y creó varias burbujas que protegían a los niños. Pero no fue lo bastante rápido para salvarlos a todos de la explosión; siete niños habían sido parcialmente alcanzados. Los padres gritaban hasta la extenuación. Kyle depositó a los heridos en el suelo mientras varias personas se acercaban para atenderlos. Debía llevarlos al hospital pero Jen no podía encargarse sola de tantos enemigos, tendría que acabar con ellos o esperar a los refuerzos.
Volvió a la batalla. Creó construíos pero estaba bastante limitado porque mientras tenían un ojo en el combate, otro lo dedicaba a observar a los niños heridos. Vio cómo varias enfermeros atendían a una niña que parecía estar especialmente grave, estaban practicando una respiración cardiopulmonar . La madre de la niña se abrazaba fuertemente a su marido que intentaba contener las lágrimas sin querer mirar lo que ocurrían pero sin poder apartar la vista.
Y los enfermeros se rindieron. La madre comenzó a gritarles para que siguieran pero ya no había nada que hacer. Las heridas de la niña eran demasiado graves. Había muerto.
- Es suficiente -dijo Kyle-.
Tomó una decisión. Aquello iba a acabar ahora mismo. Todo lo que había estado reservado, las limitaciones que se había impuesto, todo el poder que había mantenido dormido en su interior por miedo a las consecuencias, lo dejó salir. Fue como una liberación, un orgasmo de puro poder, de fuerza de voluntad concentrada. De su anillos brotaron constructos, uno por cada Efigie. Cada constructo era una copia del propio Kyle, perfecto en cuanto color y reproducción; y cada copia gozaba del mismo poder que Kyle.
La batalla acabó en segundos, justo cuando los primeros refuerzos llegaban a la ciudad. Kyle no les hizo caso y se fue hacia la niña muerte. Jen vio a su padre, Alan Scout, quien había sido conocido como Linterna Verde pero ahora se hacía llamar a si mismo Centinela.
- Papá.
- Jen... ¿qué ha ocurrido?
- Hubo una explosión y los niños... una niña ha muerto, Kyle no llegó a tiempo de salvarla.
- Ve con Kyle, te necesita.
Jen se acercó a Kyle. Casi le da un infarto cuando vio a la niña supuestamente muerta levantarse y echar a correr. Todo había sido un error. Fue a disfrutar de las buenas noticias con Kyle quien seguía de rodillas en el suelo, probablemente medio aturdido con todo lo que había pasado.
- Eh, toda ha salido bie... Kyle, ¿qué ocurre?.
Kyle estaba aturdido ciertamente. Miraba de arriba abajo sus manos llenas de la sangre de la niña.
- Jen... creo que acaba de resucitar a los muertos.
Continuará.
EL OJO DE OA
Hola
Vayamos con los comentarios a los números que se postean en el foro de MarvelTopia, el primero es de Xumer:
"No me ha gustado demasiado, las conversaciones (que son casi todo el número) me resultan algo forzadas y con los interlocutores intercambiables. De todas formas es un comienzo y estos siempre son dificiles, seguro que mejora..."
Ajá, bueno, intentaré mejorar algo los diálogos.
El segundo comentario es de Jerónimo Thompson
"Me ha gustado el número. Aunque apenas se presenta el conflicto que va a tratar esta primera saga de la serie, la lectura es agradable y deja con ganas de leer el próximo."
Era un número de introducción básicamente. Además el desarrollo de los acontecimientos se ve un poco lastrado porque hago los números más cortos de lo habitual para intentar tener una periodicidad decente.
"Probablemente, todos los personajes tienen un exceso de "alegría en el cuerpo" algo insual, y aunque este enfoque queda bien en la primera escena, durante la conversación de Kyle y Jen, termina resultante un poco chocante en las demás; pero lo dicho, siendo el primer número de la serie tampoco molesta demasiado."
Vale, los diálogos de los personajes no han calado :D La verdad es que intentaba que pareciesen extra alegres, algo pasado de rosca y huir un poco del drama y la seriedad que parece que siempre tienen los personajes de tebeos... aunque puede que me haya pasado un poquitín
"Por otra parte, tengo curiosidad por ver hacia dónde lleva su autor el tema del incremento de poder de Kyle (que en los cómics condujo directamente hacia Ión y el regreso de los Guardianes).."
Ya lo harás viendo, en este número se habla de ello :P Y yo no esperaría ver esa cosa rara de Ión por aquí.
El siguiente comentario es de José González, que algún día escribirá la LJA, lo ha prometido :P
"Linterna Verde. Je.
Me he acostumbrado a su nombre en ingles."
Pues muy mal, ¿qué tiene de malo el nombre en castellano? Tampoco es que lleve un Boy, un Kid o algo así que es donde queda mal traducirlos pero el resto...
"Que originaaaal el título"
Más vale lo malo conocido y requetesobado que....
"Joder, que mania con la máscara. Vale que no es un gran maravilla, pero, ¿de verdad un antifaz es tan bueno para ocultar una identidad como las gafas de Clark Kent?"
No... pero es una tradición. De todas formas de lo que me quejaba en esa escena no era que llevase máscara si no que la máscara pareciese un cangrejo... por no hablar del resto del traje "original" brrrrrrr
"Me resulta curioso que Radu sepa quien es Kyle realmente."
Cosas de Marz :P
"Lo del incremento de poder y el miedo de no poder controlarlo, ¿nos llevará de nuevo a un Linterna Verde/Ión?"
Dios no :P
"Linterna es el recurso de última hora de la Liga. Si es que no le dan una oportunidad"
Más bien de la NASA o quienes fueran... el pobre tiene malas relaciones públicas, a la gente le cae mejor un asesino :P
Y creo que nada más.
Preguntas, sugerencias y demás a ben_reilly@terra.es