CORUSCANT
Las medidas de seguridad eran demasiado grandes para intentar un ataque
frontal así que habría que hacerlo con el máximo cuidado posible. Si la
operación fracasaba y era descubierto no podría acercarse ni al sistema más
remoto de la galaxia sin que ningún caza recompensas le siguiera la pista.
por no hablar del Caballero Jedi.
Jaster Mareel miró a sus dos compañeros, Gozniak y Brizca que estaba
preparando el armamento por si acaso eran descubiertos. En las alturas de
Coruscant el carguero Legado de Jaster esperaba pacientemente la llegada de
tres mercenarios que supervisarían el resto de la operación desde la nave.
La operación era complicada, habían contratado a unos cuantos mercenarios de
poca monta para que montaran una distracción a modo de pelea de bandas justo
por donde debía de pasar el transporte del objetivo. Con suerte, algunos lo
de los vehículos de seguridad se verían obligados a desviarse para zanjar la
pelea. En ese momento se iniciaría la fase dos, el androide astromecánico
del vehículo había sido trucado por Brizca así que, si no había ningún
problema, debería intentar estrellarse contra uno de los edificios más
cercanos. Por supuesto los acompañantes del objetivo desactivarían al
androide de inmediato pero no antes de estar lo suficientemente cerca de la
pared del edificio donde Jaster había instalado una bomba.
Era rápido y efectivo, aunque todo dependía de si la unidad astromecánica no
había sido revisada o reemplazada antes de partir. Si el plan no daba
resultado probarían la solución menos sigilosa que era abrirse paso mediante
tiros hasta el vehículo y volarlo en pedazos. Tendrían que esconderse
durante mucho tiempo en los niveles inferiores de Coruscant pero valdría la
pena por todo lo que iban a recibir a cambio. Y después sólo faltaría un
paso para la completa aniquilación de los Jedi y la vuelta de los
mandalorianos al lugar que siempre los correspondió en la galaxia.
Leia Organa Solo se había quedado de piedra. Delante de ella estaba Mara
Jade, antigua Mano del Emperador, una especie de correo secreto que sólo
respondía directamente ante el Emperador. Por si eso era poco, Mara había
afirmado estar embarazada de Luke Skywalker.
- Esto es. desconcertante -dice Leia mientras se pasa la mano por la cara.
Mara no le caía muy bien-.
- Eso como poco. escucha. estoy cansada del viaje y veo que tienes
obligaciones -dice Mara señalando a varios diplomáticos que han salido de la
habitación para ver qué pasaba. Leia los miró molesta-.
- Ahora seguimos, sólo será un momento. ¿Tienes dónde alojarte?
- Sí. Karrde me ha alquilado un pequeño piso.
- Será mejor que te quedes por aquí cerca en el Palacio Imperial. Le diré a
Trespeó que te consiga una habitación.
- No necesito quedarme por aquí
- Sí lo necesitas. Antiende Mara, si algún imperial se entera de tu
situación puede intentar aprovecharse y ejecutar una venganza personal
contra Luke.
Mara asintió. Cualquier cosa que le hiciera sufrir a Luke sería bienvenida
entre los imperiales.
- Hablando del Jedi, ¿dónde está Skywalker?
- Se ha marchado. No me ha dicho adónde iba. Escucha Mara, ahora estoy muy
ocupada, tengo un planeta en la ruina que va a arrastrar a todo un sector a
la misma posición económica; por si fuera poco tenemos problemas con los
suministros, los corsarios están muy activos últimamente y para terminar el
embajador Yevethano viene a vernos.
- ¿Los Yevethanos? ¿La Nueva República va a hacer tratos con el Cúmulo de
Koornacht?
- Sí. Mon Mothma quiere conseguir una alianza con ellos.
- No creo que sea buena idea. Los Yevethanos son agresivos por naturaleza y
desprecian a las demás razas, se consideran a sí mismos los seres más
perfectos de la galaxia.
- ¿Y qué los distingue de las otras razas? -dijo medio en broma medio en
serio Leia. No había raza en la galaxia que no se creyera la elegida para un
destino grandioso-.
- Alimentan a sus crías con sus enemigos. Es bastante desagradable.
Palpatine tuvo que enviar a Vader para que pacificara todo el cúmulo. Luego
se descubrió que sus aptitudes para la mecánica eran extraordinarias y ya
sabes cómo trataba el Imperio a su mano de obra.
- Ackbar también ha insistido mucho en esta reunión.
- No me extraña. El Cúmulo de Koonarcht disponía de unos de los astilleros
más modernos de todo el Imperio y además tenía la Flota Negra, 13
Destructores clase Imperial II de última generación armados hasta los topes.
Tuvisteis suerte de que los Yevethanos se hicieran con el control de la
flota 6 meses después de que atacaseis Endor si no os habría costado mucho
derrotar al Imperio.
- Razón de más para firmar un tratado con los Yevethanos. No queremos que un
incidente estúpido nos lleve a una guerra -los diplomáticos habían vuelto
para decirle a Leia que se apurara-. Está bien, ahora vuelvo, un poco da
paciencia. Hablaremos más tarde Mara, puedes pedirle a Trespeó que te haga
compañía mientras tanto.
- Puedo suicidarme yo solita Leia.
Las dos mujeres rieron.
Mientras tanto, Wedge Antilles, héroes de la Rebelión, entraba con paso
firme y decidido en la sala de espera del despacho del almirante Drayson.
Un androide de protocolo plateado salió a su encuentro.
- Soy M3JB. ¿En qué puedo servirle?
- Quiero ver al almirante. Ya.
- ¿Tiene cita?
- El general Rieekan me ha dicho que podría verle.
- El general Rieekan no está autorizado a modificar la agenda del almirante.
Lamento informarle de que tendrá que pedir oficialmente una cita para poder
ver al almirante.
- De acuerdo -odiaba los androides y sobre todo los de protocolo, eran
totalmente insoportables-. Y si solicito una cita oficial ¿cuándo podré
verle?
- Dentro de tres semanas estándar.
- ¡¿Tres semanas?! Dentro de tres semanas estaré en Fondor convertido en un
instructor militar. Tiene que ser ahora.
- Lo siento comandante pero no puede ser. El almirante es una persona muy
ocupada, como sabrá está al mando de la Segunda Flota y además.
Sin pensárselo dos veces Wedge desenfundó su desintegrador y apuntó
directamente a la cabeza de M3JB quien imitó como buenamente pudo un
respingo.
- Quiero ver al almirante.
- Me temo que no.
No esperó a que acabara la frase y disparó. Acto seguido dos guardias de
seguridad aparecieron apuntando sus rifles hacia Wedge quien miró hacia el
droide y sonrió. Los guardias le siguieron la mirada y sonrieron, no era la
primera vez que pasaba eso. Sin embargo y para asegurarse escanearon a Wedge
en busca de armas y se las confiscaron.
Wedge entró en el despacho del Almirante Drayson. El despacho restaba
bastante desordenado, cientos de hojas de plastipapel y decenas de cuadernos
de datos estaban esparcidos por todo el suelo. Hiram Drayson había sido
comandante de la flota de defensa de Chandrila donde conoció a Mon Mothma y
ésta le ofreció el mando de la nave cuartel de la Alianza, un puesto de
máxima responsabilidad que Drayson aceptó gustosamente. Drayson era conocido
dentro del ejército como uno de los pocos militares a los que el papeleo no
les disgustaba. Siempre decía que prefería rellenar mil formularios que
tener que comandar una flota hacia la batalla. Tendría que haberlo
desmentido inmediatamente, la mayoría de los militares se habían aprovechado
de su gusto por el papeleo para mandarle cientos de informes incompletos o
cosas peores con lo que Drayson normalmente estaba metido debajo de una
montaña de papeleo.
- Almirante Drayson.
- Comandante Antilles, no le esperaba.
- Su droide me dejó pasar amablemente.
- Oh -dijo con una sonrisa en la boca-. Ya van siete en este mes, Ackbar va
a caer sobre mí como siga enviándole tantas facturas de reparación. Pero
dígame, ¿qué le trae por aquí?
- Me han reasignado.
- Ah bien, entiendo ¿no le gusta su nuevo destino?
- ¡Quieren que sea maestro en la academia de Fondor!
- No veo el problema. Servir en Fondor es un honor, podrá inculcar todos
conocimientos a las nuevas generaciones.
- ¡Pero yo no quiero ser un maestro! Soy un piloto, me gusta estar en la
carlinga de mi Ala-X con cientos de cazas TIE a mi alrededor intentado
matarme. Además no pueden reasignarme ahora, la mayoría de mi escuadrón o
se ha jubilado o ha sido destinado a otros escuadrones, el Escuadrón Pícaro
necesita de mi ayuda para reorganizarse.
- Estoy seguro de que el comandante Celchu y el teniente Darklighter podrán
encargarse de ello.
- ¿Le han dado el mando a Tycho?
- Exacto.
Bueno no era tan malo noticia. Tycho era de los primeros Pícaros y de los
pocos que seguían vivos. Había luchado en Endor y en Bakura y su prometedora
carrera se había visto truncada cuando fue capturado por el Imperio. Aunque
pudo escapar, la amenaza de que fuese un traidor hizo que la Alianza
desconfiara de él hasta el momento en el que pudo probar su inocencia poco
después de la toma de Coruscant.
- Mire Antilles, si no le gusta su destino siempre puede hablar con Ackbar,
estoy seguro de que el almirante le escuchará.
- Ha ido a su mundo para supervisar el despliegue de un nuevo crucero Mon
Calamari. He intentado contactar con él pero su droide me dice que está
demasiado ocupado para verme. y no tengo un desintegrador lo suficientemente
potente como para hacerle callar.
- Entiendo su situación pero ¿qué quiere hacer? El comandante Celchu ya se
ha hecho con el mando del escuadrón, no puedo decirle que todo ha sido un
error ni por usted.
- Seguro que tiene algún escuadrón que pueda dirigir.
- Por supuesto. pero no estoy seguro de que haya muchos pilotos dispuestos a
trabajar con usted. Admítalo, aunque haya mejorado con los años, el índice
de supervivencia de sus camaradas es del 17%... Estos son tiempos de paz, la
gente no quiere tener que compartir escuadrón con un hombre demasiado
atraído por el peligro.
Por primera vez en toda la conversación Wedge se sintió abatido y sin
ninguna esperanza. O aceptaba el puesto en Fondor o se retiraba de la vida
militar ¿para hacer qué?. La guerra era lo único que había tenido en los
últimos años. Tenía amigos sí, podía intentar abrir algún tipo de negocio
pero no quería que su carrera militar acabase así, jubilado por no tener
adonde ir.
- ¿No hay ninguna escapatoria?
Drayson le miró fijamente. No le gustaba lo que le estaba pasando a Wedge,
era un héroe de la Rebelión, había luchando en Yavin, en Endor, en Bakura,
había participado en la toma de Coruscant. no era justo lo que le estaba
pasando pero a veces la justicia era un término de varios significados.
- Bueno quizás haya una posibilidad.
- ¿Cuál?
- Siempre ha tenido sobre la mesa su ascenso a general. quizás sea hora de
aceptar la oferta.
- Nunca he querido ser general, implica mucha responsabilidad. Además
tampoco podría estar sentado en mi Ala-X.
- Lo sé pero es eso o es irse a Fondor. Como general de la Nueva República
yo mismo tendría cierto poder de decisión sobre usted y ya sabe que andamos
bastante cortos de buenos estrategas. podría entregarle la patrulla de un
par de sistemas fronterizos. no sería lo mismo que luchar en su Ala-X pero
al menos no tendrá una pandilla de novatos a su alrededor.
Wedge suspiró. Durante años se había negado a ser ascendido a general, él
era un piloto de cazas y eso era lo que le gustaba hacer. Todavía recordaba
el día en que Luke le dijo que sólo había aceptado el rango de general
porque iba a retirarse del servicio en activo para dedicarse a restaurar la
Orden Jedi.
- ¿Es mi única opción?
- Yo diría que sí. O acepta el rango o prepara el equipaje para Fondor.
Wedge resopló.
- Entonces acepto, seré general.
Drayson sonrió y se levantó rápidamente de su silla. En la pared derecha,
justo debajo de un cuadro holográfico de Chandrila, pulsó un pequeño botón
que hizo que se abriera un cajón secreto. Allí Drayson sacó una hoja de
plastipapel.
- En el Alto Mando apostábamos sobre cuando aceptaría el ascenso. Creo que
le debo al almirante Ackbar cien créditos. Por cierto, hablando del
almirante.
La puerta del despacho de Drayson se abrió y el almirante Ackbar entró con
paso firme ante la mirada atónita de Wedge que empezaba a comprender lo que
había pasado.
- ¿Qué clase de encerrona es esta?
- Es una sugerencia del general Madine a petición mía -explicó Ackbar con su
característica voz grave-. Teníamos que convencerle de aceptar ese ascenso.
- Sus capacidades como líder y estratega están de sobra probadas. Endor,
Coruscant, es usted el perfecto general sólo que está empeñado en reducir su
valía a la carlinga de un caza.
- Los cazas que le recuerdo almirante volaron la primera Estrella de la
Muerte.
- Sí, sí. No estaba diciendo que la labor de los cazas no sea importante,
bastantes veces me han salvado de situaciones peligrosas. Lo que estaba
diciendo es que usted sirve para dirigir una flota de naves y eso no es algo
que se pueda desperdiciar.
- Como sabrá si sigue los noticiarios políticos, y si no pronto tendrá que
hacerlo, antes de que el Senado volviera a funcionar el Consejo Provisional
decretó la división de la marina en varias flotas. La Primera Flota y
Segunda Flota están aquí en Coruscant, protegiendo todo este sector. La
Tercera Flota se encuentra en mi planeta natal, Calamari y la Cuarte Flota
está en el sistema corelliano. El resto son pequeñas flotas de sistemas sólo
válidas para la defensa de los mismos. Desde la división no hemos podido
disponer de un conjunto de naves lo suficientemente grandes como para atacar
a los restos del Imperio. Eso ha cambiado.
- Antes de que el Senado redujera nuestro presupuesto militar se ordenó la
creación de una Quinta Flota cuya misión sería la de moverse por todo el
territorio de la República según se requiriese. La Quinta Flota ya está
preparada para entrar en acción.
- Y es suya general Antilles. A partir de ahora tiene la mayor y más
avanzada flota de la Nueva República en sus manos. No la haga desaparecer en
su primera misión.
BIRMAT
Han y Lando descansaban plácidamente en sus literas pensando en todo lo que
había ocurrido desde que fueron hechos prisioneros en Galagea. Había llegado
a Birmat donde un grupo de rebeldes les había liberado pero lo más
sorprendente es que esos rebeldes luchaban contra los Jedi.
- ¿Podrían ser Jedi renegados? -preguntó Lando intentando averiguar qué es
lo que pasaba-.
- Es una opción pero hay demasiadas interrogantes, si son Jedi ¿por qué se
aliaron con el Sol Negro? ¿Y por qué Palpatine no los mató?.
- Quizás haya una única respuesta para las dos preguntas. Probablemente
contactaron con el Sol Negro buscando protección contra Palpatine.
- No, el Sol Negro nunca se opondría directamente a Palpatine y menos con
sus propios soldados. Aquí pasa algo más.
La puerta de la celda se abrió. El joven Kyp Durron y tres soldados
armadazos aparecieron para llevarles hasta un pequeño edificio donde los
registraron varias veces para asegurarse de que no tenían ningún arma. Luego
les llevaron dos pisos hacia arriba y les dejaron solos delante de una
puerta. Han y Lando se miraron preguntándose qué estaba pasando allí y por
qué nadie les había dicho una palabra. Abrieron la puerta, se encontraron a
una mujer de unos 60 años con la cara totalmente arrugada y con varias
heridas de las que emanaba un asqueroso líquido verde.
- Pasad -dijo la anciana desde la cama donde se encontraba. Tenía varios
aparatos médicos a su alrededor que controlaban sus constantes vitales-. Os
he estado esperando desde hace mucho tiempo.
- ¿Es usted Garitha? -preguntó Han-.
- Sí. y vosotros debéis ser Han Solo y Lando Calrissian. ¿Me equivoco?
- No -dijo Lando-. ¿Qué le ocurre?
- Estoy enferma. Una larga enfermedad. Él quería que sufriera.
- ¿Quién quería que sufriera?
- Quería que todos muriésemos porque sabía que éramos los únicos que
podíamos detenerlo. Pero éramos arrogantes y eso nos perdió, no descubrimos
la verdad hasta que fue demasiado tarde.
Han y Lando se miraron sin saber qué ocurría.
- Lo siento. A veces olvido en presencia de quién hablo. Yo fui una Jedi.
NAL HUTTA
Había llegado la hora. Con el último envío de tropas la flota Hutt ya
contaba con los suficientes efectivos como para comenzar su plan de
conquista. Darth Aveng había sido ciertamente muy generoso. Durga sabía que
había hecho un gran trato. Aprovechándose de sus contactos en el mundo de
las finanzas y del mercado negro había provocado crisis deliberadas en
varios sistemas cercanos a su frontera y en algunos no tan cercanos pero sí
importantes. La Nueva República tendría que destinar parte de sus naves al
transporte de alimentos para evitar el hambre, bien es cierto que podrían
contratar a contrabandistas pero Durga se había encargado de ayudar a la
disolución de la Alianza1 y también había pagado generosamente a los
demás para que rechazasen la oferta de la República.
Y ahora era el momento, con la flota de la República protegiendo el Núcleo,
los demás sistemas estaban relativamente desprotegidos. Las naves que Darth
Aveng servirían para ir conquistando planetas, además había prometido una
distracción adicional. Pronto los Hutt tendrían todo lo que se merecían como
seres superiores que eran y para ello sólo tendrían que ceder una parte de
la galaxia a Darth Aveng. al menos hasta que tuvieran las suficientes
cámaras de clonación como para gestionarse un ejército propio y eso sería
muy pronto, más de lo que Darth Aveng pensaba.
- Noble Durga, nuestras fuerzas están listas para saltar al Hiperespacio.
- Perfecto general. Ponga rumbo a nuestro primer objetivo
El futuro de los Hutt acaba de empezar.
CONCLUIRÁ
1.- Como vimos en nuestro Star Wars #2
PRÓXIMO NÚMERO: el Halcón llega a Coruscant; una misteriosa figura contacta
con Gantoris en Galagea; Han y Lando reciben un importante regalo; la flota
Hutt sigue atacando planetas y se produce un asesinato en Coruscant. Todo
esto en la conclusión de Transiciones de Luz y Oscuridad.
LA TASCA DE MOS EISLEY
Holadola
¡¡Tenemos cartas!! ¡¡Yupi!!. Pero antes de nada recordaros que sigue abierto
el concurso para elegir el nombre del hijo de Luke y para elegir a los
próximos miembros del Escuadrón Pícaro, alguna carta hay sobre esto.
Empezamos con un mail de Dob, guionista del Motorista Fantasma (sí, esa
serie que parece un crucigrama hecho con Sánchez Dragó jejeje). Hace una
crítica estupenda sobre el número 6 que por lógica debería haber puesto en
el 7 pero quién ha dicho que soy lógico. Bueno, al trabajo que me voy por
las ramas. Dice que el número es muy visual y que lo mejor es que las
escenas de lucha están muy bien narradas y no son nada confusas. Caramba, mi
ego va a llegar a la cima de Coruscant jejeje. bien, gracias siro eso, la
verdad es que siempre me preocupan las escenas de lucha sobre todo la lucha
con espadas de luz que es complicada de plasmar por escrito sobre todo
cuando puedes ver algo parecido en las propias películas (aunque esto puede
ayudar). Continuando con el mail Dob reflexiona sobre la visualidad (bonito
palabro, ojalá exista) del número diciendo que ayuda el hecho de conocer a
los personajes de la saga y supongo que el entorno que los rodea, vamos,
después de ver el Episodio I y II todo el mundo sabrá cómo es Coruscant. Las
cosas negativas que resalta (para que veáis que no es todo peloteo y que no
me invento esta carta. las otras tampoco. en serio. de verdad. palabra de
buen fan de Jar Jar) es que las frases son MUY largas con lo que estoy
totalmente de acuerdo, a veces me paso escribiendo textos y textos
kilométricos (sobre todo en esta serie). Intentaré corregirlo. Por último da
un consejo general para todos los escritores de MarvelTopía que es dejar
descansar unos días nuestros números y luego releerlos para pulirlos tanto
estilísticamente como ortográficamente. Buen consejo.
Seguimos con los mails, esta vez le toca el turno a la Le Chose que escribe
Clandestine si mal no recuerdo. Bien, nos dice Chosi, puedo llamarte Chosi
¿verdad? Esto. nos dice que es una gran idea contar con una serie de Star
Wars como la que se hacía antes en Marvel. no sé si tomármelo como una
crítica feroz a la serie jejeje, venga, algunas historias de Marvel estaban
bastante logradas, ahora mismo recuerdo una donde aparecía un Obi-Wan justo
después de acabar las Guerras Clon que estaba bastante lograda aunque claro,
ahora ya no entraría en continuidad como la mayoría de esas historias de
Marvel. ¿Qué estaba diciendo?. En fin, me alegro de que quieras leerte el
resto de los números para saber de qué va la serie. no si al final resultará
que tengo lectores y todo.
Por último tenemos a Luis Capote escritor de Peter Parker: Spider-Man,
Lobezno y Capitán Facha.. esto América siempre me confundo jo. y también
tenemos a Fordcopp escritor del Halcón, Excalibur y Defensores y que sólo se
lee el correo de mi serie el muy perro jejeje. En fin, estos dos elementos
(esto va con cariño) dan alguna respuesta a nuestro concurso. Sólo comentaré
una cosa: esto me pasa por preguntar XDDD
En fin, no hay nada más que comentar. Hasta el próximo número. Ciao
ben_reilly@terra.es